El Salvador, 30 de septiembre—“Me siento desanimada y hasta enferma, pues ya no quisiera trabajar en la maquila, cada día los acosos laborales son más, los sobornos más y las ganancias que les estamos dejando a los patronos, también son mucho más”, dijo una obrera.
En una de las células de obreras y obreros de las maquilas se ha discutido los conflictos de trabajadores de unos con otros, por alcanzar unas monedas extras adicionales al salario mínimo. Hay camaradas que han entendido la lección que entre más sea la producción en la fábrica es mayor las ganancias para el patrón “Debemos de ser más solidarios entre obreras y obreros” comentó un líder del Partido Comunista Obrero Internacional.
En uno de los módulos de producción dos obreras después de discutir por producir más docenas de camisas de lo normal terminaron golpeándose una con la otra, comentó una camarada organizada en el PCOI. Al final de escuchar el relato de la camarada llegamos a una conclusión que, en este sistema capitalista, de hoy por hoy es así, pero de ahí viene la necesidad de organizar a más trabajadores para el partido para terminar con todos estos tipos de confrontación que el mismo sistema ha creado para dividir a nuestra clase.
Se hizo una remembranza de que en el comunismo no existirán patrones, ni existirá el dinero, ni la competencia entre los trabajadores.
Camarada en las Maquilas