El Salvador. “La insurrección será de las masas o no será”, fue la respuesta de una camarada ante la pregunta de una obrera con respecto al llamado a la insurrección en contra de los diputados de la Asamblea Legislativa, hecha por el actual presidente Nayib Bukele
Este pidió al pueblo salvadoreño presentarse en la Asamblea Nacional, el domingo 9 de febrero, con el objetivo de presionar a este órgano del estado para que aprueben un préstamo de $109 millones de dólares, y poder implementar la tercera fase de su plan de seguridad llamado Plan de control territorial.
Miles se hicieron presentes, unos obligados en sus trabajos por sus jefes, otros por la ilusión que el presidente está haciendo las cosas bien con respecto al “control de las pandillas”.
El Plan de Control Territorial según el presidente y sus funcionarios es para garantizar la” seguridad a la población salvadoreña” y por eso urge la aprobación de dicho préstamo. Sin embargo, se sabe que hay compromisos de este gobierno con una empresa de México (SeguriTech Integral Segurity) que su especialidad es la venta de equipos y servicios de seguridad.
¿Realmente le interesa al gobierno la seguridad de la gente? No, Lo que le interesa es la próxima elección de diputados y alcaldes, y con este circo, pretende desgastar a los partidos políticos que pudieran restarle votos, y así ganar la mayoría de los diputados en la Asamblea Legislativa con su partido Nuevas Ideas.
Históricamente la población de El Salvador ha estado bajo la dominación del capitalismo y la única seguridad que les interesa es la de ellos. Estos equipos servirán para eso, para resguardar sus riquezas.
Otro aspecto de este enfrentamiento del poder legislativo y el ejecutivo también tiene que ver con los negocios de seguridad que hay en el país .Muchos diputados de diferentes partidos políticos, ARENA Y FMLN principalmente, son dueños de estas empresas y su número de miembros supera a la misma Policía Nacional Civil (PNC).
Estas empresas ven amenazadas sus ganancias millonarias ya que por años han tenido contratos con los gobiernos de turno. Y se han lucrado del presupuesto del estado, llevándose jugosas ganancias a sus bolsillos, ellos se llevan las ganancias y la clase trabajadora se lleva los muertos, producto de la podredumbre de este sistema capitalista.
Cuando la estabilidad de la clase burguesa esté en peligro usarán el ejército para aplastar cualquier rebelión de la clase trabajadora, pero seremos millones que vamos a definir el cambio de sistema y no habrá fusiles que puedan impedirlo.
La revolución llegará y será organizada por el PCOI (Partido Comunista Obrero Internacional) que luchamos por el comunismo, nuestra línea política lo establece claramente y luchamos por eso.
Los trabajadores deben movilizarse por el comunismo, directamente. En el sistema comunista no existirá el dinero, y desapareciendo esta base material, muchos de los problemas que afectan a los trabajadores desaparecerán, aunque quedaran secuelas lucharemos con eso. El tema de seguridad será uno de ellos, nos cuidaremos unos a otros, se formaran colectivos cuidando este aspecto de la vida, pero todos seremos responsables.
Únete al Partido Comunista Obrero Internacional. (PCOI).Lee y distribuye nuestro periódico Bandera Roja.
Primera página de esta edición
