¡Luchemos por el Comunismo! | |
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Este es el periódico de la clase trabajadora. Obviamente no recibimos ayuda económica de los capitalistas, sus fundaciones ó ONG's. Por favor colabore generosamente para ayudar a cubrir los costos de producción y distribución.
¿Qué significa ser miembro/a del Partido?
Bandera Roja continuamente insta a los lectores a “ingresar al Partido.” ¡Algunos están haciendo justamente eso! Pero otros quieren saber que significa ser miembro del Partido. Algunos de ellos distribuyen Bandera Roja, asisten a reuniones y a otros eventos partidarios, y apoyan con dinero.
“Ya haces todo lo que hace un miembro del partido, ¿entonces porque no te unes?” a veces les preguntamos.
Tal vez algunos se preguntan, “Si ya hago todo, ¿por qué importa si me uno o no?”
El reciente artículo acerca de la Revolución Rusa (Vol. 6 # 19) aborda esta pregunta, entre otras ideas importantes. Pero parece contradecirse. Necesitamos entender esta contradicción.
El artículo describe correctamente una pelea en 1903 entre los Mencheviques y Bolcheviques. Los Mencheviques alegaban que cualquiera podía ser miembro del Partido, incluso sin hacer trabajo del Partido.
Los Bolcheviques alegaron que los miembros del Partido tenían que comprometerse a poner en práctica las decisiones tomadas colectivamente (“centralismo democrático”) incluso cuando no estaban de acuerdo.
A veces, este desacuerdo se caracteriza como un partido de “masas” versus un partido de “cuadros”.
El artículo afirma que el PCOI es un Partido de “cuadros”: todos los miembros deben poner en práctica las decisiones. Pero luego dice que “la construcción de un mundo comunista requiere un partido de masas con... diferentes niveles de dedicación y entendimiento.” Hace hincapié en que los miembros deben estar “abiertos a la lucha ideológica”.
Aboga por el “centralismo comunista.” Esto se explica diciendo que “las masas lucharán por el comunismo en la medida en que crean en ello”.
Esto es sin duda cierto e importante. ¿Pero, en que “medida” debe alguien “creer en ello” antes de ingresar al Partido? ¿Y qué significa en la práctica ese “creer”?
No creo que el “compromiso real” sea un todo o nada que algunos “cuadros” tienen y otros no. Esa idea lleva a algunos a pensar que no pueden ser miembros porque, como dicen, “no podemos hacer todo lo que Uds. hacen”.
También es malo describir el compromiso puramente en términos cuantitativos. Eso sugiere que no hay razón alguna para “dar el paso” e ingresar.
El artículo habla de “millones de líderes comunistas con diferentes niveles de dedicación”. Esto se acerca más a captar la realidad de que “el cambio cuantitativo puede conducir a un cambio cualitativo”. Importa cuando decidimos avanzar a un nuevo nivel de dedicación, si somos o no miembros.
El crecimiento del Partido (como todo) contiene aspectos contradictorios que están trenzados en lucha. El análisis bolchevique vio la unidad en la practica como lo primario, y secundariamente la necesidad de “mucha discusión colectiva” (lucha política interna).
Yo creo que es al revés. Lo más importante que el Partido necesita de sus miembros es lucha política, tanto interna como entre las masas. Eso significa aceptar cierta responsabilidad por la línea y el trabajo del Partido. La unidad en la práctica fluye de ese compromiso.
Así que estar “abierto a la lucha” es lo principal que pedimos de los miembros del Partido. Como miembro, debes pertenecer a un colectivo que lleva a la práctica las decisiones del Partido. Eso te ayuda a desarrollar una mayor comprensión del comunismo, lo cual significa un compromiso más profundo para hacer lo que se necesita, lo mejor que puedas.
También significa luchar para ayudarle al Partido a tomar las mejores decisiones posibles para desarrollar la línea en la práctica.
Las masas pueden hacer esto. Por eso creo que el debate del partido de “masas versus el de cuadros”, de los tiempos de Lenin, no está actualizado. Hoy estamos descubriendo, poco a poco, cómo construir un partido que es “masivo” Y de “cuadros”.
Así es como será el comunismo: Masas movilizadas para hacer y echar a andar todas las decisiones de la sociedad, organizadas como un Partido Comunista Obrero Internacional.
-Camarada en Los Ángeles
Un Orgulloso Nuevo Camarada en Sudáfrica
Quiero agradecerles por darme la bienvenida de aceptación en vuestra organización.
Me encantaría ser un miembro de PCOI porque es la clase de organización que se necesita en todo el mundo. Creo que el sueño de todo ser humano es ser libre y vivir una vida sana y normal.
Como nuevo miembro de la organización prometo que le hablaré de comunismo a cualquiera que esté dispuesto a escucharme. Si es necesario, caminaré, conduciré o volaré a cualquier lugar para proclamar las ideas del PCOI.
A mis camaradas les digo, continuemos la lucha juntos como un solo puño. Trabajemos como un equipo para asegurarnos de que logremos nuestro objetivo: luchemos para construir nuestra sociedad comunista.
Camarada XYZ
Camarada de EEUU Inspirado por las Masas Sudafricanas
Soy un trabajador del transporte público en Los Ángeles (MTA) y la razón por la que vine a Sudáfrica fue para asistir a una conferencia comunista internacional.
Cuando arribamos a Puerto Elizabeth y miré la zona donde viven la burguesía y la clase media alta blanca, me gustó la belleza de sus casas, con bellos jardines, calles y parques limpios, toda una belleza. Esa misma tarde con unos amigos fuimos a la zona donde vive la clase obrera negra: al municipio, herencia del Apartheid.
El cambio de ambiente allí es impresionante, increíble e insultante. La mayoría de las casas están semidestruidas, incluyendo las que se construyeron después del tan famoso triunfo de Mandela. Le pregunté a algunas familias, que si estaban conformes con ellas. La mayoría dijo que no porque fueron construidas con materiales baratos, que al año empiezan a resquebrajarse.
Estas son de las pocas familias “beneficiadas”, porque aún hay muchos esperando que se les cumplan las promesas, que por hoy han sido puestas en los archivos del olvido. Por eso hay miles y miles de familias que viven en chozas de láminas, cartón, pedazos de madera que se puede adivinar han sido usados en ocasiones anteriores. Las familias más paupérrimas viven en ,chozas que es increíble que seres humanos puedan habitarlas.
En uno de estos municipios, donde me tocó compartir con camaradas del Partido, no vi a la policía por ningún lado. Sin embargo el lugar podría competir con los más seguros del mundo. Las personas son amigables y respetuosas - niños, jóvenes y gente mayor. Los vecinos se cuidan los unos a otros, juntamente con sus pocas pertenencias. Uno puede caminar a cualquier hora del día sin ser molestado.
La mayoría de jóvenes, como también las mujeres y en general la vecindad son muy políticos. Algunos estudiantes se unieron al Partido al igual también que algunas mujeres. Este sector de la clase trabajadora parece captar fácilmente las ideas primordiales del Partido Comunista Obrero Internacional (PCOI).
También, en las diferentes distribuciones del periódico y volantes, pude observar como en las fábricas los obreros tomaban el periódico con entusiasmo. Lo mismo sucedió en la universidad, una respuesta impresionante a las ideas de PCOI. Se hicieron muchos contactos y estoy seguro que muchos de ellos se presentarán a la conferencia internacional. El potencial para que el Partido crezca es inmenso. Esperamos que esto inspire a otros trabajadores a seguir el ejemplo de los camaradas de Sudáfrica.
Camarada en Los Ángeles
Veterano de la Lucha, Nuevo Camarada
A la edad de los 14 años yo estaba muy activo en la política y a esa edad no podía quedarme sentado observando lo que sucedía políticamente en
Sudáfrica. La política estaba en mi sangre. Cada día y noche estaba comiendo y durmiendo política. Pero a la edad de 19 había notado que ¡la política era tan sucia! Vi que la misión de los políticos patronales era llenar sus bolsillos y alimentar a la nación con mentiras. A esa edad ya había llegado a estar tan enfermo y cansado de la política y los políticos a causa de sus promesas vacías, no sólo a nivel nacional sino también internacionalmente.
Pero cuando dejaron que Mandela saliera de la cárcel, pensé que las cosas iban a mejorar y ahí es cuando voté por el Congreso Nacional Africano (CNA), con la esperanza de una vida mejor para todos como lo habían prometido. Desde las elecciones de 1994 he observado los movimientos de la CNA. Pero a través de mis observaciones no he notado ningún cambio en el país, pero los he visto enriquecerse y no cumplir con las necesidades y deseos de los pobres. Ahí fue cuando empecé a perder la fe en la política una vez más y ya nunca más voté. Usted podría preguntarse ¿por qué? No podía soportar ver a todos mis hermanos y hermanas que van a la cama con el estómago vacío, mientras que otros no tienen hogar.
Como yo ya era una persona apolítica, me presentaron a PCOI (Partido Comunista Obrero Internacional) y después de haber conocido a este partido, he sentido un interés por PCOI. He pedido Bandera Roja y durante mi tiempo libre lo he leído y veo que explica más sobre PCOI. Ahora me he unido al PCOI. No he ingresado para mi beneficio personal, sino para servir a los intereses de las personas necesitadas. Saludos al PCOI.
Un nuevo camarada en Sudáfrica
De las Filas del Ejército Burgués a las Filas Comunistas del PCOI
El Salvador--Crecí en una familia dedicada a la agricultura en el municipio de San Fernando zona oriental. Siendo joven me presente al cuartel militar para hacer la plaza pero no califique. Cuando tenía 22 años fui reclutado y llevado al cuartel llamado Centro de Instrucción de Reclutas, ubicado en la zona occidental del país.
Hice 16 meses de servicio militar, 4 meses en el Centro de Instrucción de Reclutas, 11 destacado en San Miguel y 1 en Monteca lugar fronterizo entre El Salvador y Honduras.
Cuando me presente voluntariamente al ejército fue porque quería ser militar, no porque entendiera la situación de la guerra y porque había que luchar. Sabía que siendo soldado tenía que enfrentarme en combate como cuando estuve en Monteca por rumores de conflicto entre El Salvador y Honduras. Al igual recuerdo que estábamos en formación, el capitán mencionó que si había un guerrillero que diera un paso al frente, siendo así que los llamados guerrilleros eran nuestros enemigos.
En el año 1977 me dieron de baja volviendo a mi familia llevando en mente que en caso de guerra tenía que presentarme al ejército. Dos años después de haber salido del cuartel realice actividades paramilitares como proteger al comandante local.
Como Ingresé A La Guerrilla
En las filas guerrilleras habían amigos y familiares que llegaban a mi casa y me concientizaban sobre la lucha guerrillera, sabían que había prestado servicio militar y seria de mucha utilidad. En 1980 la guerra se intensificó y me integre a la guerrilla pues veía mucha injusticia y represión hacia la clase trabajadora por parte del gobierno.
Esta decisión provocó que las fuerzas armadas me buscaran para asesinarme. Así me integre a un campamento donde realizaba actividades de logística, recolección de provisión y alimentación. Ya en la guerrilla entendí mejor el motivo de la lucha recordando bien hoy, que se nos decía que había dos clases enfrentadas: el proletariado y la burguesía.
Como Veo Las Cosas Hoy
Que la situación no ha cambiado tanto pues estas dos clases siguen enfrentadas, y han pasado muchos años desde1992 cuando se firmaron los Acuerdos de Paz. En esa fecha me sentí satisfecho, cuando veía que íbamos a integrarnos a la vida civil, seguí siendo de izquierda y continué en el FMLN pero a este partido pienso que lo absorbió el capitalismo, muchos exguerrilleros tenemos esta idea.
Los principios de solidaridad y humanismo que tuvimos en la guerra han desaparecido y hoy solo nos ven como instrumentos para el día de las elecciones, yo no participo ya de esa farsa, que solo sirve para quitar y poner patrones capitalistas.
Como Ingresé Al PCOI
Considerando que el FMLN ya no respondía a principios revolucionarios, conocí a compañeros del PLP pues los camaradas con quien estamos en el PCOI también estuvieron en el. Leí el periódico del PLP y estuve en reuniones. Luego me di cuenta de la ruptura, conocí algunos motivos que valoré ya que se trataba de la línea política que nos llevará a construir el sistema comunista, pues ya de reformas tenemos suficiente y no es lo que necesitamos.
Me quedé con el PCOI, partido en el cual entiendo que hago una verdadera lucha. En mi casa nos reunimos como camaradas y he realizado actividades distribuyendo el periódico Bandera Roja el Primero de Mayo.
En la comunidad donde vivo estamos haciendo esfuerzos para consolidar una célula que conduzca y dirija a la clase trabajadora hacia el comunismo.
Camarada en El Salvador
Construyendo Casas, Construyendo el Comunismo
Recientemente visité a Tijuana, México con un grupo de mi iglesia para ayudarles a unas familias construir casas muy básicas por sí mismas. Allí trabajamos con una organización comunitaria de cooperación.
Cuando nos presentamos en el centro del “círculo” uno de mis amigos de la iglesia, dijo que “él estaba tratando de salvar el medio ambiente mediante el capitalismo.” Se refería que estaba organizando para una versión progresiva de un impuesto al carbón. Por lo tanto, cuando llegó mi turno dije que yo estaba tratando de salvar al mundo mediante el comunismo.
Esa noche estábamos relajándonos después de un día de trabajo muy arduo. Este amigo estaba tratando de explicar a los demás cómo “el mercado” podría inclinar la balanza contra las emisiones de carbono y el calentamiento global sin perjudicar a los trabajadores de bajos ingresos. Le respondí con mis razones por las cuales eso no sucedería. Los ricos no reducirían sus lujos (como jets privados) porque todavía los podrían comprar. Los gobiernos no gastarían el dinero de los impuestos en las masas porque ellos están controlados por los capitalistas más ricos.
Camino al lugar de trabajo la mañana siguiente, otra amiga mencionó que ella y otros habían disfrutado escuchando nuestra conversación. Ella dijo que no solía escuchar debates inteligentes y amistosos sobre cuestiones reales entre las personas con grandes desacuerdos, pero que se respetaban mutuamente.
Justo en ese momento vi y señalé otro ejemplo de lo que está malo con la economía de mercado del capitalismo. Estábamos pasando hectáreas tras hectáreas de casas vacías recién construidas. Había un exceso de viviendas porque muchos desarrolladores compiten por el mismo mercado.
Mientras tanto, trabajadores como a nuestros nuevos amigos viven en pequeñas chozas y se rompen las espaldas construyendo casas, de cemento y barras de refuerzo, de dos habitaciones. Algunos de ellos son obreros de la construcción que no pueden comprar o incluso alquilar las casas que construyen para los desarrolladores.
El trabajo que hacemos con nuestros amigos de Tijuana es para su uso, sin fines lucrativos. Es de “baja tecnología” y no exige gran cantidad de pericia. Todos nosotros contentos de poder hacer amigos a través de las fronteras, mientras paleamos arena y la grava y pasamos en cadena baldes de cemento. Nosotros hacemos el trabajo que podemos: personas como yo pasamos de regreso los baldes vacíos. La gente de nuestro grupo de la iglesia siempre da gracias por la oportunidad de ayudar.
La experiencia de trabajar juntos así es una razón más que tengo para creer que podemos salvar al mundo por medio del comunismo.
Lectora en California