«La revolución, no las elecciones, acabará con la esclavitud asalariada racista con el poder comunista de los/las obreros/as»
Los Obreros y Soldados del Mundo Necesitan una Revolución Comunista para Destruir el Poder Estatal Capitalista
Una comisión del Congreso de Estados Unidos está investigando el asalto fascista del 6 de enero al Capitolio de Estados Unidos. ¿Fue un golpe fallido que intentó mantener a Trump en su puesto impidiendo que el Congreso certificará la victoria electoral de Biden, o simplemente fue un espectáculo? Esta comisión proclama que su objetivo es “defender la democracia” de esta falsa “insurrección”.
“No tengo muchas esperanzas de la comisión”, dijo un lector de Bandera Roja, “pero tal vez podamos obtener la suficiente información para contrarrestar la desinformación”.
“Muy hipócrita”, dijo otro. “La estructura misma de nuestro gobierno está tan profundamente sumida en el totalitarismo corporativo. El verdadero peligro fascista no se verá mitigado por los enjuiciamientos. Les dará a los neoliberales la cómoda sensación que anhelan de que el sistema está funcionando “.
Esta situación plantea interrogantes a los que se enfrentan los trabajadores en todas partes. Una insurrección es “un levantamiento o rebelión de ciudadanos contra su gobierno”. ¿De quién es el gobierno?
Los gobiernos capitalistas no son “por y para el pueblo” (trabajadores ciudadanos e inmigrantes). Son por y para los gobernantes capitalistas, ya sea en democracias como Estados Unidos o dictaduras militares como Myanmar. Es cierto también países capitalistas de Estado como China y Cuba.
El gobierno es “poder estatal” organizado. Ejerce la dictadura de la clase capitalista sobre las masas. Siempre que nos enfrentamos a los horrores y desastres del capitalismo, este poder estatal nos bloquea. Cuando nos levantamos y nos rebelamos, nos reprime todo el tiempo que puede.
Necesitamos un mundo comunista, donde los trabajadores estén en el poder. Solo podemos llegar allí luchando y ganando una revolución para destruir el poder estatal capitalista.
Golpes Fascistas e Insurrecciones Comunistas: Más diferentes que Similares
La revolución comunista tiene como objetivo destruir el estado capitalista, no apoderarse de él. Crearemos una organización social del poder nueva y muy diferente.
Las masas, organizadas por nuestro Partido comunista, participarán directa y abiertamente en la toma y ejecución de decisiones. Lidiarán del comportamiento antisocial de manera colectiva y camaraderil, no con la fuerza bruta.
Una vez que hayamos aplastado la última resistencia capitalista, no habrá necesidad ni uso de la violencia organizada.
Por el contrario, los golpes fascistas como el reciente en Túnez o el fallido motín pro-Trump del 6 de enero tienen como objetivo apoderarse del aparato estatal capitalista, no destruirlo. Usan ese poder estatal contra las masas.
Los “insurrectos” fascistas querían criminalizar a los obreros y jóvenes negros, a los migrantes, las personas trans, el aborto y más. Querían evitar la enseñanza de cualquier cosa asemejándose a la ciencia o la verdad sobre el racismo.
Los politiqueros de ambos lados de las “guerras culturales” utilizan temas como estos para distraer a los trabajadores de los ataques a nuestros empleos y bienestar. Utilizan el racismo, el sexismo y el nacionalismo para dividir a las masas y aumentar nuestra explotación.
El poder comunista es todo lo contrario. Las masas necesitan derrotar el racismo y el sexismo para unirnos en un sistema colectivo donde produzcamos y compartamos todo. El comunismo liberará el estudio de la ciencia y la historia de sus cadenas capitalistas.
Los golpes fascistas cuentan con el apoyo de los jefes militares y las fuerzas armadas imperialistas. La clase dominante estadounidense está profundamente dividida. La demora en reprimir los disturbios del 6 de enero lo demostró. Pero, por ahora, los altos mandos militares estadounidenses apoyan la dictadura capitalista en su forma democrática (electoral).
La revolución comunista, por el contrario, depende de ganar a los soldados, marineros e infantes de marina de base para que se volteen contra los altos mandos y lideren la revolución comunista. Trabajamos ahora para convencerlos de que se unan, apoyen y lideren rebeliones, insurrecciones y guerras prolongadas de la clase obrera comunista.
Dependemos de la clase obrera internacional para defender y difundir la revolución comunista.
La Estrategia Comunista Revolucionaria del PCOI
Los trabajadores deben organizar para el comunismo en el “punto de producción” (lugares de trabajo). Los trabajadores ciudadanos e inmigrantes deben prepararse para liderar masas más amplias para levantarse, rebelarse, derrocar y destruir los gobiernos capitalistas en todas partes.
No hay forma pacífica de liberarnos a nosotros y al Planeta Tierra de los estragos del capitalismo. Debemos prepararnos para la lucha armada – insurrecciones y guerra de guerrillas prolongadas – hasta que los capitalistas sean derrotados en todo el mundo.
La insurrección y la revolución son siempre ilegales. También lo son los preparativos para estas. Pero las masas revolucionarias han demostrado que se puede hacer. Tenemos mucho que aprender de las victorias (y errores) de la Revolución Haitiana y la Comuna de París de 1871. De la revolución bolchevique de 1917 en Rusia y la historia revolucionaria en China y en otros lugares.
El poder estatal capitalista es fuerte pero no invencible. Las masas pueden derrotarlo. ¡Podemos ganar!
Daremos parto a un mundo nuevo sobre las cenizas del viejo. Este nuevo mundo comunista existe hoy en embrión en nuestro Partido. Tomará forma y crecerá en medio de las dificultades y la lucha de clases. Dará saltos hacia adelante y sufrirá contratiempos. Se desarrollará de manera desigual y diferente en todo el mundo, pero siempre al servicio de los intereses de los trabajadores en todas partes.
No nos dejemos desviar ni distraer por las falsas promesas de democracia del capitalismo. No nos dejemos intimidar por el terrorismo fascista abierto del capitalismo.
Debemos luchar para siempre involucrar a las masas en el proceso de planificar y movilizar para el comunismo. Debemos ayudarles a ver la necesidad de ingresar y construir el Partido Comunista Obrero Internacional.