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Sudáfrica es sede de la 25aba reunión cumbre de la Unión Africana. El presidente Mugabe de Zimbabwe es el presidente de la Unión Africana conformada por 54 países africanos. En un ataque mordaz contra Sudáfrica y Nigeria por no oponerse a la autorización de los ataques aéreos occidentales contra Libia, los cuales derrocaron el régimen de Gaddafi, Mugabe se comprometió a liderar África para librarse de su pasado colonial. China es el principal socio comercial de Zimbabwe.
China ha sobrepasado a EE.UU., la Unión Europea y Japón para convertirse en el mayor socio comercial de África. Libia bajo Gaddafi tenía enormes inversiones chinas. A medida que las fuerzas lideradas por EE.UU./UE derrocaban el régimen de Gaddafi, la infraestructura china con un valor de  $20 mil millones fue dañada. China tuvo que rescatar a más de 40.000 de sus ciudadanos y su plan de vincular a África con Europa a través de Libia fue hecho añicos.
Los capitalistas chinos saben que para asegurar sus inversiones y el flujo del petróleo y otros recursos naturales, necesitan desesperadamente una presencia militar en África. El gobierno de Mugabe ha acordado permitirle a China construir una base militar masiva en la zona minera de Zimbabwe. China también ha negociado la construcción de una base naval en Djibouti un país sumamente estratégico. Los barcos que cruzan el Canal de Suez tienen que pasar por el cuello de botella controlado por Djibouti.
China también está negociando con el gobierno egipcio actualizar y renovar el Canal de Suez a través del cual toma lugar una gran cantidad del comercio de EE.UU., Japón y Europa. “Egipto y China acordaron trabajar juntos en los proyectos la Faja Económica de la Ruta de la Seda y la Ruta de la Seda Marítima. Sisi también prometió que Egipto activamente buscará la inversión china para su proyecto del Nuevo Canal de Suez, un proyecto de $4 mil millones paralelo al canal existente en vincular los mares Mediterráneo y Rojo. El nuevo canal encaja naturalmente con la visión china de la Ruta de la Seda Marítima, con la ruta planeada ya moviéndose por el Canal de Suez para llegar a Europa. “(The Diplomat, Diciembre 2014) 
Los capitalistas europeos y británicos tienen un historial de más de 500 años de dominar al África por sus recursos naturales. El poder e influencia de ellos fueron considerablemente debilitados después de la 2ª Guerra Mundial al surgir EE.UU. como la fuerza imperialista dominante. En los últimos 30 años los imperialistas chinos reemplazaron a EE.UU. en África como la principal potencia económica. China en ascenso y EE.UU. en descenso están en vías a chocar. Como escribiera el analista de Nueva York Eric Draister: “En toda África, Estados Unidos ha tratado de frenar la creciente influencia de China. Desde Nigeria a Sudáfrica, desde Angola a Sudán, EE.UU. está participando en una generalizada guerra de poder por terceros con la intención expresa de mantener su posición dominante en África. Usando sus vastos recursos militares, Washington busca consolidar su hegemonía africana usando las mismas tácticas coloniales como cualquier otro imperio que lo precediera”.
Esta rivalidad entre EE.UU. y China conducirá inevitablemente a guerras mayores por ganancias, incluyendo la guerra mundial. Nuestro partido en Sudáfrica está discutiendo activamente cómo podemos movilizar a las masas ahora y sobrevivir y construir para la revolución comunista antes, durante y después de la guerra nuclear. Los recientes ataques racistas contra obreros inmigrantes en Sudáfrica han demostrado que podemos construir nuestro Partido no sólo en Sudáfrica, sino en otras zonas de África.
Estamos intensificando nuestra lucha interna en el Partido de concentrar nuestro trabajo en la concentración industrial automotriz. Hemos tenido un modesto éxito distribuyendo Bandera Roja en las plantas de automóviles y tenemos que dar seguimiento a las respuestas positivas que recibimos de los obreros. Entendemos que solo con un esfuerzo consistente para multiplicar los lectores de Bandera Roja, lo cual requiere paciencia y lucha, garantizará el crecimiento del  Partido.