Marineros Desafían al Secretario de la Marina, Exponen la Debilidad Estratégica de EE. UU.
7 de abril: “¡Qué demonios!” gritaban marineros desafiantes en la cubierta del portaviones USS Theodore Roosevelt. Interrumpían al secretario interino de la Marina, Thomas Modly. Lo habían enviado para calmar su furia casi amotinada por el despido de su capitán, Brett Crozier.
El Capitán Crozier fue despedido después de escribir una carta quejándose de los peligros que enfrentaba la tripulación en su portaaviones infestado del Covid-19. La carta se había filtrado a la prensa, exponiendo al mundo las vulnerabilidades navales de EE.UU. en el Mar del Sur de China.
Hoy, Modly fue despedido por no calmar a los marineros. Este episodio, y el caos en la cadena de mando militar, es otra derrota más para el “Giro hacia Asia”.
“El Giro hacia Asia” es la estrategia de EE.UU. para contener el desarrollo de China. Implica el despliegue continuo de dos portaaviones en la región, la instalación de nuevos sistemas de misiles en Corea del Sur y la profundización de los lazos comerciales y militares a través de la Asociación Trans-Pacífica (ATP). No ha tenido éxito.
El ATP colapsó mientras que el comercio y acuerdos comerciales de China se consolidaron. Filipinas se alejó de los Estados Unidos y se dirigió hacia China. La asignación de dos grupos de portaaviones fracasó. En vez de mostrar la fuerza imperial, reveló lo sobre extendido que estaba EE.UU.
La impresionante Marina de alta tecnología cuenta con marineros agotados y sobrecargados. ¡Como resultado, los buques de guerra de última generación se estrellaban a menudo contra barcos mercantes que pasaban o rocas estacionarias!
He aquí ahora la última derrota en la “Batalla, de baja intensidad, por el Mar del Sur de China”. Ambos portaaviones asignados a la zona están temporalmente fuera de servicio. El USS Reagan está atracado en Japón. El USS Roosevelt está luchando contra el Covid-19 y casi amotinado.
Por lo tanto, si el equipo de protección personal (máscaras y batas) fabricado en China que EE.UU. ha ordenado están ahora en tránsito por el Mar del Sur de China, ¡están siendo protegidos únicamente por la marina china!
El Capitán Crozier fue despedido por pedir ayuda para combatir el virus en su barco. Sus superiores afirmaron que su carta era una traición a su misión. Cuando salía del barco, miles de marineros lo vitorearon. Ahora está en cuarentena en Guam, diagnosticado con Covid-19 al igual que otros 150 miembros de su tripulación.
Los principales líderes militares temen una rebelión de marineros de base que podría haber sido alimentada por la solidaridad de su capitán y los tardíos esfuerzos del liderazgo de la marina para ayudar. La rebelión de los marineros podría haber hecho eco en toda la fuerza armada.
Eso preocupa a los patrones más que la carta en sí. El apoyo de los marineros al capitán fue un desafío abierto al alto mando. Lo mismo fue su reacción ante el Secretario interino de la Armada, Modly.
Soldados y Marineros: Claves para la Revolución Comunista
Para los patrones, los marineros de base son prescindibles. Pero estos marineros tienen el poder de destruir el sistema capitalista volteando las armas y uniéndose a la clase trabajadora en la revolución comunista. Covid-19 ha paralizado uno de las armas más poderosas que los capitalistas tienen para controlar los mares. Pero la rebelión de los marineros podría provocar una situación revolucionaria.
La combatividad organizada de soldados y marineros ha jugado un papel clave en el sabotear la guerra imperialista. Los ejemplos incluyen el motín de 1905 en el acorazado ruso Potemkin y el levantamiento de la marina india al final de la Segunda Guerra Mundial. Durante la guerra de EE.UU. en Vietnam, los soldados de EE.UU. mataron sus oficiales y se negaron, en masa, a participar en el campo de batalla. Los marineros organizaron campañas de petición, se rebelaron en el Kitty Hawk, rechazaron las órdenes de desplegarse en la Constitución y sabotearon totalmente los barcos Forrestal y Ranger.
Es cierto, como escribió Crozier, EE.UU. no está técnicamente en guerra y que ningún marinero necesita morir. Pero miles de soldados, hombres y mujeres, han muerto por las ganancias y el poder de los capitalistas-imperialistas en conflictos recientes a nivel mundial.
La crisis de Covid 19 debe ser un llamado de atención para nuestras hermanas y hermanos de clase trabajadora en las Fuerzas Armadas. La clase dominante no pelea en sus propias guerras, sino que nos envía a nosotros y a nuestra familia a pelear por ellos. Ya es hora de que los marineros, soldados, aviadores/as tomemos nuestro futuro en nuestras propias manos. Construiremos un sistema comunista donde la seguridad y la salud de todos los humanos serán una prioridad.
Marineros y soldados de EE.UU. participaron activamente en la lucha contra la guerra de los EE. UU. en Vietnam, del video “Sir! No Sir!”
Lee nuestro folleto:
“Soldados, Marinos, Marines: Claves para la Revolución Comunista”
Disponible en:
Primera página de esta edición
