¡Luchemos por el Comunismo! | |
Partido Comunista Obrero Internacional | |
Contactar con PCOI: icwp@anonymousspeech.com | |
ESTADO de WASHINGTO, EE.UU., Abril 11 - Un director corporativo de Boeing reunió a miles de obreros en el sector de aviones comerciales para darles la “buena noticia”. La gerencia introducirá 50 robots en una planta de la fábrica de Auburn. “¿No es so genial?” exclamó.
Cien empleos mas que serán eliminados “, respondió un tornero amigo más tarde.
El objetivo de la automatización en este sistema de ganancias es eficiencia capitalista. Los patrones buscan producir más aviones, más rápidamente con menos obreros. Luego inundan el mercado, provocando una crisis de sobreproducción
Las metas comunistas son todo lo contrario. La producción comunista se dedicará a producir para nuestras necesidades, no para un mercado. Eso lo cambia todo. No más desplomes de mercados causados por la necesidad de los capitalistas de maximizar sus ganancias, inundando así el mercado con mercancía que no pueden vender. Incluso cambiaran la forma en que utilicemos las máquinas, las clases de máquinas que haremos y cómo organizaremos la producción.
La propaganda capitalista afirma que la automatización se utiliza para eliminar empleos inseguros y tediosos. En realidad, la automatización al servicio de las ganancias hace el trabajo más tedioso e inseguro. La compañía ha introducido recientemente una cadena de montaje para mover a los aviones a través del ciclo de producción. Las escaleras han sido derribadas y obreros han sido heridos cuando la cadena avanza despiadadamente.
El comunismo eliminará las cadenas de montaje. No vamos a dejar que una cadena determine qué tan rápido trabajemos o la calidad del trabajo que hacemos. Confiaremos en la sabiduría colectiva de nuestros compañeros/as de trabajo.
En Boeing, trabajamos con una gran cantidad de máquinas que procesan metales: moldando, cortando, doblando, etc. Cuando no haya necesidad de hacer más aviones, podemos trabajar en otros proyectos de metal (pero no bajo este sistema).
Por ejemplo, una camarada trabajó en las escuelas de Seattle. Ella y sus amigos siempre buscaban sillas de ruedas para los estudiantes discapacitados. “Las sillas de ruedas son unas de las cosas más caras del mundo”, ella todavía se queja.
Si viviéramos en una sociedad comunista, los torneros, maestros y trabajadores de la salud podrían encontrar la manera de hacer miles de sillas de ruedas, en colaboración con aquellos que necesitan usarlas. Podrían ser de peso ligero con diseño utilizando aleaciones aeroespaciales avanzadas. Podríamos llevarlas a quienes los necesitan en todo el mundo.
Con el tiempo, empezaríamos a hacer tornos que no estarían dedicados a producir piezas de aviones. Ya no estaríamos sometidos más a corporaciones hambrientas de ganancias. No tendremos que construir las máquinas mortales que Boeing produce (aunque no en Auburn) para los ejércitos imperialistas.
Pasaremos mucho tiempo diseñando máquinas y procesos que cumplan con las diversas necesidades de nuestros hermanos y hermanas de la clase obrera. A veces vamos a dejar de usar máquinas para darles a los frutos de nuestro trabajo un toque personal. ¡Qué vida no sería!
La Balanza Capitalista es una Farsa
Durante la reunión, los gerentes de Boeing proyectaron las Balanzas de la Justicia en una pantalla grande. Un lado tenia una caja llamada “necesidades de la empresa”, el otro “las necesidades de la gente”. Las escalas estaban bien balanceadas. “Eso es lo que queremos hacer”, afirmó el director ejecutivo, “balancear las necesidades de la empresa con las de la gente.”
“Todo en el servicio de las metas y objetivos de la empresa”, concluyó él.
¡Que mentira! El objetivo de Boeing y cualquier otra corporación es maximizar las ganancias. Las únicas “necesidades de la gente “ que les importa son las de los accionistas.
Irónicamente, el candidato presidencial socialista Bernie Sanders había hecho eco de este falso “balanceo” tan sólo unas semanas antes, frente a un mitin en Seattle. “Diremos a las corporaciones que no pueden tenerlo todo”, prometió.
Para empezar, ¿por qué tienen las corporaciones que tener algo? ¿Por qué tenemos que incluso tener corporaciones?
En el comunismo, no las tendremos. En cambio, el comunismo movilizará a millones para establecer centros de producción, integrados con los centros educativos. En vez de trabajar para vivir, vamos a vivir para trabajar para el bien común. El trabajo nos satisfará, no será algo pesado y aburrido que hacemos bajo la amenaza de hambrear y estar desamparados. La producción comunista para satisfacer las necesidades hace todo esto posible.