¡Luchemos por el Comunismo!
	Partido Comunista Obrero Internacional
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LOS ANGELES - “¿Dónde están los trabajadores blancos en Los Ángeles?”, preguntó un camarada.
 Los barrios más deteriorados y los peores trabajos están llenos principalmente de  “trabajadores negros, latinos e inmigrantes”.  Esto lleva a algunos a creer las mentiras patronales de que la gente “blanca” son todas racistas, “privilegiadas” y poco confiables. No es casualidad que los activistas jóvenes escuchan esto en las universidades y organizaciones supuestamente “anti-racistas”.
Por más de 400 años, el capitalismo ha organizado la sociedad en torno a categorías “raciales” inventadas  que dividen a las masas. Utiliza el terror racista para superexplotar un sector de la clase obrera, creando una base material para su política de “dividir y conquistar”.
Al movilizar a las masas para el comunismo empezamos a romper estas divisiones en la práctica. La victoria del comunismo creará la base material para acabar con el racismo y las categorías raciales para siempre.
El gobierno capitalista de EE.UU. cataloga la fuerza laboral por “raza” y “etnia”. En diciembre 2014 casi 5 millones de personas estaban en la fuerza laboral del Condado de Los Ángeles: 44% Latino/a, 31% blancos, 14% asiáticos y el 8% afro americanos (Negros). El 3% restante incluye nativos americanos, hawaianos y personas de otras islas del Pacífico, y gente identificada como “mixta”.
No todos ellos son trabajadores. De 1,5 millones de blancos, 188.000 son “gerentes” o administradores escolares Treinta mil son ejecutivos y legisladores, y 31,000 son abogados y jueces. Los blancos están sobre representados en estas categorías. Veinte mil son policías o carceleros (los blancos no están sobre representados aquí).
Ninguno de estos empleos existirá en la sociedad comunista
Pero tampoco existirán los “empleos” que nosotros los esclavos asalariados tenemos hoy día. Todos haremos muchos distintos trabajos. No nos identificaremos con un oficio determinado. Eventualmente nos identificaremos como “camaradas” en vez de “raza”, “etnia” o “nacionalidad”. 

¿Quiénes son los trabajadores blancos en el condado de Los Ángeles?
Algunos están entre los esclavos asalariados peor pagados y peor tratados. 5,700 trabajadores en Los Ángeles son clasificados como “trabajadores de preparación de alimentos combinados y trabajadores que los sirven, incluyendo comida rápida.” Cerca de 1.400 de ellos (24%) son blancos. Otros 5,600 son trabajadores “de servidores, cafetería, concesión de alimentos y cafés”. 1,500 de ellos (27%) son blancos.
Veinte y seis mil trabajadores blancos son meseros o trabajan en un bar.
Treinta y dos mil trabajan en el transporte.
Treinta y siete mil instalan, mantienen o reparan motores y maquinaria.
Cuarenta mil se están en el campo de la informática, excesivamente representados en casi todas las categorías de este empleo.
Más de cuarenta mil laboran como peluqueros, ayudantes del cuidado de salud personal, trabajadores de cuidado de niños u ocupaciones afines.
Cincuenta mil (principalmente mujeres) trabajan en oficinas como secretarias, asistentes administrativas, etc.
Cincuenta mil (en su mayoría hombres) trabajan en la construcción. De ellos, 9.000 son supervisores de primera línea. Los obreros blancos son más propensos a ser esclavos asalariados mejor remunerados como electricistas, fontaneros, caldereros, inspectores, trabajadores de metal y operadores de equipo pesado.
Sesenta y cuatro mil están en ventas al menudeo.
Esto es Los Ángeles: 86,000 se encuentran en las artes, deportes y entretenimiento. Los blancos están muy sobrerrepresentados aquí, incluso en trabajos manuales, como los operadores de cámara.
Casi 100.000 de trabajan en el cuidado de salud. Ellos están sobrerrepresentados en las categorías de mayor paga y estatus (como médicos) y subrerrepresentados en las mas bajas (ayudantes de la salud).
Más de 100,000 son maestros.
Muchos de ellos trabajan en los campos de finanzas, ciencias o tecnología, donde los trabajadores blancos son fuertemente sobrerrepresentados. Esto incluye 26,000 ingenieros y 29,000 contadores y auditores. 
Los obreros industriales y soldados tienen un papel protagónico en movilizar a las masas para el comunismo 
Los Ángeles tiene 340,000 empleados en “ocupaciones de producción “. Alrededor del 73% de ellos son latinos, 12% blancos, 11% de asiáticos y sólo el 3% negros.
Casi una cuarta parte de los empleados blancos de producción, cerca de 6500, son supervisores de primera línea.
Cinco mil son inspectores, probadores, o clasificadores
Casi 6,000 trabajan en metal y plástico, donde son sólo el 11% de todos los obreros. Sin embargo, 2,500 de ellos son torneros (21% de categoría), 110 hacen modelos y patrones (29%) y 485 son fabricantes de herramientas y  dados (41%). Los trabajadores blancos también están representados excesivamente en otros empleos altamente cualificados, como programadores de controles informáticos y rectificadores de herramientas y afiladores. .
Ninguno trabaja con maquinas de extrusión y extracción o equipos de tratamiento térmico.
Sólo el 4% de los obreros de textiles, costura y calzado en Los Ángeles son blancos. Más de la mitad de ellos son sastres o modistas. Muchos están, probablemente, en especialidades como la producción de disfraces.
La segmentación “racial” de la fuerza laboral hoy en día no es absoluta, como lo fue bajo la esclavitud, pero sigue siendo la base material del sistema racista patronal. El comunismo la terminará aboliendo el sistema salarial.
La diferencia entre $10 por hora y $ 50 por hora puede parecer grande. Pero es pequeña en comparación con los ejecutivos capitalistas que reciben $5 mil por hora y los accionistas ricos que cosechan las ganancias. Todos los trabajadores tendrán una vida mejor cuando produzcamos para satisfacer nuestras necesidades colectivas y nos quitemos  a estos parásitos de nuestras espaldas.
Los camaradas en empleos relativamente integrados como LA Metro (transporte público) están situados estratégicamente para construir lazos a través de las líneas “raciales” creadas por los patrones ingresando al Partido Comunista Obrero Internacional y construyéndolo.