Luchemos por un Mundo que Valore a Todas las Personas aquí ♦ Por un Mundo Sin Fronteras aquí ♦ Un Atleta Cuyo Corazón Estaba del Lado de los Trabajadores aquí ♦
París, Francia: 12 de diciembre – Cada fin de semana durante tres semanas, miles de personas han salido a las calles de París y otras ciudades francesas para protestar contra una propuesta de ley de seguridad que haría ilegal compartir videos de la policía. Esto después de la golpiza salvaje en noviembre dada por cuatro policías de París al productor de música negro Michael Zecler. Los manifestantes también están denunciando un proyecto de ley que restringe la expresión pública de Islam.
Luchemos por un Mundo que Valore a Todas las Personas
La pandemia ha agravado todos los problemas que enfrentamos. Nos ha obligado a enfrentar los numerosos problemas sistémicos que abundan en nuestras instituciones y también a lidiar con nosotros mismos individualmente.
Mi lidiar se centra en encontrar el significado de mi trabajo. Durante la mayor parte de mi vida adulta, pensé que mi mayor deseo era convertirme en una exitosa guionista y comediante de televisión. No puedo evitar ver en última instancia mis antiguas metas profesionales como egoístas. Eso es normal y alentado en la cultura estadounidense, pero he experimentado un despertar político y cultural. Ahora veo y entiendo el desmoronamiento de la sociedad estadounidense a nuestro alrededor y el papel que todos debemos desempeñar en la creación de un mundo mejor.
Comencé a ver nuevas posibilidades en 2018, cuando escuché por primera vez a la congresista Alexandria Ocasio-Cortez hablar sin miedo sobre el amor incondicional por la humanidad. Su fe en el bien de nuestros vecinos hizo que finalmente me sintiera menos solo al albergar en secreto esos sentimientos también. Ella me hizo sentir que se me permitía creer que las cosas podrían ser mejores y expresar esa creencia sin miedo al mundo. No tenía por qué aceptar calladamente el statu quo. Se me permitió ser diferente.
Me sentí llamada a perseguir esta nueva visión del mundo, a pesar de que me crié en la industria del entretenimiento de Los Ángeles, donde el trabajo social y político no estaba en el radar. Pero Ocasio-Cortez me mostró que trabajar para empoderar a mi comunidad es algo que cualquiera puede hacer. Todo lo que se requiere es creer en el valor intrínseco de todas las personas y el deseo de luchar por un mundo y una sociedad que reflejen esa verdad.
Después de junio de 2018, comencé a seguir el movimiento progresista con una pasión que siempre había sentido que faltaba en mi trabajo en la industria del entretenimiento. Al principio, simplemente me inicié en la política y trabajé para la campaña de Bernie Sanders. Cuando se produjo el confinamiento en marzo de 2020, perdí mi trabajo y la capacidad por completo de actuar como cómica. Entonces Sanders se retiró de la carrera y me sentí perdida sin brújula alguna.
Pero apoyándome en mi trabajo comunitario me trajo un nuevo y más poderoso sentido de propósito. Me ofrecí como voluntario para una campaña del Congreso local, me uní a mi Consejo Vecinal y encontré una comunidad en mi banco de alimentos local.
Verme como parte de una comunidad, en lugar de tratar de destacarme aparte de mi comunidad, me dio un sentido especial de pertenecer y un propósito que nunca antes había conocido. Ser miembro de mi comunidad es un rol más significativo y duradero que cualquier cargo.
Busqué en Trabajo Social y encontré un seminario Web en el cual un camarada trabajador social habló sobre cómo el capitalismo deprime a las personas. Ella se dio cuenta de que era necesario cambiar el sistema. Me acerqué a ella para aprender más sobre cómo veía las cosas y, a través de ella, aprendí de Bandera Roja.
Camarada Escritora
Luchemos por un Mundo sin Fronteras
“Vamos aquí con todo lo que nos dejó el huracán”, dijo un hombre mientras caminaba con una mochila a la espalda y un niño de dos años sentado en su cuello. Su pareja le acompañaba empujado una carriola de niño con bolsas plásticas con ropa y agua. Eran parte de los más de mil damnificados por los huracanes Eta y Iota que caminaron más de 24 horas antes de ser dispersados por la policía hondureña en su intento de migrar a EE.UU.
La pobreza, la violencia y los efectos de la pandemia se sumaron a los huracanes que afectaron a más de 4 millones de centroamericanos. Pero en particular a Honduras y Nicaragua, los países más pobres de una región pobre.
“Como le digo a mi hijo: ‘no tengo casa, no tengo comida para darte, el niño solo llora por leche’. Déjenos pasar”, Grito la mujer a la policía que impedía su paso. Su esposo perdió el trabajo en una finca bananera.
La clase obrera no aguanta más, y para muchos migrar lo ven como la única esperanza. El capitalismo fuerza a la clase trabajadora a tomar decisiones desesperadas por la frustración cuando suceden cataclismos. La pandemia y la crisis económica solo son resultados de un sistema económico que no funciona para los trabajadores. El capitalismo es un sistema basado en dinero para el bolsillo de los patrones.
Debemos luchar por cambiar este sistema corrupto. No debemos depender de los patrones para resolver los problemas que ellos mismos causan. Los patrones sacan más ganancias de ello, y, de hecho, ahora algunos son más ricos que cuando empezó la pandemia. Cuando pasan las crisis, el desempleo aumenta y los trabajos escasean, provocando que los trabajadores luchen por un puesto de trabajo con más bajos salarios. Debemos luchar por un sistema que trabaje para el bienestar de los trabajadores, por un sistema Comunista.
La clase trabajadora somos los únicos que podemos resolver nuestros problemas, organizándonos para luchar contra la esclavitud asalariada. Los únicos que podemos luchar por un sistema sin patrones, y donde la comida, la vivienda y todas las necesidades de los trabajadores sean satisfechas sin que a ninguna familia le falte. Y donde no tengamos que emigrar exponiendo nuestra vida y la de nuestra familia a los peligros, persiguiendo sueños que se convierten en pesadillas capitalistas.
Organicemos células del Partido Comunista Obrero Internacional. Construyamos el Partido, distribuyendo, leyendo y haciendo círculos de estudio con nuestro periódico Bandera Roja, y hagamos que los patrones tiemblen sintiendo que su fin se acerca. Levantemos la Bandera Roja del proletariado y destruyamos con una revolución armada el sistema de ganancias capitalista.
Camarada en Los Ángeles USA
Un Atleta Cuyo Corazón Estaba del Lado de los Trabajadores
“Fui al Vaticano y vi el techo de oro. Y me dije a mí cómo podía alguien ser tan hijo de perra como para vivir con un techo de oro y luego ir a países pobres y besar a niños con sus estómagos vacíos. Dejé de creer”.
La razón por la que Diego Maradona es idolatrado en todo el mundo es más que por sus increíbles habilidades con el balón. El jugador que tenía un tatuaje del Che en su brazo y de Fidel Castro en la pierna continuamente hacia declaraciones que mostraban que su corazón estaba del lado de los obreros del mundo.
Una y otra vez, las clases dominantes enviaron intelectuales, figuras del deporte y politiqueros para disuadirlo de dar sus declaraciones anticapitalistas y antiimperialistas, pero Diego Maradona estaba en efecto “arrodillándose” generaciones antes que los atletas de hoy. Por eso las masas lo aman y respetan mucho
Aficionado Rojo de los Deportes
Primera página de esta edición
