La India: La Lucha comunista en Contra del Fascista Modi

Febrero,2020 Manifestantes Anti-Fascistas en Delhi, India, Luchan en Contra de la Policía

8 de marzo – Cuatro días de matanza fascista en Delhi, India – patrocinada por el gobierno – han dejado más de cien muertos (en su mayoría musulmanes). Miles resultaron gravemente heridos. Decenas de miles vieron sus hogares quemados o fueron expulsados de ellos.

El primer ministro Modi y su partido gobernante (BJP) prepararon esta horrible masacre. Durante semanas vomitaron odio contra los millones que se oponían a las leyes de ciudadanía xenófobas del BJP. El socio fascista de confianza de Modi, Amit Shah, jefe de la poderosa policía estatal, planeó meticulosamente el ataque. Fue bajo Modi y Shah que miles de musulmanes fueron asesinados en el estado de Gujarat en 2002.

El BJP armó a sus miembros con tubos de metal, gasolina y armas. Estos desataron su ira, atacando y matando musulmanes e incendiando sus hogares y propiedades. La policía, actuando bajo órdenes directas, protegió a los fascistas e incluso se unió a su espantosa violencia. Bloquearon las ambulancias que llevaban a los heridos a hospitales. Un juez emitió un fallo de emergencia a media noche, obligando a la policía a proporcionarles pasajes seguros a los heridos, él fue transferido de inmediato a otro Estado.

Estudiantes y trabajadores, incluidos miembros del Partido Comunista Obrero Internacional, resistieron a los fascistas y ayudaron a las víctimas. Los estudiantes de la Universidad Jawaharal Nehru y otras universidades abrieron sus dormitorios y los convirtieron en salas de emergencias médicas improvisadas. Muchos médicos y otros proveedores profesionales de atención médica trabajaron día y noche para atender a las víctimas de la violencia en Delhi.

“Cuando las autoridades descubrieron que el campus de la JNU estaba siendo utilizado para tratar a las víctimas heridas, enviaron a la policía para expulsarnos”, informó un camarada. “Amenazaron con suspender a cualquier estudiante involucrado en brindarles ayuda a los heridos. Tuvimos que trasladar a los pacientes a hogares privados de muchas familias hindúes simpatizantes, a otros campus y a los Gurudwaras (templos sij) locales que generosamente proporcionaron alimentos y medicinas”.

Los miembros del PCOI en Delhi contactaron a camaradas en Bangalore y Chennai y pidieron ayuda financiera para las víctimas de la masacre fascista.

“Aquí están Rs. 1000 ($14) para ayudar a las víctimas en Delhi”, dijo la camarada Asha en Bangalore. Ella es una obrera de la costura que gana como $110 al mes. Expresó un tremendo enojo y dolor al leer un reporte de que los fascistas habían arrojado a un niño de cuatro años al fuego.

Asha dirigió a otros camaradas en su fábrica y vecindario, y a los camaradas en Chennai, para recaudar una suma equivalente en poder adquisitivo a aproximadamente US $ 20,000 (más de 300,000 Rands sudafricanos).

Los miembros del PCOI tuvieron reuniones periódicas para darles una perspectiva comunista a los eventos.

Los fascistas italianos en la década de 1920 atacaron violentamente a trabajadores, sindicalistas y comunistas. Luego dirían que ellos eran los verdaderos victimados. El BJP y su organización matriz RSS siguen su ejemplo. Acusan a los musulmanes de ser invasores, forasteros, destructores de la antigua cultura hindú.

Pero las matanzas no eran producto de un conflicto religioso hindú-musulmán. Al representar a los hindúes como víctimas, el fascista BJP está atacando a toda la clase obrera.

Esta violencia capitalista es producto de la grave crisis del capitalismo global. El ascenso meteórico del imperialismo chino ha penetrado todos los rincones del mundo. En contraste, el imperialismo estadounidense ha declinado constantemente desde la Guerra de Vietnam. Este declive se aceleró con las guerras en Irak y Afganistán. Hoy, los imperialistas estadounidenses saben que necesitan enfrentarse a sus rivales chinos. Sin embargo, no pueden hacer eso mientras se aferran a controlar el Medio Oriente.

La matanza en Delhi fue planeada y ejecutada para coincidir con la visita de estado de Trump a la India. Mientras Trump y Modi se saludaban efusivamente en el vasto Palacio Presidencial de Delhi, el humo de la masacre se elevaba a solo 6 Km. de distancia. Modi le estaba haciendo saber a Trump que India podría ser un socio menor para contrarrestar a China. Su violencia despiadada envió señales escalofriantes al Medio Oriente y más allá.

Los capitalistas de todo el mundo están viendo la caída en su tasa de ganancias y sus enormes reservas de mercancías sin venderse. Su respuesta es atacar a sus trabajadores para reducir sus salarios. Para esto usan el racismo, la xenofobia y el fascismo. Mientras tanto, necesitan adquirir nuevos mercados. Esta contradicción nos acerca más a las guerras imperialistas. La clase trabajadora está siendo obligada a escoger entre el fascismo y el comunismo.

En Delhi, los camaradas del PCOI han encontrado a miles de trabajadores y estudiantes airados que quieren cambiar el sistema. Algunos se han unido al PCOI. Estos nuevos miembros están llenos de esperanzas y energías. Han visto los horrores del capitalismo y tienen una visión de un mundo sin ello. Su confianza en nuestra victoria y su total repudio a la intolerancia racista es una inspiración para la clase obrera internacional.

Nuestro trabajo es reclutar, reclutar y reclutar más miembros para construir una fuerza formidable que demolerá el capitalismo para siempre.

Primera página de esta edición

 

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