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Boeing:

No Más Juegos de Sillas Musicales; A Movilizar Para la Revolución Comunista

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SEATLE, Washington – La Sección C del Sindicato de Torneros IAM destituyó a su presidente en octubre. El ex presidente Juan López, juntamente con una nueva sarta de candidatos administrativos, ganó en lo que se ha apodado “un juego de sillas musicales”.
La Sección C es una de cuatro Secciones que componen el Distrito 751 del IAM, el cual representa a los trabajadores de oficina de Boeing en el área de Seattle. Cada Sección representa trabajadores según el trabajo que desempeñan.
Bajo el comunismo, la Sección C no existirá porque los trabajadores no serán divididos por los trabajos que hagan. Los torneros serán ingenieros; todos se turnaran haciendo tareas múltiples en la fábrica. Eliminaremos el abismo entre el trabajo intelectual y el manual.
López atacó al candidato perdedor, el cual estuvo a la par de Ray Conner, el ejecutivo de Aviones Comerciales de Boeing, cuando éste inauguraba la planta en Everett para el nuevo avión 777x.
En un breve discurso ese día, el candidato perdedor dijo que aunque él no había apoyado la extensión del contrato, aprobada por un pequeño margen en enero, el sindicato tenía que acatar el resultado.
La extensión del contrato estableció de hecho un régimen de no-huelgas hasta 2024. Eliminó las pensiones definidas y atacó a toda una nueva generación de obreros.

No Todo Lo Que Brilla Es Oro
López presentó una campaña más combativa, pero elecciones sindicales y cambios en la cúpula sindical no eliminan las leyes del capitalismo. Todos - sindicato, empresa, gobierno federal y estatal – conspiraron para que esta extensión del contrato fuera aprobada.
La inevitable crisis de sobreproducción que se dará, cuando los aviones comerciales producidos en China lleguen al mercado en la próxima década, ha obligado a la empresa a actuar. Muchos fabricantes perseguirán a muy pocos compradores, reduciendo así los precios por debajo del costo actual de producir un avión.
El ejecutivo Ray Conner admitió que los pedidos de aviones pendientes se vendieron 50% más baratos de lo que cuesta producirlos. Boeing tenía que asegurarse esos pedidos antes de que China comience a producir aviones comerciales.
“Nuestra buena reputación y calidad ya no nos garantizan buenos precios,” admitió él. Todo depende ahora en los costos (léase en atacar a los obreros).

No Nos Digan Lo Que Sabemos, Dígannos Si El Comunismo Funcionará
La Sección C tiene casi 6,000 miembros. Sólo un poco más de 800 votaron. La mayoría de estos fueron delegados sindicales y burócratas sindicales a sueldo. Hace unos meses, un porcentaje aun más chico votó en las elecciones para presidente del  Distrito 751.
La perspectiva sindical de luchar por mejoras en esta crisis capitalista es cada vez más y más irrelevante. Eso es lo que los miembros del sindicato de Boeing nos están diciendo con tan baja participación en las elecciones sindicales.
Mientras el sindicato trata inútilmente de convencernos que todavía es relevante, una docena de obreros de Boeing asistieron a nuestras reuniones bimensuales del PCOI. Discutimos como el comunismo cambiará fundamentalmente la sociedad y nuestras vidas.
Las crisis de sobreproducción será una reliquia histórica cuando produzcamos para satisfacer nuestras necesidades, no para producir ganancias patronales.
Produciendo para satisfacer nuestras necesidades nos permitirá rediseñar fábricas en centros educativos y culturales. No permitiremos que los mil millones de obreros industriales del mundo malgasten su potencial humano esclavizados por las ganancias de los capitalistas.
La batalla contra el capitalismo internacional no será limitada por las ilusiones capitalistas consagradas en el sindicalismo. Por lo tanto, no sólo no existirá la Sección C, sino que todo el aparato sindical no obstaculizará nuestra lucha
Las decisiones no dependerán de elecciones y de las intrigas que las acompañan. La clase obrera decidirá en base del consenso que surja de la lucha política masiva  iniciada por nuestro Partido.
Movilizar a las masas para el comunismo significa el fin de la explotación para ganancias, por lo tanto no más contratos para definir esa explotación.
En vez de participar en fútiles juegos de elecciones necesitamos movilizar a las masas para la revolución comunista.