¡Luchemos por el Comunismo!
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Este es el periódico de la clase trabajadora. Obviamente no recibimos ayuda económica de los capitalistas, sus fundaciones ó ONG's. Por favor colabore generosamente para ayudar a cubrir los costos de producción y distribución.

Comentarios sobre, “Odio el Capitalismo, pero tengo dudas sobre el Comunismo”
Leímos tu carta y las inquietudes que manifiestas en relación con el comunismo en la carta de Bandera Roja, publicada en el Vol. 6 N° 17. Sabemos que bajo el capitalismo es el hambre, la miseria, la explotación y opresión de la clase trabajadora.
El área en que trabajas –mercadeo y ventas- se ocupa precisamente de colocar bienes o servicios, en su mayoría no necesarios para la sociedad. Se discutió el tema con una compañera y concluimos que bajo el capitalismo se imponen patrones de consumo y patrones de comportamiento, mediante los medios publicitarios, televisión, internet y como consecuencia de imponer un patrón de consumo en la sociedad, entonces se controla la producción de bienes, es decir, se produce según gustos y preferencias, A o B.
Ese esquema se conoce como libre mercado, neoliberalismo, globalización; aquí se crea una sociedad consumista. Pero, la producción de bienes de consumo está controlada por la clase dominante que posee los medios de producción, misma que utiliza la publicidad engañosa para vender, se monopoliza lo que en apariencia es preferencia del consumidor, por ejemplo, el mercantilismo induce el consumo Coca-Cola, cierto tipo de cerveza, que utilices determinada marca de tenis.
Bajo el capitalismo no importa el valor de uso de un producto, importa su valor de cambio, por lo tanto, el proletariado es explotado para obtener la máxima ganancia que va a los bolsillos de la clase patronal.
En el Comunismo, en cambio, se dará toda la importancia al valor de uso, en ese sentido creemos que deberá abolirse la publicidad mercantilista; la publicidad como tal, durante la construcción del comunismo deberá cumplir una función, pero no de tipo mercantil, más bien, campañas publicitarias masivas contra el racismo, contra la explotación, abrazando el Comunismo; ahí creemos que tú puedes contribuir.
Movilizar a las Masas para el Comunismo establece uno de nuestros principios rectores: “De cada cual según sus capacidades, a cada quien de acuerdo con sus necesidades” razón por la cual, no hay motivo para creer que todo se homogenizará.
En el PCOI, somos todos diferentes, pero somos una misma clase, tenemos un mismo fin: la revolución comunista para “abolir el capitalismo” y con ello “el sistema salarial” y “la sociedad de clases”; no hay una única expresión, hay crítica, nos guiamos por la práctica como criterio de verdad. Te invitamos a que te nos unas en la lucha por el Comunismo con el Partido Comunista Obrero Internacional.
--Camaradas en México

El Mismo Enemigo, la Misma Lucha
El editorial de la última edición dio el ejemplo de la producción de acero para ilustrar como la sobreproducción pone en juicio al capitalismo. Desde entonces, la crisis se ha extendido.
Según el banco suizo de inversión UBS, el mundo tiene ahora un excedente de 553 toneladas métricas en su capacidad de producir acero. Eso es más o menos el equivalente a 11,000 acorazados de la clase Montana.
Imagínense cuántos centros médicos, centros educativos, apartamentos y centros comunitarios podríamos construir con todo ese acero. Eso es exactamente lo que haríamos en el comunismo (después de que derrotemos al ejército patronal). El PCOI movilizaría a las masas para producir el acero (y todo lo demás) para satisfacer nuestras necesidades colectivas.
Pero bajo este sistema la sobreproducción es una mala noticia para los trabajadores. Todos los días la situación se empeora.
El editorial señala la amenaza de esta sobreproducción  a las industrias de acero de Sudáfrica y México. El diario británico The Independent, dice que uno de cada seis obreros del acero perderá su empleo en Inglaterra este mes. Otros 1,200 serán despedidos conforme TATA cierre fábricas por toda Inglaterra y Escocia.
El centro productivo de EE.UU. será el siguiente. La caída de los precios de las materias primas ha enviado un escalofrío económico desde el Golfo de México hasta la frontera canadiense.
Las plataformas petroleras del oeste de Texas han cerrado. Las plataformas de perforación, con sus profundas tuberías subterráneas, consumen gran parte del acero producido en la enorme planta de United States Steel en St. Louis. La compañía les dijo a más de 2,000 obreros del acero que es probable que sean despedidos el próximo mes. Los mineros que proveen materias primas seguirán.
Recuerdo gritar en las manifestaciones “El mismo enemigo, la misma lucha, obreros del mundo, uníos”. La sobreproducción nos hace ver claramente: la lucha es movilizar a las masas para el comunismo.
--Obrero industrial en EE.UU.

Payaso Racista, Nuevo Presidente de Guatemala
El artículo sobre Guatemala en la última edición de Bandera Roja dice correctamente que el mayor crimen del ex presidente Molina fue “el genocidio racista contra la población indígena del país.” El recién elegido presidente de Guatemala, Jimmy Morales, no es mejor, quizás es peor.
Recientemente dijo que no cree que se haya cometido genocidio alguno durante la guerra civil de 36 años, que mató a 200,000 trabajadores en su mayoría indígenas.
¿Qué más se puede esperar de un cómico que construyó su carrera representando al Negro Pitaya, el estereotipo racista de la gente negra, pintándose la cara de negro? Pitaya habló con una voz infantil haciendo bromas racistas menospreciándose.
Morales sigue defendiendo este personaje, que también aparece en una línea de champús y productos de belleza. Pueda que el Negro Pitaya no sea el peor de sus crímenes, pero permitir que el candidato presidencial principal participe en tales representaciones racistas es inaceptable. ¡Luchar contra el racismo es importante: en Guatemala y en todas partes!
El artículo de Bandera Roja estaba en lo correcto. Las masas deben movilizarse para la revolución comunista. Sólo entonces podremos construir un mundo sin comediantes racistas de caras negras pintadas que promuevan el genocidio racista.
--Camarada de Seattle

Obreros Industriales en Sudáfrica Reciben Gustosamente Bandera Roja

Mis compañeros y yo fuimos a una zona industrial de la ciudad. Era hora de almorzar, así que la mayoría de los obreros salían a comer. Entonces encontramos a cuatro obreros en el portón de una empresa de camiones llamada Nampark. Nos dijeron que estaban allí desde las 6 de la mañana y cuando los encontramos a la 1 PM todavía estaban buscando trabajo. Pero no había trabajo. Así se los dijo la empresa.
Así que les dijimos acerca de nuestro Partido. Uno de ellos me hizo una pregunta interesante: “¿Qué hay en ello para nosotros?”
Le explicamos que bajo el comunismo no tendrán que buscar trabajo porque todo el mundo tendrá trabajo. No produciríamos para el mercado, porque lo aboliríamos junto con  el dinero. Ellos quedaron muy impresionados. Pidieron copias de Bandera Roja y nos dijeron que también asistirían a la conferencia.
Después de eso encontramos a otros trabajadores cuando se estaban sentado preparándose a comer sus almuerzos. Les dimos Bandera Roja. Nos preguntaron cuál es la diferencia entre nosotros y el Partido Comunista Sudafricano (PCSA). Les dijimos que el PCSA estaba tratando de reformar el sistema, pero nosotros queremos destruirlo porque era injusto y malvado. Nos dijeron que debiéramos dejarles algunos periódicos para sus amigos en el municipio. Lo cual hicimos.
Camarada en Sudáfrica

Internacionalismo Comunista
Después de un largo viaje de dos días, finalmente estaba en Sudáfrica, y desde entonces he vivido una nueva experiencia, conociendo a camaradas del PCOI y una cultura con aspectos diferentes.
Reencontrándome con camaradas y conociendo  a nuevos. En estos pocos días he aprendido mucho sobre su cultura, su idioma, su comida, sus casas, sus experiencias. Las condiciones de vida de la clase obrera son similares en todo el mundo, ahí radica nuestro potencial.
Nuestros problemas son similares. El gobierno del CNA (Congreso Nacional Africano), intentó aumentar las colegiaturas a un nivel tan alto que solo 1 de cada 10 jóvenes sudafricanos podría costearse la educación.
Algo irónico y repugnante, ya que el CNA prometió educación capitalista gratuita. La clase obrera en Sudáfrica como en El Salvador, hemos aprendido que no se puede lograr una vida digna dentro del capitalismo mediante negociaciones y elecciones. La lucha por una revolución comunista es la única opción.
Esta ciudad es un claro ejemplo del sistema capitalista y el legado del Apartheid que este mismo sistema mantiene vivo. Puedes ver el contraste entre los vecindarios negros de clase obrera y los vecindarios donde viven los patrones, en su mayoría blancos.
“Muchas cosas no han cambiado. Es cierto que hoy tenemos la “libertad” de estar donde queramos, que ya no existen lugares exclusivos para la gente blanca, pero no hay una libertad económica. Seguimos viviendo en los mismos lugares, seguimos trabajando por bajos salarios”, me comentaba el camarada que me hospeda. La ilusión de libertad en el capitalismo.
En el capitalismo, viajar por el mundo es un privilegio que la mayoría de trabajadores no pueden costearse. Nuevamente, la ilusión de libertad. En estos días he tenido tiempo para pensar en cómo una sociedad comunista, libre de fronteras y racismo, el avance de la raza humana sería como nunca antes visto.
En el comunismo podremos intercambiar experiencias y conocimientos entre toda la humanidad, conocer el mundo, sería un gran cambio incluso en la educación comunista. No habrá fronteras o dinero que nos impida conocer las cosas con nuestros propios ojos.
Fue una grata y emocionante experiencia repartir nuestro periódico Bandera Roja a los trabajadores el día de hoy. Dos camaradas y yo nos desplazamos a una zona industrial. Mientras caminábamos, hablamos y entregábamos Bandera Roja a los trabajadores que regresaban a sus casas o empezaban su jornada. Trabajadores de diferentes industrias leyendo literatura comunista.
También encontramos a uno de nuestros camaradas en su hora de almuerzo, nos mostró la fábrica donde trabaja y seguimos nuestra tarea.
Una primera experiencia que muestra el gran potencial que tenemos como partido en una ciudad industrial. La clase trabajadora se organiza a nivel mundial, el partido pone en práctica el internacionalismo comunista y eso tiene que motivarnos a militar más activamente para el PCOI y Bandera Roja.
--Joven Camarada Obrero

Comentarios de un Lector de Bandera Roja en el Sur de Asia después de leer el panfleto sobre la Educación Comunista.

Leí el folleto sobre la educación comunista. Me ayuda a entender bastante bien las cosas.  Realmente me estoy ahogando en el sistema educativo, donde estoy. Todos los diplomas y especialidades están hechos para servir al imperialismo-capitalismo en nombre de una mejor vida y nacionalismo. Lo único que me mantiene es que estoy aprendiendo y leyendo para desarrollar un trasfondo ideológico para combatir la propaganda imperialista del individualismo. Este folleto es muy profundo. Gracias por enviármelo. Muy pronto leeré el otro.