Miles de trabajadores, maestros y estudiantes se unieron a una huelga general contra las medidas de austeridad impuestas por el gobierno y los ataques a la educación. Las masas de la isla siguen sin electricidad o agua potable ocho meses después del huracán María. Cuando la policía atacó la manifestación con gases lacrimógenos y gas pimienta, muchos jóvenes se defendieron y gritaron: “¡Somos más y no tenemos miedo!”.