¡Luchemos por el Comunismo!
	Partido Comunista Obrero Internacional
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En los últimos 50 años el capitalismo desarraigó a cientos de millones de agricultores pobres. Llevándolos de remotas aldeas, en continente tras continente, los ha canalizado hacia fábricas masivas alrededor de mega-ciudades. De esta manera ha reunido ejércitos gigantescos de obreros industriales. Por primera vez en la historia la mayoría de la humanidad depende de un salario para sobrevivir. El capitalismo como sistema mundial es dinámico, triunfante y está emproblemado.
Está emproblemado porque según la Organización Internacional del Trabajo (OIT) ha construido una fuerza laboral de 3 mil millones de obreros asalariados. Lejos de liberarlos, este sistema salarial los ha atrapado. La gran mayoría (75%) tienen empleo casual, parte del tiempo, temporal o sin reportar. Más de 200 millones (y aumentando) están desempleados. Hablarle al trabajador eventual de pensiones, días por enfermedad o beneficios de desempleo es hablarle de fantasías.
El capitalismo está emproblemado porque estas nuevas desarraigadas relaciones de producción han creado una masiva y expandiente base material para la consigna central de nuestro naciente Partido: “¡Aplastemos el sistema salarial – Luchemos por el comunismo!” Y por comunismo nos referimos a esa forma colectiva de vivir  donde dependemos de las habilidades y dedicación de los unos a los otros para nuestra supervivencia diaria en lugar de una cuenta bancaria (inexistente) o un salario (demasiado pequeño).
El capitalismo está emproblemado porque es exactamente esa cultura - la cultura de cooperar  - la que todos estamos aprendiendo. Por supuesto, como lo hacemos varía de un continente a otro. En China, uno lee historias de la cama donde el turno de noche duerme se convierte en la cama donde el turno de día duerme. En EE.UU., el coche que el obrero del turno de día usa para ir al trabajo se convierte en el coche que el obrero del turno de noche necesita para ir a trabajar. Las formas varían pero es la misma cultura cooperativa que es practicada día a día por obreros lidiando en todo el mundo con la crisis del sistema salarial.
Estos son los bloques culturales de la construcción del comunismo. Los estamos practicando en pequeñas colectivas personales. Hasta el momento no se han formado como un objetivo político consciente masivo - ¡Luchemos por el Comunismo! - pero cuando esto se haga, el capitalismo estará aún más profundamente emproblemado. Los grandes capitalistas aquellos con fortunas personales de mas de $50 millones – son solo 123,800 o una de cada 50 mil personas en el mundo. Las probabilidades están a nuestro favor. Nosotros somos los muchos; ellos son los pocos.
Las probabilidades pueden estar a favor nuestro, pero eso no significa que triunfaremos porque el capitalismo también tiene una base material - incluso en las vidas de los que explota. Nuestro profundo sentido de colectividad, por ejemplo, está siendo siempre limitado. Las fuerzas capitalistas limitan este sentido de colectividad con el nacionalismo, usando el lenguaje, la historia, “raza” o religión. O con ideas más individuales como “la familia antes que nada”. Nuestro más grande obstáculo es el reformismo: tratando de mejorar las condiciones de nuestra esclavitud salarial en vez de ser sus sepultureros. 
 Es aquí donde podemos ver la necesidad de un partido revolucionario basado en la clase obrera. Nuestra tarea es construir una fuerza que comprenda nuestra explotación común, su base en el sistema salarial y la necesidad de construir un movimiento que conscientemente abogue por un sistema de producción basado sólo en la gente y sus necesidades, no en salarios y el sistema de ganancias. Ese es el movimiento que el PCOI está construyendo. Únete a nosotros.

Pasadena, CA, EE.UU., 7 de junio - Una multitud multirracial de cientos se manifestaron ante la corte, donde Jasmine Richards Abdullah, activista de Las Vidas Negras Son Importantes, estaba siendo condenada a 90 días de cárcel por “intento de linchamiento”. Este cargo atroz se deriva de un incidente donde Jasmine y otros defendieron a una joven de policías racistas. Las consignas mas coreadas incluyeron “No pueden encarcelar la revolución”. Pero los organizadores predicaron depositar la confianza en Dios, votar, y en los “valores americanos”. Decenas de manifestantes, en su mayoría jóvenes, tomaron copias del folleto del PCOI “Acabemos con el Racismo Movilizando a las Masas para el Comunismo. ¡Debimos haber traído más!