Combatir el Racismo con la Construcción de una Base Comunista
15 de noviembre del 2019—El equipo sudafricano Springboks recientemente derrotó a Inglaterra y ganó el Campeonato Mundial de Rugby. Siya Kolisi, el primer capitán negro de los Springboks, creció en el municipio de Zwide, Port Elizabeth. Kolisi habló de su niñez, a menudo hambriento, en este municipio racialmente segregado. Agradeció a otras personas hambrientas y sin hogar por darle fuerzas.
Springboks comenzó en 1906. Defendía la supremacía blanca, simbolizaba la dominación masculina y apoyaba al sistema racista del apartheid. Los jóvenes negros en los municipios fueron excluidos del rugby por la necesidad de entrenamiento costoso y una dieta saludable. Bajo el apartheid, 140 de cada 1000 niños negros murieron antes de su primer cumpleaños. Las masas obreras negras odiaban el rugby.
M, un camarada del PCOI que trabaja en una gran panadería, también creció en Zwide. “Conocía al capitán”, dijo M. “Es más joven que yo. Asistía a esta primaria en Zwide, pero tenía mucho talento y lo llevaron a una costosa escuela privada en su mayoría blanca, Gray High School, donde hay el mejor rugby del país”.
M continuó, “Es su propaganda que, si él puede hacerlo, todos pueden lograrlo. Siempre es solo para el capitalista. Los capitalistas quieren usarte. No hay tal cosa como todos puedan lograrlo”.
Kolisi no se está muriendo de hambre ahora. Literalmente corrió por dinero. En los desfiles de la victoria en un autobús abierto alrededor de las grandes ciudades sudafricanas, logró el respaldo lucrativo de grandes multinacionales. No fue Zwide, porque allí no hay dinero que ganar.
Más de 14 millones de personas en la “nueva” Sudáfrica se acuestan con hambre cada noche. Más de la mitad de todos los sudafricanos experimentan inseguridad alimentaria.
Organizando en Zwide para la revolución comunista.
El PCOI está organizando para la revolución comunista en Zwide y en otras partes de Sudáfrica. Los patrones han ganado a un joven negro a su lado, pero tenemos millones para ganar a nuestro lado para destruir el capitalismo.
Nuestro colectivo habló con entusiasmo sobre cómo será el deporte en el comunismo. No tendremos deportes de espectáculo respaldados por multinacionales donde cientos de millones observan mientras los patrones sacan enormes ganancias promoviendo el individualismo, el racismo, el sexismo y el nacionalismo.
La sociedad comunista alentará a todos a estar físicamente activos y participar en actividades colectivas. Esta nueva sociedad creará nuevos deportes para luchar contra el individualismo y poner al frente la colectividad.
Para construir esta sociedad comunista, tenemos que ganar ahora a una gran cantidad de trabajadores y jóvenes a nuestro partido para prepararnos para la revolución. Esto requiere lazos sociales, políticos y personales profundos y consistentes con muchas personas a nuestro alrededor. Distribuir Bandera Roja nos ayuda a construir esta base comunista.
En Zwide, a lo largo de los años, hemos reclutado a varios camaradas. Algunos se volvieron menos activos al encontrarse con problemas personales como crisis familiares, desempleo, alcoholismo o problemas de salud mental. Estos son problemas reales y que te consumen, todos creados por el capitalismo.
Por ejemplo, el camarada L es un organizador muy prometedor. Vino en nuestro primer viaje a Marikana. Durante el viaje de 14 horas, discutimos “Movilizando a las masas para el comunismo”, el materialismo dialéctico y el Partido Comunista Obrero Internacional. En Marikana, aunque era nuevo al partido, fue muy audaz en la distribución de Bandera Roja. Se comunicó efectivamente con los trabajadores ya que habla un idioma comúnmente hablado allí.
Más tarde, los problemas personales lo llevaron a ser menos activo, pero nos mantuvimos en contacto. Luchamos con él, pero cuando dejó de asistir a las reuniones, nos sentimos decepcionados y frustrados. Sin embargo, como colectivo, nunca abandonamos a este camarada.
El mes pasado, el padre de L murió después de una amputación de pierna debido a la diabetes, otra muerte causada por el capitalismo hambriento de ganancias. Enviamos una pequeña contribución para ayudar con los gastos. Una semana después, renovó sus esfuerzos de organización. “Estoy en PCOI no por razones personales”, explicó L, “sino porque me apasiona el comunismo”.
Hay muchos ejemplos similares. Recientemente, un compañero fue apuñalado y tuvo que someterse a una cirugía en un hospital horrible. Otro compañero fue robado. Nos acercamos a ellos y los ayudamos tanto como pudimos.
Esta construcción de base comunista es crucial para reclutar a las masas al PCOI. A veces los camaradas tienen relaciones muy liberales con compañeros de trabajo, amigos, vecinos y familiares. Tienden a buscar la unidad y evitan la lucha política por el comunismo. A veces los camaradas intentan ganar una discusión sin escuchar a un nuevo trabajador.
Nos estamos volviendo más conscientes de nuestras fortalezas y debilidades. Al fortalecer los colectivos, con urgencia y paciencia, estamos construyendo una base sólida para el reclutamiento masivo.