El Poder Obrero Comunista Puede Resolver la Crisis Ambiental
18 de septiembre: Cuando estamos a punto de ir a la imprenta, millones de estudiantes en todo el mundo planean hacer huelga y marchar el viernes. Exigen que los “adultos encargados hagan algo, cualquier cosa, acerca del desastre del cambio climático”. Pero esos adultos están encargados de un sistema capitalista global. Y el capitalismo es incapaz de resolver la crisis climática que ha creado.
Los jóvenes deben aliarse con las masas obreras de todo el mundo para destruir ese sistema con la revolución comunista.
En el comunismo, las masas obreras ejercerán colectivamente el poder. Construiremos un mundo nuevo sobre los residuos del viejo. Nunca más estaremos encadenados por el dinero, mercados o ganancias. En su lugar, organizaremos la producción para satisfacer las necesidades de todos – incluso para los que vendrán después.
La creatividad de las masas se desatará. Desarrollaremos la tecnología existente y la avanzaremos más para desarrollar una infraestructura energética totalmente sostenible. Además, movilizaremos a las masas para revertir la devastación social y ambiental causada por la insaciable sed de ganancias del capitalismo y sus guerras cada vez más letales.
Ya existen los medios técnicos para comenzar a restaurar los océanos y los desiertos, los campos y los bosques, la ciudad y áreas rurales. El poder político comunista pondrá estos a trabajar. La movilización comunista unificará a las masas para usar sus cerebros y músculos para encontrar nuevas soluciones. No confiaremos en unos pocos “expertos” que fueron entrenados para proveerles a los capitalistas planes “rentables”.
Y no confiaremos en unos pocos activistas “súper estrellas” como Greta Thunberg. En cambio, comenzando en cuatro continentes en este momento, docenas (y luego cientos, miles y millones) están aprendiendo a ser líderes comunistas y a entrenar a muchos más.
¡Te invitamos a ser uno de ellos! ¡Nadie es demasiado joven y nadie es demasiado viejo! Y nadie puede darse el lujo de esperar.