¡Luchemos por el Comunismo!
	Partido Comunista Obrero Internacional
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“Encender una Luz, es un concierto para el progreso sobre la raza en América”, fue transmitido el 20 de noviembre simultáneamente en cuatro canales, y patrocinado por United Way. “Bruce Springsteen abrió con “American Skin (41 Shots)”, refiriéndose a los 41 disparos que la policía hizo cuando asesinaron al inmigrante africano Amadou Diallo en 1999. John Legend, Rhiannon Giddens y Pharrell Williams fueron algunos de los artistas principales. George López criticó a Donald Trump. Todo suena bien, ¿verdad?
Los que pensábamos que habría una conversación honesta porque estos artistas con conciencia social estaban detrás del evento nos enteramos de que eso era realmente pedir demasiado. Una conversación honesta implicaría hablar de la base material del racismo en el sistema salarial, y el propio capitalismo. Una conversación honesta sería al menos hablar de la lucha por un sistema comunista donde podríamos terminar con el racismo de una vez por todas. Pero no se puede hablar de eso en la televisión.
Hubo un poco de buena música. Lo mejor fue probablemente Jill Scott cantando la balada anti-linchamiento “Strange Fruit”, escrita por un comunista y cantada por Billy Holiday.
¿Qué fue lo peor? ¿El constante énfasis en el perdón de la congregación Madre Emanuel, de la cual nueve de sus miembros fueron asesinados a sangre fría por un racista blanco? ¿La entrevista con la madre en Baltimore que fue filmada golpeando a su hijo en la cabeza por protestar el asesinato policíaco de Freddie Gray? ¿La exclusión de Sandy Bland, asesinada en Texas bajo custodia policial?
¿La entrevista con las esposas de 5 policías blancos y un policía negro en Ferguson hablando de lo difícil que las protestas por el asesinato policiaco de Michael Brown han sido para ellos? Mientras que la policía ha matado a miles de personas en los EE.UU. este año, quieren que veamos a la policía como nuestros protectores contra criminales del barrio, en lugar de los defensores de los más grandes criminales—los capitalistas y su sistema racista.
Como Bandera Roja lo ha señalado en el pasado, hay una tremenda ira de las masas sobre el terror racista de la policía. La clase dominante está trabajando horas extras para contener esa ira. El canalizar a los manifestantes hacia la política electoral es una táctica. Ganar a la gente a simpatizar con la policía, en lugar de sus víctimas, es otra. Este concierto, la recaudación de dinero para un monumento a los caídos en la Madre Iglesia Emmanuel en Charleston aboga por el perdón, en lugar de salir a las calles.
La canción de cierre, “Un hombre puede cambiar el mundo” empujó soluciones individuales de “la redención y el perdón” y las urnas para descarrilar las protestas. Tenemos una solución colectiva - movilizar a las masas para el comunismo.