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¿Quién Necesita una Revolución Comunista Cuando el Ayuntamiento es Antirracista?

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¿Puede un amable-gentil capitalismo funcionar? ¿Necesitamos activistas que luchen por reformas o comunistas que organicen para la revolución? Últimamente, Richmond, California, una ciudad de alrededor de 100 000 habitantes se ha convertido en la ciudad ideal para los que abogan por un capitalismo mas amable y gentil.
Además de ganar las elecciones del Consejo de la Ciudad de Richmond (CCR) derrotando a candidatos respaldados por los millone$ de Chevron, los reformistas del CCR han hecho a Richmond la primera ciudad californiana en décadas en instituir el control de rentas. Su mayor logro, sin embargo, es la disminución en los asesinatos callejeros. De un máximo de 47 en 2008 a tan sólo 4 en lo que va del año, la tasa de homicidios se ha reducido drásticamente. ¿Cómo?
Fue necesario un cambio monumental de actitud. Rechazaron el racismo de “parar y registrar” que ve a los jóvenes de la ciudad como matones y criminales. En su lugar, los vieron como víctimas jóvenes que necesitaban ayuda.

¿Un Ayuntamiento Anti-Racista?

 Descubrieron que la mayoría de los tiroteos, en el barrio Triángulo de Hierro involucraba sólo a 17 personas entre las edades de 16 y 25 años. Les ofrecieron a  estos 17: ¡Responder a la tutoría de la ciudad, no meterse en problemas, no apretar el gatillo y recibir a cambio hasta $ 1,000 mensuales durante nueve meses!
¡Esto ha hecho una enorme diferencia! Un vecino le dijo a la radio local “No me había sentado frente a mi puerta durante 30 años. Ahora lo hago”. ¡El Ayuntamiento ya no discute pedirle  a la Guardia Nacional venir a ocupar la ciudad! ¿Han triunfado las actitudes antirracistas en el Ayuntamiento?
Desafortunadamente, cuando las políticas humanas salen ganando, se convierten en argumentos para reforzar la idea de la reforma y descartar la necesidad de la revolución. Si nosotros, el pueblo nos organizamos, los reformistas argumentan, podemos hacer que el gobierno o el estado trabajen para nosotros.

¿Que Sacan los Patrones Racistas de Esto?

Bandera Roja no está de acuerdo. Nada significativo ocurre (y la reducción en la tasa de homicidios es significativo) a menos que sirva principalmente las necesidades del capitalismo. La única vez que el gobierno supuestamente “trabaja” para nosotros es cuando nuestras necesidades coinciden con las de algún capitalista. Los comunistas traemos una herramienta analítica clave para el movimiento: el materialismo histórico. Su principio básico es que la forma en como una sociedad se reproduce (trabaja) determina su forma de gobierno. Imagínense la política del gobierno en una sociedad donde la gente produce para satisfacer las necesidades sociales, no las ganancias patronales.
En tres años, durante la 2ª Guerra Mundial, la población de Richmond explotó aumentando de 24,000 a 94,000 habitantes. Eso no era para satisfacer las necesidades de las familias negras que escapaban del Sur racista, sino para satisfacer las necesidades de mano de obra barata de los astilleros de Kaiser. Después de la guerra, cuando los astilleros cerraron, la refinería de petróleo Chevron se convirtió en el actor político dominante de Richmond. Sigue siendo el mayor empleador, pero mañana no lo será.

¡El Ayuntamiento Sirve al Capital!

La Universidad de Berkeley está construyendo un nuevo centro para 10,000 estudiantes de postgrado en Richmond. Su rector, Nicolás Dirk, viaja por el mundo (incluyendo lugares como el Foro Económico Mundial en Davos, Suiza) buscando grandes socios corporativos y académicos. El campus es un componente del plan del imperialismo de EE.UU. para mantener su supremacía mundial.
Tratar de atraer académicos, empresas de biotecnología y estudiantes internacionales de postgrado para estudiar cerca de un barrio que compite con Compton por el título de “la capital de asesinatos en California” no es una propuesta ganadora. ¡Richmond tiene que ser limpiado!
No hay nada antirracista en el capitalismo. Todo lo que hace es con fines lucrativos o inversiones (ganancias futuras). Todo lo que hace, aun lo que aparenta ser humano, es hipócrita. ¡Pacificar un barrio violento es para que la Universidad de Berkeley, la institución que construyó las bombas atómicas que arrasaron con Hiroshima y Nagasaki, pueda continuar su trabajo de construir armas de destrucción masiva en paz!
Nada en las reformas del Ayuntamiento detendrá la “limpieza étnica” en curso que ha afectado durante años a las comunidades desde Palo Alto a San Francisco, Oakland y Richmond. De una forma u otra, las familias negras se encuentran reubicadas lejos de las ciudades. En los próximos años, el control de rentas y calles más seguras que ha creado el Ayuntamiento beneficiarán más a los estudiantes internacionales de postgrado que los actuales residentes del Triángulo de Hierro.
Lejos de convertirse en un argumento para rechazar el comunismo, los logros de los movimientos reformistas de Richmond muestran la necesidad de un movimiento revolucionario. Cuando llevamos nuestras ideas a estos movimientos, ayudamos a cambiar a la gente en ellos. Tenemos un papel que jugar en discutir, leer, escribir para Bandera Roja y distribuirlo. Mientras que los capitalistas tienen su “universidad global,” nosotros construimos un movimiento revolucionario de la clase obrera internacional.

CARTAS, CRITICAS Y SUGERENCIAS

Carta de un Lector de Richmond
A continuación hay un extracto de una respuesta a nuestro borrador  final del artículo ¿Quién Necesita Una Revolución Con Ayuntamiento Antirracista? de un activista, lector de Bandera Roja, mandó después de haber sido parte de las discusiones originales sobre el artículo.
 Estimado Bandera Roja:
Estoy de acuerdo con tú argumento de que las reformas no traerán cambios fundamentales en la economía política. Reproducen el capitalismo, en última instancia, como lo expuso tú artículo.
Mi respuesta es amplia. Cuando me involucré en el movimiento de reforma de Richmond, no pensé que podría crear un cambio económico y político fundamental. Me involucré porque no quería que 400 acres de espacio abierto se convirtiera en un centro turístico con casino. En el proceso, vi a la gente cambiar de manera notable, y empecé a preguntarme si el involucrarse en el movimiento de reforma de Richmond reproduce el capitalismo mientras contribuye a la posibilidad de resolución por personas que cambian en el proceso de involucrarse.
El movimiento de reforma ha logrado que ciudadanos se involucren que antes no lo estaban. Las personas que aún pensaban que el status quo estaba bien y personas que por mucho tiempo han entendido que no funciona (y no actúan porque creen que nada puede cambiar) son, ellos mismos, cambiados al involucrarse. No es una revolución, pero no estoy seguro de que quiero ser parte de una revolución con la mayoría de la gente con la cual vivo. El problema es nacional. La gente con quien he trabajado y han cambiado en el proceso son parte de otra historia, y ellos están pensando en lo que podría ser posible fuera de la economía capitalista. Mientras que la mayoría no siempre están pensando fuera del sistema, pensando fuera del sistema es una posibilidad para muchos en maneras que no era posible antes de la participación en la reforma.
Hay una división en el movimiento de Richmond, una pequeña parte de la dirigencia quiere revolución y ve la reforma como un camino a ella, y una parte más grande ve la reforma como la respuesta, o un capitalismo más suave y más amable. Pero, al menos, todo el mundo está involucrado en los debates, y eso es más que la gran parte de la opinión pública estadounidense. He trabajado en temas sociales con personas de ideas afines en el pasado. Trabajar en la política de Richmond fue la primera vez que trabajé con el público, y, francamente, estoy sorprendido que tan lejos el pequeño público con el cual me involucré está de ver la necesidad de un cambio político y económico fundamental.
Mientras que la revolución es la respuesta, cómo llegamos allí y que hacemos cuando lleguemos allí es el reto. Marx subestimó la ideología, la ideología sólo puede ser superada a través de la práctica, o cuando uno se involucra. Tú periódico es praxis, y en algunos aspectos el movimiento de reforma puede ser, también, para algunos. Mientras que el movimiento de reforma reesfuerza la idea de la reforma, no puede, por lo menos para todo el mundo, desestimar la necesidad de la revolución.
Sin embargo, creo que el Campus Global destruirá cualquier potencial revolucionario, no importa cuán pequeña sea, del movimiento progresista. La ideología en torno a la Educación es tan fuerte, que es muy difícil que la gente vea que la universidad y la cultura de Silicon Valley son uno y lo mismo, y ninguno de los dos representa algo bueno, aunque hay contradicciones.
Es un interesante artículo del cual más debería escribirse.