¡Luchemos por el Comunismo!
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La iniciativa de las universidades comunitarias de Obama sirve a la industria, no a los estudiantes de la clase obrera. Son “buenas” sólo si creemos la mentira patronal que la explotación capitalista es a lo mejor que podemos aspirar. En realidad, la competencia capitalista actual conduce a guerras más grandes. De eso se trata el nuevo movimiento de formación profesional.
El fondo de Obama del 2012 para estas universidades planeaba convertirlas en “centros comunitarios de desarrollo profesional donde las personas aprenden habilidades cruciales que las empresas locales buscan ahora.”
Habilidades para el Futuro de América fue “una iniciativa dirigida por la industria para mejorar la asociación de la industria con las universidades comunitarias” y “proporcionarles a 500,000 de estos estudiantes credenciales reconocidos por la industria que les ayudarán a conseguir empleos seguros en el sector manufacturero.”
El programa para conformar estas universidades al comercio y entrenamiento de carreras, dijo el Ministro de Trabajo Tom Pérez, trató de “alinear el currículo con las necesidades empresariales – para que los estadounidenses listos para trabajar puedan ocupar empleos listos para ser ocupados”. Los empleadores “ayudaran a diseñar el credencial”.

Los patrones ven a los obreros como otro elemento necesario en el proceso de producción. Nos quieren hechos a su medida, como parte de un avión especialmente diseñado. Pero nuestra fuerza laboral es la única fuente de ganancias. Ellos nos necesitan - pero nosotros no los necesitamos. (Ver página 7)
El mes pasado, Obama propuso un Fondo Americano de Formación Técnica para financiar 100 centros para capacitar a obreros con bajos salarios para empleos en campos como la energía, computadoras y manufactura avanzada.
Motlow State Community College (Tennessee) capacita a estudiantes para trabajarle a Bridgestone Tire Company en clases impartidas en Bridgestone. Esto le ahorra a Bridgestone el coste de entrenar obreros mientras trabajan. 
Este programa, elogiado por el ministro Pérez, ayuda al ejército, ya que Bridgestone es un contratista de investigación bélica y un importante proveedor de neumáticos y productos especiales para el ejército estadounidense.
Estas iniciativas estadounidenses tienen paralelos chinos. El año pasado, los chinos lanzaron una gran campaña para fortalecer las escuelas y colegios de formación profesional. “Hay una creciente demanda por graduados de escuelas vocacionales”, dijo el director de una universidad de ingeniería automotriz china construida “a la medida” en cooperación con BMW de Alemania.
China planea convertir 600 universidades a centros de formación profesional. Si esto todavía no sucede en todas las universidades de EEUU, sí lo está en las universidades comunitarias. En ambos países, la publicidad trata de convencer a estudiantes y padres de que la llamada “educación liberal" no es en sus mejores intereses.
Así que hay una creciente “carrera armamentista”, entre dos potencias imperialistas camino a una confrontación global, para producir obreros técnicamente capacitados.
La sociedad de clases dividió el trabajo “mental” del trabajo “manual”. Los gobernantes en todas partes afirman que sólo ellos son capaces de pensar, planear, y gobernar. Esta gran mentira fue clave para el trabajo y la educación capitalista. La idea de “la educación liberal “surgió para distinguir gobernantes futuros y sus profesionales de los obreros agrícolas e industriales.
A finales de 1960, masas de jóvenes y obreros chinos se levantaron en la Revolución Cultural para denunciar las escuelas y universidades capitalistas. En EE.UU., los obreros negros se rebelaron masivamente en las ciudades cuando los estudiantes se movilizaron contra la guerra de Vietnam.
Los gobernantes respondieron expandiendo la educación superior pública, especialmente las universidades comunitarias. La nueva gran mentira fue: “¡Tú también puedes educarte y escaparte de hacer trabajo manual!”
Ahora los gobernantes imperialistas de EEUU y China están atrapados en una contradicción: Ganaron masas a creer sus mentiras sobre la “educación liberal” y la superioridad de mantener sus manos limpias, pero ahora sus fábricas necesitan obreros cualificados para sus guerras comerciales y, no muy lejos, sus guerra de balazos.
Los comunistas entendemos que todo el trabajo requiere de la “cabeza” y las “manos”. Debemos reclutar a las masas en el Partido Comunista Obrero Internacional para ganar una revolución y comenzar a gobernarnos. En nuestros reorganizados lugares de trabajo, todo el mundo participará en elaborar y ejecutar todas las decisiones que involucren la producción, educación, y todo lo demás. El trabajo y el aprendizaje irán de la mano.
Los líderes comunistas de la joven Unión Soviética lucharon fuertemente para implementar el principio marxista de combinar la educación con el trabajo manual.
Lenin y Krupskaya lucharon por la educación “ politécnica”: Todos los niños aprenderían ciencia, teoría política y técnica. Otros líderes del Partido lucharon por “escuelas vocacionales” para la mayoría y formación universitaria para unos pocos.
La segunda línea pro-capitalista, inevitablemente, se impuso, porque la sociedad soviética era socialista, no comunista. Sus relaciones capitalistas de producción (dinero, salarios) exigieron la educación capitalista.
Ahora entendemos la necesidad de movilizar a las masas directamente para el comunismo. En nuestro Partido hoy, luchamos para que todos los camaradas combinen el trabajo teórico y práctico en torno a nuestra línea política.
Los jóvenes deben aprovechar las oportunidades creadas por los planes patronales de guerra, concernientes a la educación vocacional, para entrar en la industria o al ejército y orgullosamente organizar para la revolución comunista.