¡Luchemos por el Comunismo! |
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15 de julio - Mientras vamos a la prensa, trabajadores, jóvenes y jubilados en Atenas están protestando el acuerdo de rescate de austeridad aprobado por el Primer Ministro socialista Tsipras. Farmacéuticos, trabajadores del gobierno, maestros, estudiantes y otros han llamado a huelgas. Decenas de miles marchan y muchos están enfrentándose contra la policía antimotines. Las consignas resuenan: “No a las políticas de la UE, el BCE y el FMI!” El día vendrá cuando la consigna será: “¡No a la esclavitud asalariada y no al dominio capitalista!”
Los bancos están cerrados. El dinero escasea cada vez más. Los salarios no son pagados. Grupos no oficiales organizan la distribución de alimentos y ropa.
Esto es Grecia ahora y en el futuro inmediato.
Cuando los comunistas dirijan a la clase obrera hacia la toma del poder, cerraremos los bancos para siempre. Aboliremos el dinero. Los euros y dólares, rublos y yuanes, serán inservibles pedazos de papel. Desde luego, no reinstauraremos el dracma (moneda griega antes de adaptar el euro).
En el comunismo los trabajadores no serán pagados porque aboliremos todo el sistema salarial. En su lugar movilizaremos a las masas para que provean a todos sus necesidades (alimentación, vestido, vivienda, cuidado médico, etc.) No habrá ricos, ni pobres, ni desempleados, ni desamparados. No más necesidad de pensiones, no más razón para llorar en frente de un banco.
En un futuro cercano, nadie les estará proveyéndoles sus necesidades básicas a los obreros griegos, los cuales están todavía bajo el dominio capitalista. Los esfuerzos informales de distribución no son lo suficientemente grandes; enfocan solamente a los más desfavorecidos. La mayoría que no está recibiendo su sueldo tendrá que usar sus ahorros o depender de amigos y parientes. El hambre de las masas es una posibilidad real. Los mismos banqueros que han causado la miseria generalizada ahora hablan de la futura necesidad de “ayuda humanitaria”.
Grecia tiene algunos autonombrados marxistas, socialistas e incluso “comunistas”. Algunos están actualmente administrando el gobierno griego y prometiéndoles a los banqueros alemanes que implementarán algún plan de austeridad. Ninguno de estos lucha por el verdadero comunismo. Al contrario se aferran al nacionalismo griego, se envuelven con la bandera griega, y propugnan porque Grecia se salga de la Unión Europea. Ellos no están en contra del dinero, sólo contra el euro. Piden por el regreso del dracma.
El Partido Internacional Obrero Comunista (PCOI) es el único partido en todo el mundo que lucha por el comunismo. Es por eso que es tan importante que todos los que estén de acuerdo con nosotros ingresen al Partido. De lo contrario, las crisis capitalistas como la de Grecia se producirán una y otra vez, causando miseria a decenas y cientos de millones de personas.
El PCOI todavía no existe en Grecia, pero hay algunos lectores de Bandera Roja. ¡Si tú vives en Grecia o tienes amigos allí, hágannoslo saber! Unos contactos podrían ser suficientes para empezar una célula del Partido – eso ha sucedido en otros lugares. Y si puedes, por favor traduce este artículo al griego o cualquier otro idioma que conozcas y difúndalo ampliamente.
No tienes que ser un experto en política. Aprenderás haciéndolo. Todos tenemos algo valioso que ofrecer.
¿Por qué está pasando esto ahora?
Los banqueros alemanes quieren robarles a los trabajadores griegos, infligiéndoles la esclavitud asalariada y las condiciones laborales. Como estos son banqueros / capitalistas / explotadores no se necesita más explicación.
Pero ¿por qué los banqueros alemanes están tan decididos a sangrar a Grecia al máximo, aunque esto signifique destruir completamente su economía?
Hay muchas razones, pero la principal es la continua crisis mundial de sobreproducción. Fábricas del mundo producen muchas más mercancías de las que los mercados mundiales pueden absorber. Esto significa que los capitalistas no pueden vender gran parte de lo producido por los obreros. Esto significa pérdida de dinero, cierre de fábricas, y despidos de obreros.
¡Sólo en el capitalismo puede la abundancia crear miseria! En la sociedad comunista se producirá para satisfacer las necesidades de las masas, no para venderse en el mercado. Siempre habrá trabajo para brazos que estén dispuestos.
A la larga, las crisis capitalistas de sobreproducción desembocan en guerras comerciales, guerras de balazos, y, finalmente en guerras mundiales con la destrucción masiva de la capacidad productiva y de vidas obreras.
A más corto plazo, como lo vemos hoy día, esta crisis contrapone a capitalistas contra capitalistas. Cada uno quiere capturar los mercados de sus rivales. Cada uno quiere que sus competidores carguen con el problema de la sobrecapacidad. Dentro de Europa los patrones alemanes y franceses han hecho que los países más débiles, mayormente en el sur de Europa, carguen con la crisis.
Los patrones del norte de Europa burlonamente llaman a estos países la PIIGS (cerdos en ingles con las siglas de Portugal, Irlanda, Italia, Grecia y España). Ellos hacen miles de millones brindándoles prestamos a intereses altos, y manteniéndolos endeudados y en la austeridad.
Grecia (es decir, los patrones griegos) han tenido el cinismo de oponerse. Hay que darles una lección. Como todos los usureros, los banqueros franceses y alemanes pueden elegir entre matar al deudor o simplemente darle una paliza. Hasta el momento no se han decidido.
Mientras tanto, los capitalistas alemanes están tratando también de disciplinar a sus principales rivales en Europa, los capitalistas franceses.
¿Qué de China y Rusia, los archi-competidores de Alemania y EE.UU.?
El gobierno griego coqueteaba con Rusia. Firmó un acuerdo preliminar, comprometiéndose a invertir $2 mil millones en un gasoducto financiado principalmente por Rusia, pero no obtuvo dinero por adelantado. Los capitalistas chinos quieren expandir su compra de puertos, ferrocarriles y aeropuertos griegos.
Algunos camaradas citan estos desarrollos como evidencia de que la crisis griega refleja que la rivalidad entre los principales imperialistas del mundo se está agudizando. Argumentan que los patrones rusos y chinos ven una oportunidad en esta crisis y podemos esperar que intensifiquen su participación.
Otros responden que Rusia no tiene los recursos financieros para tomar ventaja de la situación. China los tiene, pero los gobernantes capitalistas chinos tienen otras prioridades internacionales. Y la crisis económica mundial acaba de golpearlos fuertemente con una caída masiva en su mercado de valores.
Lo que está claro es esto: Los trabajadores de Grecia han estado en movimiento con huelgas y protestas contra los ataques de austeridad de los patrones. Millones en Europa han demostrado su solidaridad. Pero sólo la revolución comunista a nivel mundial puede ponerles fin a los horrores de la esclavitud asalariada.
¿Qué podemos aprender del drama griego?
En primer lugar, que el funcionamiento interno del capitalismo produce crisis que abren la puerta a la revolución.
En segundo lugar, que en medio de estas crisis nuestro programa comunista tiene mucho sentido.
Por último, que es urgente expandir al PCOI en todo el mundo. ¡Aquí es donde, camarada lector, entras tú!
Grecia: La Democracia Protege la Dominación Capitalista
Fue un rotundo NO a la austeridad. Reactiva la resistencia a los poderes financieros que dominan el mundo. Pero fue sólo un voto. Fue desafiante, no revolucionario.
Pocos días después de la histórica votación griega la democracia tan cacareado-del capitalismo occidental fue develada como un fraude. Dándoles la espalda por completo a los deseos enfáticos de las masas, sus democráticamente electos representantes socialistas enviaron propuestas serviles prometiendo nuevos ataques contra las masas griegas. ¡Esto era la democracia en acción: los deseos y las necesidades de las masas no significan nada, las necesidades de los amos de las finanzas significan todo! La democracia es un sistema político diseñado para proteger la dominación capitalista.
Siempre ha sido así. La democracia se desarrolló en Grecia, al convertirse esta en una civilización monetizada exitosa. Hace más de 2.500 años, los campesinos en Ática se levantaron contra las deudas aplastantes que sus amos financieros en Atenas les habían impuesto. Los gobernantes atenienses tenían miedo que los campesinos se aliarían con los esclavos en las minas de plata que suministraban dinero y riqueza a los soberanos. Ellos les otorgaron rápidamente a los campesinos la cancelación de la deuda y los derechos democráticos. Para la mayoría esa democracia era tan inservible como lo es ahora.
Los trabajadores no necesitamos elecciones. No necesitamos el Estado capitalista. Necesitamos construir las futuras revoluciones comunistas.