Crisis Frontera Polonia/Bielorrusia y el Papel Clave de Obreros Migrantes aquí ♦ Reclutemos a Trabajadores Inmigrantes Mundialmente aquí ♦ Trabajadores Inmigrantes Provoca Movilización Laboral Masiva aquí ♦
Migrantes lanzando piedras a los guardias fronterizos polacos
Crisis Fronteriza y el Intensificante Conflicto Interimperialista
Los gobernantes de Bielorrusia fabricaron ésta crisis. Es su respuesta a las sanciones de la Unión Europea, impuestas porque Bielorrusia obligó a un avión civil a aterrizar para arrestar a un líder de la oposición. El veinte por ciento del gas natural de Europa pasa de Rusia por Bielorrusia. El presidente Lukashenko amenazó: “si nos imponen sanciones adicionales, debemos responder. Calentamos a Europa y nos están amenazando, ¿y si paramos el suministro de gas natural?”.
En la última semana, los imperialistas rusos han apoyado a Lukashenko con dos ejercicios de entrenamiento de bombardeos en el oeste de Bielorrusia y un ejercicio de aterrizaje de paracaidistas cerca de la frontera de Bielorrusia, Polonia y Lituania. La finalización de Nord Stream-2 (ver la última edición de BR) al comienzo del invierno puede haber llevado a Rusia a alentar a Lukashenko a aumentar la presión sobre la Unión Europea (UE).
Mientras tanto, el presidente polaco Duda (un xenófobo aspirante a Trump) ha enviado miles de tropas a la frontera mientras mantiene alejados a activistas, ONG y los medios de comunicación. Afirma estar protegiendo a la UE de una “gran crisis migratoria”, al tiempo que coloca a Polonia dentro de la OTAN como un aliado de Estados Unidos y el Reino Unido. El gobierno británico lo ha apoyado enviando diez ingenieros militares para ayudar a construir un muro fronterizo.
Turquía y los Emiratos Árabes Unidos, bajo la presión de la UE, han impedido que sirios, afganos e iraquíes aborden vuelos a Bielorrusia.
Los migrantes en la frontera siguen congelándose y están furiosos. Grupos airados han comenzado a arrojar piedras a las tropas polacas, enfrentándose a sus cañones de agua.
Crece la Crisis Migratoria Mundial
Tres migrantes más se ahogaron en el Canal de la Mancha el 11 de noviembre. Eran de los cientos que diariamente arriesgan sus vidas en pequeñas embarcaciones. El ministro del Interior británico, Priti Patel, ha prometido “hacer inviable esta ruta”. Es decir, hacerla tan peligrosa para que muera gente desesperada. En el Mediterráneo, esta estrategia ha dejado más de 1,300 refugiados muertos este año.
La alemana Merkel y el francés Macron han intervenido por la UE, tratando de calmar las tensiones. Pero la UE por mucho tiempo ha sobornado hipócritamente a países como Turquía y Libia para evitar que los inmigrantes lleguen a Europa. Poniendo la crisis en Bielorrusia en primera plana mundialmente desvía la atención de las asesinas políticas fronterizas de la UE, el Reino Unido y los Estados Unidos.
Camaradas en Europa Construyen Lazos Comunistas con Trabajadores Inmigrantes
Los medios de comunicación de los patrones llaman a los migrantes en la frontera entre Polonia y Bielorrusia “peones” y “balones políticos”. ¡Ninguno de nosotros, inmigrante o ciudadano, es una pieza de ajedrez o una pelota de fútbol! Somos trabajadores. Algunos de nosotros vivimos en el país de nuestros padres y abuelos, y otros somos inmigrantes o hijos de inmigrantes.
El trabajo de los camaradas del PCOI en Europa refleja la importancia histórica y actual de los trabajadores inmigrantes y sus familias en las luchas de clases obreras. En palabras de los lectores y amigos de Bandera Roja:
“Cuando la clase obrera está unida no hay nadie que pueda detenerla”. – Trabajador francés en Barcelona durante la Primavera Árabe de 2010
“El sistema en el que vivimos nos trata como basura y tenemos que luchar para cambiarlo”. Trabajador cubano de la hostelería en Barcelona:
“La clase trabajadora tiene que luchar activamente para que el sistema no siga destruyendo la naturaleza. Debemos organizarnos y resistir”. – Ecoarquitecto irlandés y activista en España
“Al final, las transnacionales y los poderosos nunca están interesados en la clase obrera”. – Obrero del transporte de Guinea Ecuatorial en España
“Es difícil para los pobres vivir porque los ricos nos roban todo”. – Trabajador senegalés en España
“El sistema capitalista está interesado en superganancias, no en el bienestar de la clase trabajadora”. – Trabajador catalán en Eslovaquia
“Todos somos ciudadanos del mundo. No debemos tener miedo de pensar que podemos ser libres “. – Dentista peruano en Portugal
Y de un mecánico chileno, que perdió la visión de un ojo durante las protestas en Chile al inicio de la pandemia: “Camaradas, hoy más que nunca sé que el sistema capitalista tiene que ser derrotado porque solo sirve para masacrar a la clase obrera.”
Los trabajadores inmigrantes, heridos por la necesidad de dejar su hogar y su familia para sobrevivir en este sistema capitalista asesino, tienen una motivación especialmente fuerte para luchar por un mundo mejor. El comunismo es el mundo que necesitamos. Necesitamos redoblar nuestros esfuerzos para reclutar lectores como estos y su familia obrera global para ingresar a y organizar colectivos del Partido Comunista Obrero Internacional.
Reclutemos a Trabajadores Inmigrantes Mundialmente Para Que Sean Organizadores en la Lucha Por un Mundo Comunista Sin Fronteras
17 de noviembre: miles de migrantes, en su mayoría de Irak y Afganistán, se encuentran en grave peligro en los bosques invernales de Bielorrusia cerca de la frontera con Polonia. Décadas de guerra imperialista en el Medio Oriente, hambruna, pobreza y explotación han creado una emergencia de refugiados en curso. Capitalistas respaldados por imperialistas tratan a los trabajadores como desechables en su lucha por el dominio mundial. Tanto Bielorrusia (un aliado de Rusia) como Polonia (un miembro de la OTAN) han aumentado su presencia militar en la frontera. La confrontación podría potencialmente desencadenar una guerra más amplia.
Somos una clase trabajadora internacional, todos luchando bajo el yugo del capitalismo. Nuestras diferencias son irrelevantes. Los capitalistas construyeron fronteras para sus propios fines. Construyen xenofobia para mantenernos divididos: atacan a trabajadores de Zimbabue en Sudáfrica, trabajadores africanos en Francia, trabajadores haitianos y latinoamericanos en la frontera entre Estados Unidos y México y trabajadores afganos, sirios e iraquíes en la frontera entre Polonia y Bielorrusia.
Ningún trabajador es extranjero. Estamos comprometidos con la liberación de toda la clase obrera. Derrocaremos al capitalismo y construiremos un mundo comunista sin fronteras ni naciones, explotación o guerras. Los inmigrantes comunistas serán clave para esta victoria.
Gran Bretaña, 1977: Huelga de Trabajadoras Inmigrantes Provoca una Movilización Laboral Masiva
Hace cuarenta y cinco años, las mujeres del sur de Asia provocaron una de las mayores movilizaciones del movimiento obrero en Gran Bretaña. Trabajando en una pequeña planta de procesamiento de fotografías, llamada Grunwick, ellas habían aguantado salarios bajos, pequeñas humillaciones y horas extraordinarias obligatorias. Eran esclavas asalariadas.
Luego, un jefe racista las llamó “monas parlanchinas” por hablar gujarati (su idioma materno) en el trabajo. Una mujer respondió: “¡Somos leones que podrían arrancarte la cabeza de un mordisco!” Luego un pequeño grupo abandonó el trabajo, exigiendo un sindicato. Mujeres, inmigrantes y pocas numéricamente, fueron todas despedidas.
El movimiento sindical correctamente vio esto como un ataque a los “derechos sindicales” y organizó piquetes masivos. Los trabajadores del acero, los mineros del carbón, los trabajadores portuarios y otros —unos 20.000 hombres— se manifestaron en apoyo. Los trabajadores postales locales, cruciales para el negocio de pedidos por correo de Grunwick, se negaron a manejar su correo.
Aun así, la huelga fracasó. El sindicato de trabajadores postales cedió ante las demandas legales. El sindicato de las huelguistas cedió ante la presión del gobierno laborista. Una de las mayores movilizaciones del movimiento obrero, que había hecho a un lado los prejuicios anti-mujeres y anti-inmigrantes en una ola masiva de unidad de clase, se convirtió en una de las mayores traiciones a la clase trabajadora de Gran Bretaña.
Incluso si hubieran ganado el reconocimiento sindical, las trabajadoras todavía estarían atrapadas en la trampa de negociar los términos de su esclavitud asalariada. El sistema salarial, fundamental para el capitalismo, divide a los trabajadores. Hoy en día, las mujeres y los migrantes todavía se concentran en los empleos peor pagados. Y se convertirán en leones que, unidos a otros trabajadores, le morderán la cabeza al capitalismo y su sistema salarial. Lograran la victoria de la revolución comunista.