¡Luchemos por el Comunismo!
	Partido Comunista Obrero Internacional
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Seattle, WA - Vivienda económica se perfila como el principal problema en las elecciones para miembros del Consejo de la Ciudad de Seattle. La cuestión reverberará en todo el país y alrededor del mundo. La respuesta no yace en asequibilidad económica, sino en la vivienda colectiva gratis que sólo el comunismo puede proveer.
Miles de millones no tienen vivienda alguna o tienen un albergue apenas habitable. Los capitalistas obligan a millones a “vivir” en tugurios insalubres que rodean todas las ciudades importantes. Es la misma historia desde las favelas brasileñas a los municipios irregulares sudafricanos.
En lugar de solucionar el problema, el capitalismo lo agrava. Detroit arrasa miles de viviendas, en su mayoría de afro-americanos. Los funcionarios de la ciudad golpean a los restantes propietarios con cuentas de agua de miles de dólares
Cuando los patrones pueden sacar ganancias de su gentrificación de estas vecindades, las masas desde Harlem en Nueva York hasta el Born en Barcelona encuentran sus comunidades destruidas y a sus familias expulsándolas a la calle
Los barrios marginados con viviendas deficientes no sólo reproducen enfermedades y sufrimientos, sino también levantamientos masivos. Por ejemplo, los banlieues (suburbios) pobres que rodean el núcleo rico de París periódicamente explotan en rebeliones.
La mayoría de los rebeldes son inmigrantes africanos. Estos trabajadores súper-oprimidos son más que simples víctimas del capitalismo. Ellos son los líderes potenciales del movimiento comunista revolucionario - ahora y en el futuro.
La clase obrera tendrá, después de la revolución, que movilizar a millones para construir la vivienda que necesitamos. ¿Quién  tendrá la mejor dedicación y comprensión necesaria para dirigir esa movilización que aquellos que han sufrido en los cinturones de miseria? Su liderazgo será invaluable.

Las Soluciones Engañosas de Seattle Mantienen la Segregación

El comité que asesora al alcalde de Seattle, los mítines electorales y las reuniones públicas presentarán soluciones engañosas al problema de la vivienda. Todos prometerán combatir la segregación racista y clasista. ¡Ninguno lo hará!
El borrador del reporte del comité salió a luz el jueves pasado. Señala que la “bonificación unifamiliar de Seattle tiene sus raíces en la exclusión racial y de clases...”
La solución del comité es de acabar con zonas unifamiliares. Quieren dar rienda suelta a los inversionistas inmobiliarios urbanos. A los mismos  que hicieron fortunas segregando la ciudad se les está dando rienda suelta para corregir el problema. ¡Es como dejar a la zorra cuidando del gallinero!
La izquierda pide control de alquileres y aumentos en las cuotas de vinculación. Los inversionistas pagan éstas cuotas cuando construyen condominios de lujo y edificios de oficinas. El dinero recogido está supuesto a usarse para construir viviendas accesibles económicamente. Todo esto se ha intentado en otras ciudades y ha fracasado.
Fracasaron porque el objetivo era la vivienda accesible. La vivienda accesible todavía vincula el albergue con la capacidad de pagar. La segregación racista y clasista es inevitable cuando la vivienda está vinculada al dinero. Las ganancias y viviendas dignas para las masas son incompatibles.