Materialismo y Lucha Revolucionaria por el Comunismo
Camaradas en Sudáfrica enfatizan la importancia de la filosofía comunista
El último artículo describió cómo Marx y Engels modificaron el viejo materialismo tradicional. Desarrollaron un nuevo materialismo social, histórico y dialéctico. Las diferencias entre el nuevo materialismo y el viejo son cruciales para organizar la revolución comunista.
El viejo materialismo simplemente decía que todo lo que es real está hecho de materia. Veía la realidad material como completamente independiente del pensamiento humano. En contraste, el nuevo materialismo reconoce que las estructuras sociales pueden ser materiales. Por tanto, debe reconocer que las ideas y las ideologías pueden tener efectos reales sobre lo material.
Las ideas son producto de sistemas materiales: es decir, de cerebros humanos y estructuras sociales. Pero las ideas no son materiales. Solo existen mientras alguna estructura material las sostenga. Los mitos, las religiones y el conocimiento natural de las sociedades antiguas, por ejemplo, se han ido para siempre a menos que hayan sido escritos o representados en imágenes y tallas.
Los pensamientos de las personas influyen constantemente en nuestra forma de actuar. Los trabajadores no irían a trabajar si no creyeran que se les pagarían. El comunismo se creará cuando mucha gente crea que debiera ser y entienda cómo luchar por él. La gente aprende qué es el comunismo y cómo luchar por él a partir de la acción material y de las pasadas y presentes prácticas de las luchas de clases revolucionarias de los trabajadores.
Aprendemos de la realidad material sólo a través de acciones “prácticas” sobre la realidad. Estas acciones son la base de las teorías correctas que necesitamos conocer para cambiar la realidad de manera deliberada y efectiva.
El comunista chino Mao Zedong señaló que Marx y Engels pudieron elaborar sus teorías principalmente porque “ellos personalmente participaron en la práctica de la lucha de clases y la experimentación científica de su tiempo”. Aconsejó: “Si quieres conocer la teoría y los métodos de la revolución, debes participar en la revolución”.
“Una idea se convierte en una fuerza material, una vez que es captada por las masas”, escribió Marx. Nuestro Partido puede construir el movimiento por el comunismo con ideas aprendidas de la práctica.
Pero las ideas no son suficientes para acabar con el capitalismo. Marx también afirmó correctamente que “El arma de la crítica [del capitalismo y las ideas capitalistas] no puede reemplazar la crítica por armas. La fuerza material debe ser derrocada por la fuerza material”. Solo las masas organizadas, en una revolución comunista dirigida por obreros industriales y soldados, pueden aplicar esa fuerza.
Necesitamos argumentos y debates teóricos para unificar a la clase obrera y guiarla en la lucha por el comunismo. Por lo tanto, los comunistas deben llevar a cabo una lucha de clases por las ideas comunistas, incluida la filosofía comunista.
Pero la lucha ideológica no es todo lo que se necesita para lograr el comunismo. El nuevo materialismo de Marx concluyó que “todas las formas y productos del [pensamiento capitalista] no pueden disolverse mediante la crítica mental, sino sólo mediante el derrocamiento práctico de las relaciones sociales reales que dieron lugar a esta patraña idealista”.
Debemos asimilar la lección de que “no la crítica sino la revolución es la fuerza motriz de la historia, [y] también de la religión, de la filosofía y de todos los demás tipos de teoría”.
¿Por qué las ideas más verdaderas no se vuelven dominantes bajo el capitalismo? Por el poder del estado capitalista y su maquinaria de propaganda. “La clase que es la fuerza material dominante de la sociedad”, escribió Marx, “es al mismo tiempo la fuerza intelectual dominante”.
Por ejemplo, la clase capitalista de todos los países utiliza su control de la economía, las escuelas, la cultura de masas y el Estado para tratar de garantizar que las ideologías de divide y conquista dominen el pensamiento de la gente. Eso incluye racismo, sexismo, nacionalismo, xenofobia, intolerancia religiosa y más.
Sin embargo, las ideas capitalistas nunca son completamente dominantes. Los esfuerzos capitalistas por dividirnos pueden ser contraproducentes de manera dramática. Eso sucedió en todo el mundo después del asesinato racista de George Floyd, exponiendo el racismo asesino del capitalismo. Está sucediendo ahora en la India, donde los trabajadores hindúes y musulmanes se están uniendo para apoyar a los agricultores.
La realidad material es que el capitalismo no satisface ni puede satisfacer las necesidades de las masas. Esta es la base de nuestro movimiento comunista. Hace posible ganar a una gran parte de las masas al comunismo.
Pero solo después de destruir el capitalismo con la revolución comunista podremos enterrar todas las atroces ideologías capitalistas. Como todas las otras miserias del capitalismo, son ineludibles hasta que no escapemos del capitalismo.
El materialismo significa que nuestro Partido necesita prepararse para la revolución comunista. Debemos discutir la revolución, estudiar los éxitos y fracasos del pasado y participar en luchas prácticas que puedan ayudarnos a nosotros y a las masas a aprender cómo luchar por el comunismo.
Ya hemos tomado la decisión crucial de que prepararse para la revolución incluye organizar dentro de las fuerzas armadas de los patrones. Nuestro objetivo es ganar millones para la lucha por la revolución comunista.
Únete a nosotros mientras nos preparamos para lograr el comunismo mediante la “crítica con armas” contra el sistema capitalista.