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El Comunismo Acabará con los Siglos Ensangrentados de Racismo en la India, Pakistán y Bangladesh

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El líder estudiantil de la Universidad Jawaharlal Nehru (JNU) sigue en la cárcel, acusado de pronunciar un discurso anti-nacional. En su audiencia de fianza un grupo de abogados pro- BJP (el partido gobernante) lo golpearon salvajemente delante del juez y la policía. Ha sido trasladado a un lugar no revelado para más interrogatorios. Más estudiantes están similarmente acusados por cuestionar el ahorcamiento de un musulmán detenido bajo cargos dudosos de atacar al Parlamento de la India.
La 2ª Guerra Mundial dejó al imperialismo británico paralizado e incapaz de gobernar directamente a sus colonias en Asia y África. Cinco siglos de dominio colonial, de dividir y conquistar, crearon numerosos países basados en la religión, el idioma, el origen étnico, etc. En el sur de Asia, la India y Pakistán nacieron de lo que resultó ser uno de los más horribles derramamientos de sangre en la historia moderna. Más de dos millones de hindúes y musulmanes fueron asesinados y 14 millones de personas quedaron desamparados cuando un abogado de Londres fue designado para dibujar una frontera arbitraria para crear a la India y Pakistán. La guerra civil en Pakistán en 1971 creó a Bangladesh cuando el ejército fascista paquistaní masacró y aterrorizó a tres millones de bengalíes.
La creación de la India bajo la dirección del pacifista Gandhi fue visto como la liberación de las masas que habían sufrido enormemente bajo el yugo británico. Similarmente, Bangladesh nació dándoles esperanzas a las masas dominadas por los gobernantes paquistaníes.
Sin embargo, el Partido del Congreso y los actuales gobernantes de BJP han continuado e intensificado la política británica de dividir a los obreros por motivos religiosos. Los obreros minoritarios musulmanes son vistos como anti-nacionalistas y enfrentan discriminación en la educación, empleo y vivienda. Al intensificar el racismo contra los musulmanes, los gobernantes brutalmente discriminan a los obreros dalitas. Los trabajadores musulmanes y dalitas son parte de los 200 millones de trabajadores industriales que crean una enorme riqueza para los capitalistas indios.
El movimiento nacional de la India contra Gran Bretaña fue financiado por los capitalistas indios en auge como Tata, Bajaj y Birla. Hoy en día estos mismos capitalistas, juntamente con los capitalistas nuevos como Reliance y Adani están compitiendo ferozmente en el mercado mundial de automóviles, productos farmacéuticos, textiles, maquinaria pesada, acero, software y energía. Estos capitalistas han financiado al fascista Modi quien utiliza el nacionalismo para ayudarles a estos a explotar a los obreros para mejor competir con los capitalistas en China, Estados Unidos, Europa y de otros países.
En los últimos 20 años la India ha creado más de 100 multimillonarios. La riqueza combinada de los cinco capitalistas más ricos de la India es más grande que la riqueza de más de 800 millones de obreros pobres de la India. El nacionalismo ha creado una enorme riqueza para unos pocos y enormes barrios pobres y terribles condiciones laborales para los obreros industriales que viven en las grandes ciudades.
Las recientes manifestaciones estudiantiles nos han dado la oportunidad de ofrecerles la alternativa comunista a los estudiantes y obreros de la India y otros lugares. El Partido Comunista Obrero Internacional (PCOI) está construyendo un movimiento comunista revolucionario para crear una sociedad comunista sin fronteras, religión, racismo y sexismo.
Sólo el comunismo puede acabar con siglos de condiciones atroces que han encarado los dalitas, musulmanes y otros obreros  porque destruiremos la fundación sobre la cual se ha creado y justificado la explotación. Mediante la construcción de la sociedad comunista que pondrá fin a la producción para ganancias acabaremos con el terror de los multimillonarios, sus gobernantes fascistas y sus prejuicios religiosos anti-clase obrera. Las fronteras que dividen a la clase obrera y las guerras donde nos matamos mutuamente serán eliminadas. La producción para satisfacer las necesidades obreras se basará en la cooperación, no en la competencia entre trabajadores. Nadie estará condenado a hacer el mismo trabajo de por vida. Cada tarea para construir la sociedad comunista será compartida entre muchos y eliminaremos la separación entre el trabajo manual e intelectual.
La construcción de nuestro movimiento comunista no es fácil. Está llena de obstáculos. Sin embargo, el capitalismo crea sus propios sepultureros. Los dalitas en la India, los mineros de Marikana, los trabajadores de las maquilas en El Salvador, Dacca, Los Ángeles, los obreros automotrices en Flint, Michigan y Chennai, la India tienen un enemigo - la clase capitalista. Ellos son pocos, nosotros somos muchos. Los gobernantes tratan de cegar a los trabajadores y estudiantes con el nacionalismo y la religión.
“El comunismo es la doctrina de las condiciones de la liberación de la clase obrera”, escribió Engels. Estamos creando esta doctrina entre las masas, luchando ideológicamente contra el nacionalismo y la religión, entre muchas otras cosas.
En la India, Pakistán y Bangladesh hemos incrementado dramáticamente la circulación de Bandera Roja. Estamos recibiendo una respuesta entusiasta, estudiantes y obreros están ingresando al PCOI. Estamos distribuyendo nuestro documento principal Movilizar a las Masas para el Comunismo y se están haciendo esfuerzos para traducirlo a varios idiomas.
Los nuevos miembros y lectores adquieren más confianza en sí mediante la lucha en torno a nuestra línea política y el estudio de la filosofía y la ciencia comunista del cambio – el materialismo dialéctico. Como un lector en la India, dijo, “He leído todos los artículos de Bandera Roja y me da la confianza de que el comunismo es posible.” Otro trabajador en Pakistán le hizo eco, “Bandera Roja es el mejor periódico del mundo.” Un miembro del PCOI en Bangladesh lo resume así: “Cuando recibo Bandera Roja, todo me parece posible”.