Terremoto de Haití: Jóvenes Médicos y Estudiantes Llevan la Atención Médica a las Masas
24 de agosto: Miles de personas murieron, decenas de miles resultaron heridas o quedaron sin hogar. El terremoto del 14 de agosto que devastó el suroeste de Haití fue un evento natural, pero el capitalismo lo convirtió en un desastre.
El capitalismo empobreció a las masas. Los obligó a refugiarse en estructuras claramente incapaces de soportar los terremotos que regularmente sacuden la isla. Los dejó varados sin comida y sin atención médica. ¡Este sistema racista asesino debe desaparecer!
En medio de la destrucción, las acciones de los doctores Timothee Jean-Jacques, Wonston Raphael, Ruben Misaac Pierre, Stanley Ettenne, Medgina Felix y la fisioterapeuta Rose-Milord Celestin iluminan el camino hacia el comunismo.
“Una vez que vimos lo que sucedió, como médicos jóvenes, nos conmovió”, dijo el Dr. Pierre. “Dijimos: ‘Tenemos que brindar nuestra ayuda sin importar cuáles sean las circunstancias’. A pesar de que hay inseguridad en el país, dijimos: ‘Tenemos que venir a ayudar’”.
Estos jóvenes trabajadores de la salud unieron sus recursos para llenar sus mochilas con suministros. Desafiaron la ruta controlada por las pandillas fuera de la capital para llegar a Les Cayes. No tenían un plan definido excepto confiar en las masas.
Una clínica en Les Cayes no funcionó, pero alguien los dirigió a la devastada comunidad de Marceline. Allí, un sacerdote local les ayudó a pedir prestada una carpa. Ofreció el uso de la cancha de fútbol por la escuela de la iglesia. De día, la tienda sería su clínica y de noche su refugio.
Se corrió la voz. Llegaron los pacientes. Los jóvenes médicos arreglaron las piernas rotas y trataron un traumatismo craneal. Reclutaron a otros para que llevaran a los pacientes con lesiones más graves a un hospital gubernamental. Planearon quedarse hasta que no hubiera más pacientes o no más suministros.
Luego llegó un grupo de universitarios con dos carpas más, kits de higiene, otro médico y un especialista en salud mental. Juntos, los dos grupos colaboraron para tratar a cientos de pacientes.
“Cualquiera que sea el apoyo que le des a alguien, primero debes considerarlo como personas”, dijo un estudiante de psicología. “No puedes pensar que eres mejor que ellos”.
“Si nos movemos todos juntos, llegaremos más rápido”, dijo el fisioterapeuta. “Si todos intentamos movernos juntos y alguien es golpeado, tenemos que detenernos y echar una mano. No es algo que afecte a un solo grupo de personas, afecta a todos “.
Compare a estos jóvenes con las ONG que invadieron Haití después del terremoto de 2010. Esas ONG recaudaron toneladas de dinero, pero dieron muy poca ayuda a las masas necesitadas. En cambio, las tropas de la ONU y los campos de refugiados desencadenaron epidemias de cólera y violencia contra las mujeres.
Entonces, como ahora, la mayoría de los primeros rescatistas eran haitianos que buscaban vecinos entre los escombros, a menudo con sus propias manos. Compartieron comida y agua. Muchos se ofrecieron como voluntarios en hospitales.
La esencia del comunismo es que las masas se ofrezcan como voluntarias para hacer, colectivamente, lo que sea necesario para satisfacer las necesidades de todos. Los jóvenes médicos y estudiantes haitianos de Marceline están poniendo en práctica este ideal, lo vean todos de esa manera o no.
Las crisis económicas y climáticas del capitalismo están creando más desastres en todas partes, todos los días. Estos desastres crean oportunidades para que muchos más de nosotros organicemos amigos que actúen sobre las ideas comunistas, como vemos hoy en Marceline. Pero también vemos estas oportunidades para promover ideas comunistas entre las masas y construir el Partido Comunista Obrero Internacional. Los camaradas jóvenes de la India nos están mostrando cómo hacer esto.
Haití, en este momento, es política y geológicamente inestable. Un verdadero partido comunista con una base de masas estaría planeando una revolución para destruir el capitalismo. Estas oportunidades son cada vez más comunes. Preparémonos ahora para luchar y construir el mundo comunista que necesitamos.
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