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SEATTLE, WA., 2 de febrero—-Un grupo de obreros de Boeing se enteró del comentario del forense de Pasco (Washington), “No queremos otro Fergusen aquí.” Un obrero contestó, “Entonces no persigan y ejecuten trabajadores latinos en plena luz del día en una concurrida calle en las horas pico”.
Tres policías de Pasco le pegaron 13 balazos a quemarropa a Antonio Zambrano-Montes, un obrero agrícola de 35 años de edad. La policía admitió que no tenía pistola o cuchillo. ¿Qué otra cosa podían hacer con docenas de testigos y un video viral de YouTube?
Los policías dicen que no tuvieron “otra opción”, porque Antonio les arrojó una piedra.
“Veamos”, especuló otro lector de Bandera Roja en Boeing, expresando en palabras el razonamiento absurdo de la policía. “¡Te perseguiremos a balazos, pero no te preocupes, te daremos una piedra para defenderte!”
Sesenta y ocho mil trabajadores viven en Pasco, más de la mitad son latinos. Yacen en una de las regiones agrícolas más grandes del Estado de Washington.
El policía asesino Flanagan había detenido anteriormente a Mariah Dávila-Márquez en 2012, cuando ella pidió un intérprete después de ser detenida injustamente por un previo pequeño disturbio. Ella pasaba por la escena de un crimen cuando iba a recoger a sus hijos después de terminar su turno en la fábrica de Tyson Foods Pasco. El policía Flanagan le estrelló la cabeza sobre el cofre ardiente de su coche patrulla, causando quemaduras de segundo grado. La ciudad lo encubrió pagándole a ella 100,000 dólares.
La analogía entre la policía de Pasco y tropas israelíes que matan niños palestinos por tirarles piedras no podía ser ignorada. Los agentes de la Patrulla Fronteriza EEUU matan niños mexicanos que en la frontera les lanzan piedras.
Tampoco podemos ignorar el reciente asesinato de tres estudiantes musulmanes por un vecino racista en Carolina del Norte (véase el recuadro en la siguiente página).
“Es aún más grave estos días”, concluyó otro tornero de Boeing.
El capitalismo nos ha impuesto una plaga mundial de asesinatos racistas. Movilizando a las masas para el comunismo es hoy en día una lucha de vida o muerte para todos los trabajadores.
La Práctica Comunista Lleva a la Teoría Revolucionaria
Líderes del Partido Comunista Obrero Internacional (PCOI) de tres países discutieron los males gemelos del racismo y nacionalismo en este contexto. Debemos ampliar esta discusión mientras que producimos un folleto para distribución masiva. Le pedimos su ayuda en tomar en cuenta estas y otras preguntas críticas:
¿Es el racismo principalmente un problema en los EEUU, donde el capitalismo se nutrió de la esclavitud de africanos? ¿O es un gran problema a nivel internacional?
Los camaradas de El Salvador describieron el racismo contra los inmigrantes nicaragüenses, desde insultos racistas a “bromas” sobre su apariencia, hasta ser deportados. “Nadie habla de ello, pero está ahí”, dijo un trabajador industrial joven.
Un informe de Sudáfrica desenmascaró el plan del gobierno para desviar la ira, de la súper-explotada o desempleada juventud negra, hacia las pequeñas tiendas spaza, propiedad de somalíes, etíopes y Bangladesh. (Vea Bandera Roja, v. 6 No. 1, página 1).
Algunos obreros en una reciente conferencia del PCOI en Sudáfrica propusieron una respuesta nacionalista al imperialismo racista, un nuevo panafricanismo. Camaradas jóvenes nuevos al PCOI libraron una fuerte y exitosa lucha para derrotar esta idea pro-patronal.
Un compañero de Los Ángeles informó sobre una conferencia que reveló la contradicción entre el nacionalismo y anti-racismo. Madres latinas hablaron sobre sus hijos, asesinados por la policía de Los Ángeles. Un activista paquistaní habló del crecimiento letal del racismo anti-musulmán. Sin embargo, pese a las objeciones, los organizadores insistieron en limitar su lema a “Las Vidas Negras Son Valiosas”.
¿Cómo conducimos hoy en día una lucha comunista contra el racismo?
“Cuando no tomamos en serio el racismo, retrasamos nuestro trabajo “, declaró un compañero.
Hizo referencia a una situación en la que los estudiantes de secundaria en nuestra base organizaron una huelga por el asesinato de los 43 normalistas en Guerrero, pero no organizaron un paro similar por el asesinato racista policíaco de un adolescente negro en Ferguson, Missouri.
Cuatro de estos estudiantes asistieron a la reunión y tenían mucho que decir. Están luchando claramente para desarrollar una respuesta comunista al racismo.
Un obrero de MTA tránsito de Los Ángeles describió los esfuerzos exitosos que él y sus compañeros de trabajo hicieron para integrar las actividades sociales y lucha juntos contra la patronal. Cerca de 100 trabajadores en este sitio leen Bandera Roja, y decenas son miembros activos del partido o partidarios.
Otro compañero señaló que los lugares de trabajo relativamente integrados como MTA y Boeing son centros claves donde podemos difundir la lucha comunista contra el racismo.
Casi todos los argumentos nacionalistas asumen que es imposible destruir el racismo. Llevando acabo un plan comunista audaz para desarraigar el racismo -- en palabras y hechos, ahora y en el futuro -- ayudará a destruir estas ideas capitalistas.
¿Cómo podemos presentar la historia del racismo de una manera que permita a los trabajadores ver la posibilidad de acabarlo?
Un camarada señaló que los estereotipos sobre “otros” pueblos existían en las sociedades clasistas pre-capitalistas como la antigua Grecia.
Otros argumentaron que el racismo surgió con el capitalismo, desde el siglo 15 en España, al siglo 17 en Inglaterra al siglo 18 en Francia, hasta los meros principios de EEUU, donde la esclavitud estuvo ligada al surgimiento del capital financiero.
Los camaradas describieron la “historia desconocida” de la clase obrera, como la rebelión haitiana que abolió la esclavitud.
El racismo se mantiene porque el capitalismo provee su base material. Las diferencias salariales racistas y el desempleo racista, que reducen los salarios de todos los obreros, son esenciales para las ganancias patronales. Cada institución capitalista apoya divisiones racistas que permiten que continúen la superexplotación y la esclavitud asalariada. Eso incluye la organización del trabajo, las escuelas, e incluso la forma en que se nos enseña a ver nuestro propio valor.
¿Cómo el comunismo terminará con el racismo? ¿Qué tan intensa necesita ser la movilización anti-racista después de que tomemos el poder?
“Habrá racismo incluso después de la revolución”, dijo un estudiante universitario negro.
Revolución Comunista terminará rápidamente la economía política racista de los patrones. Pero vestigios del antiguo sistema permanecerán en la sociedad en general. Por ejemplo, las segregadas condiciones de vida pueda que todavía existan. Los imperialistas que queden utilizarán el racismo para socavar y atacar las zonas comunistas liberadas.
Necesitaremos una movilización comunista audaz para eliminar el racismo como una fuerza social. Esta vez vamos a tener el arma del poder estatal a nuestro lado. No podemos saber todos los detalles por adelantado, pero debemos comenzar a discutir esto ahora.
Una parte será romper las divisiones entre las personas que crecieron en diferentes partes del mundo. Todos aprenderemos varios idiomas. Más gente pasará algún tiempo viviendo y trabajando en diferentes lugares.
Invitamos a nuestros lectores y colectivas del Partido en cada concentración industrial, lugar de trabajo, en el aula, en los cuarteles a que contribuyan a esta discusión urgente, basada en organizar más lucha antirracista. Les invitamos a escribir, mandar cartas, textos, tweets, para
Bandera Roja, ayuden si pueden a traducir a otros idiomas, y a llevar esta lucha a todos los rincones del mundo
El racismo es un ataque violento a toda la clase obrera y masas del mundo. Les invitamos a unirse a nosotros en movilizar a las masas para el comunismo para acabar con el racismo, guerra imperialista y todos los demás horrores del capitalismo, que están ligados al racismo.