¡Luchemos por el Comunismo!
	Partido Comunista Obrero Internacional
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Los imperialistas chinos y estadounidenses están jugando en el borde de un conflicto cerca de las islas Spratly. China está construyendo pequeñas islas apilando arena en los arrecifes de la región de la Isla Spratly, islas que son reclamadas por varios países del sudeste asiático. China está construyendo aeropuertos y puertos en estas islas para tomar el control de la región, declarándola posiblemente una zona de identificación de defensa aérea. Las Islas  Spratly son un lugar crucial para el comercio marítimo y una zona económica valiosa por sus recursos naturales.
 La Armada de EE.UU. ha estado deliberadamente antagonizando a los chinos no respetando la zona de amortiguamiento de 12 millas y llevando a sus buques de guerra adentro de la zona. EE.UU. justifica sus payasadas afirmando que la región se encuentra en aguas internacionales, lo que les permite patrullar la zona.
Otro marinero amigo mío fue desplegado en uno de los buques de guerra que se suponía se mantendría alrededor de la zona de amortiguamiento de 12 millas cerca de las Islas Spratly. Durante semanas el único objetivo era patrullar el Mar del Sur de China,  lo cual significaba acechar la zona para molestar a los chinos y proyectar el poderío naval de EE.UU.
Los buques de guerra chinos en cambio constantemente le seguían la pista a los barcos estadounidenses. En un momento estaban siendo seguidos por un buque de guerra chino y otro buque de EE.UU. llegó y siguió al barco chino. En poco tiempo otro buque de guerra chino estaba siguiendo al nuevo buque estadounidense. Por lo tanto, un barco de EE.UU. era seguido por un barco chino, seguido por otro barco de EE.UU. que, a su vez, era de nuevo seguido por otro barco chino. Era una situación muy incómoda.
Los buques de guerra de EE.UU. y de China sostuvieron conversaciones cortas, tensas y torpes, en las cuales cuidadosamente nada importante se decía. Los marineros de EE.UU. les preguntarían a ellos como estaba el clima y ellos respondían. Los marineros chinos les preguntarían a los de EE.UU. cuánto tiempo planeaban estar en la zona y estos responderían que sólo estaban patrullando.
La mayoría de los marineros tenían buenas razones para no querer patrullar el Mar del Sur de China. Por un lado, ellos no querían desplegarse lejos de sus familias y ponerse en peligro sólo para crear problemas en las Islas Spratly. Estaban conscientes que patrullar las Spratly era una situación potencialmente volátil, donde un movimiento en falso podría crear problemas graves. El sentir generalizado era regresar al puerto y evitar problemas innecesarios y peligrosos.
Recientemente, China ha empezado a jugar un juego similar con los EE.UU. Por primera vez, China comenzó a patrullar aguas internacionales frente a la costa de Alaska, coincidentemente o no, durante una visita inusual de tres días ahí del presidente Obama.
 Los marineros saben que ir en busca de problemas a las Islas Spratly no tiene nada que ver con la seguridad de sus amigos y familias. Esta no es nuestra pelea; esta es la pelea entre las dos potencias capitalistas más importantes, y los trabajadores, como siempre, serán usados para pelearla. Esta es la política del imperialismo, no la de los marineros y sus familias.
Los marineros están dispuestos a luchar por cosas que realmente importan - nuestras familias y amigos y la verdadera libertad. Esta no es los “derechos humanos” capitalistas que no impiden que el capitalismo arrase con nosotros en sus crisis económicas cada vez más recurrentes, o la libertad falsa mediante el voto republicano o demócrata. No vamos a arriesgar nuestras vidas para que algunos almirantes en Norfolk nos usen para iniciar una pelea con la Armada del Ejército de Liberación Popular.
La historia del capitalismo ha demostrado que este inevitablemente conduce a guerras. Estas guerras destruyen cantidades enormes de la sociedad, medio ambiente y personas. La decisión de cada marinero se resume en un artículo anterior de Bandera Roja (Vol. 6 # 20.) En el Spratly: “¿Morirá  la clase obrera para perpetuar el poder de nuestros amos o lucharemos por el comunismo?”
Nuestra lucha debe dirigirse contra el sistema que nos empuja a peleas que no valen la pena pelear. La verdadera lucha es  contra el capitalismo y  por el comunismo. En esta importante lucha marineros y soldados son esenciales para nuestro éxito.