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La reciente crisis política en Israel se centra en torno a dos temas interrelacionados. Uno es la creciente desigualdad económica. El otro es una propuesta de ley, “Israel – Estado Naciónal del Pueblo Judio”, otro ataque mas contra los palestinos.
Esta ley es similar a las leyes europeas anti-estado-nación judías durante la década de 1930. Resolvería la agudizante contradicción, en la afirmación del estado israelita de ser “judío y democrático”, haciendo trizas cualquier apariencia de “democracia” que Israel haya jamas tenido.
Esta es una contradicción del capitalismo. El nacionalismo y la democracia pertenecen a la sociedad de clases. Ninguno ayuda a los trabajadores.
El nacionalismo nos dice que nos unamos con “nuestros” patrones contra otros trabajadores. Sabotea la lucha de clases y nos hace presas de las guerras fratricidas.
La democracia es la forma como los patrones lidian con sus desacuerdos (cuando es posible) sin matarse entre si. Crea la ilusión de que los trabajadores tenemos voz y voto. En realidad vivimos bajo una dictadura de clases, donde los capitalistas-imperialistas administran todo.
La clase obrera internacional debe acabar con este sistema y construir el comunismo. Colectivamente tomaremos todas las decisiones sobre la producción y todos los aspectos de la sociedad.
Eso es lo que los judios y palestinos en Israel, y los obreros de todo el mundo, realmente necesitamos. Sin el capitalismo no habrá ni nacionalismo ni democracia.
Apartheid: Desde Johannesburgo a Jerusalén
Los gobernantes israelíes se refieren cada vez más a un “Gran Israel” desde el Mediterráneo hasta el Río Jordán que es cada vez más como el sistema del apartheid sudafricano que Israel apoyara una vez.
En Cisjordania, los palestinos están bajo el control militar israelí, pero más de medio millón de “colonos” judíos israelíes son gobernados por las autoridades civiles israelíes. La mayoría de los “colonos” viven en las zonas urbanas fortificadas fuertemente, protegido por el ejército israelí.
Estos “asentamientos” y el muro israelí de separación han expulsado a los palestinos de sus tierras y obligado a cada vez mas de ellos a trabajar para compañias israelitas. Muchos no pueden conseguir permisos de trabajo oficiales y están sujetos a los abusos y la superexplotación. Todos están prohibidos de usar el transporte público israelí y son constantemente acosados en puestos de control.
Incluso un ministro del gobierno palestino fue asesinado recientemente en un puesto de control.
En la sitiada Gaza, dice la Organización Internacional del Trabajo, “las cuatro quintas partes de la gente tiene que contar con la ayuda humanitaria, la actividad económica se ha paralizado, y lograr un trabajo decente es un sueño cada vez más distante.”
Dentro las fronteras de Israel de 1948-1067, los ciudadanos israelíes árabes (20% de la población) se enfrentan a la segregación legal y otros ataques racistas. Más de la mitad vive en la pobreza. Trabajadores israelíes árabes urbanos asalariados ganan mucho menos que Judios Mizrahi (de ascendencia asiática y africana), que ganan menos de Judios europeos.
Este racismo baja los niveles de vida para todos los trabajadores israelíes. Un tercio de los hogares israelíes están en la pobreza. Al menos la mitad tiene problemas para pagar la comida, atención médica, medicamentos recetados, y otras necesidades.
¿Quién se beneficia? Los capitalistas! Dieciocho familias israelíes controlan el 60% de toda la riqueza corporativa israelí, principalmente en las industrias más grandes de Israel: la banca y los seguros, los químicos, alta tecnología, y militar.
El comunismo Terminará La Miseria y la Riqueza, el Racismo y el Nacionalismo
El capitalismo obliga a los trabajadores en la esclavitud asalariada bajo la amenaza del hambre. Un monopolio gubernamental sobre la violencia legal permite a los capitalistas a tomar los frutos de nuestro trabajo y echarnos unos trozos.
¡El comunismo terminará todo eso! Vamos a producir y compartir todo lo que necesitamos.El Partido Comunista Obrero Internacional incluye a trabajadores, soldados y jóvenes de cuatro continentes. Una vez que nuestro partido de masas toma el poder, vamos a borrar las fronteras y, con ellos, la base material del nacionalismo.
La lucha política de largo plazo continuará resolviendo las contradicciones ideológicas dentro de nosotros mismos y las masas. Por ejemplo, vamos a luchar contra las ideas nacionalistas que fuimos entrenados a creer y vamos a promover las ideas comunistas que representan nuestras necesidades reales y nuestro futuro.
Lo mismo con el racismo. El racismo no está “en nuestros genes” o la “naturaleza humana”. El capitalismo creó el racismo para prevenir una clase obrera unida levantándose y destruyendo la pequeña clase dominante que a todos nos explota. El racismo ataca a toda la clase obrera. Todos tenemos que destruirlo!
El capitalismo-imperialismo continuamente produce nuevas variaciones de la ideología racista. Se cosecha super ganancias de la mano de obra menos pagado de trabajadores negros, latinos, indígenas, e inmigrantes. El comunismo va a destruir esta base material del racismo y crear la base material para derrotarlo a través de la lucha política aguda.
Movilizando a las masas para el comunismo hoy puede construir duradera unidad de árabes, judíos, drusos, beduinos, cristianos y todos los trabajadores en el Medio Oriente y en todas partes.
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