El Comunismo, No el Socialismo, Garantizará la Salud Para Todo

EE. UU. – Socialistas demócratas como Bernie Sanders piden “Medicare para todos”. Esta es una reforma capitalista que continuará el racionamiento racista, sexista y anti-clase obrera del cuidado de salud en EE.UU. No pondrá fin a la atención médica capitalista ni a las relaciones de producción capitalistas que anteponen las ganancias a la vida y el bienestar humano.

La medicina en el capitalismo es con fines lucrativos. No puede satisfacer nuestras necesidades. Millones, muchos de ellos niños, mueren anualmente por falta de medicamentos básicos que sus familias no pueden comprar. Las ganancias capitalistas impulsan la investigación. El capitalismo les oculta a las masas los conocimientos de la atención de salud. A menudo, simplemente pone una curita rápidamente a alguien para que vuelva a trabajar o al campo de batalla lo antes posible, sin resolver el problema medico.

Las revoluciones rusa y china produjeron avances dramáticos en el cuidado de salud de las masas. Estos avances son una pequeña muestra de lo que son capaces las masas movilizadas para el comunismo. Sin embargo, fueron limitados y luego revertidos porque estas revoluciones instituyeron el socialismo, no el comunismo.

Médicos Descalzos: Movilizando a las Masas Comunistas Puede Garantizarles el Cuidado de Salud a Todos

Las masas en la China rural no habían tenido acceso a médicos. El partido comunista chino se movilizó para entrenar a dedicados obreros agrícolas comunistas para que fueran médicos. Eran entrenados durante varios meses en ciencia, diagnóstico y tratamiento. Luego volvieron a trabajar en el campo junto a sus compañeros, tratando las enfermedades de estos y enseñándoles cuestiones médicas. Este ciclo se repetía por años.

Las masas los querían y confiaban mucho en ellos porque trabajaron junto a ellas.

Sin embargo, había dos distintos y desiguales sistemas de salud en China: uno rural, el otro urbano.

Los hospitales de las ciudades hicieron algunos cambios importantes. Los pacientes y sus familias desarrollaron relaciones con los trabajadores de la salud. Estuvieron involucrados en discusiones sobre la causa y el tratamiento del problema. Especialmente en la década de 1960, durante la Gran Revolución Cultural Proletaria (GPCR), se les animó a hablar libremente con los trabajadores del hospital, en las reuniones de estos de crítica / autocrítica, acerca de la atención del paciente.

Pero debido a las limitaciones del socialismo, la mayoría aceptó que los trabajadores de la salud estaban divididos por estatus en médicos, enfermeras, ordenanzas, conserjes. Seguían manteniendo la jerarquía de la medicina capitalista.

Durante este tiempo, rugía una lucha política masiva. Por un lado (la izquierda) estaban los que querían pasar directamente al comunismo, eliminando rango, privilegio y dinero. Entre ellos había veteranos que habían vivido sin dinero, salarios o rango cuando estaban en el ejército revolucionario.

En el otro lado estaban los que querían el socialismo, con dinero, salarios, rangos: o sea capitalismo dirigido por el Estado. Esto incluyó al liderato del partido, que luchó para mantener y expandir el sistema salarial y una economía de mercado. Pudieron derrotar violentamente a la izquierda porque la izquierda tenía ilusiones en Mao las cuales le impedían organizar su propio partido de masas para luchar directamente por el comunismo.

Cuando los elementos pro capitalistas ganaron el control de China, superexplotaron a los trabajadores y revirtieron los logros de las masas. El programa de médicos descalzos terminó. Los hospitales se convirtieron en instituciones médicas capitalistas donde la atención médica está racionada y los doctores dan órdenes.

Hoy China es un país capitalista e imperialista. Los ricos obtienen lo mejor de todo y las masas obreras sufren. Pero, los logros anteriores muestran que las masas obreras – rurales y urbanas – pueden aprender rápidamente todo lo que necesitan para luchar por el comunismo, tratar enfermedades y organizar vidas saludables.

Comunismo, Ciencia y Salud

El comunismo, a diferencia del socialismo, eliminará completamente el dinero, el mercado y la explotación. Los colectivos de nuestro PCOI masivo reemplazarán el “nexo del dinero en efectivo” del capitalismo.

Todas las ciencias, incluida la biología, la medicina y el materialismo dialéctico, serán propiedad de las masas, quienes las avanzarán. Los niños comenzarán a aprenderlas desde una edad temprana, combinándolas con el juego y el trabajo. La teoría y la práctica irán juntas, como con los médicos descalzos.

No habrá escasez de trabajadores de la salud, ya que muchos serán entrenados en detectar, tratar y curar enfermedades. Cada centro de producción incluirá obreros con este conocimiento y experiencia, y el equipo necesario para hacer frente a cualquier emergencia.

Compartiremos la responsabilidad por la salud mental y física de todos. El capitalismo celebra el “individualismo feroz”. El socialismo promovió la responsabilidad colectiva, pero su base material (salarios y producción de mercancías) socavó la ética colectivista.

En el comunismo, los colectivos organizarán todos los aspectos de la vida y lucharán para superar todos los obstáculos como el racismo y el sexismo. No habrá patrones ni amenazas de ser despedidos, o quedarse sin hogar o pasar hambre. Por lo tanto, habrá menos enfermedades mentales y las que haya se tratarán basadas en las relaciones comunistas de camaradería.

En las instituciones de salud, todos ayudarán a diagnosticar y tratar enfermedades, así como a asear. Todos aprenderán y enseñarán. El comunismo desatará el vasto potencial de la humanidad.

No debemos dejarnos engatusar por esquemas socialistas. ¡Las reformas no detendrán la necesidad imparable capitalista de maximizar las ganancias y lanzarse a la guerra! Para la salud y la vida de la clase obrera, necesitamos movilizar a las masas para el comunismo.

Primera página de esta edición

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