Historia Revolucionaria: Agricultura y Organización Social — Solidaridad Comunista, Trabajo e Ideología Deben Ser Primarios
EL SALVADOR—Durante la década de los 1980, los campesinos y obreros, organizados en grupos guerrilleros, tuvimos al inicio formación ideológica de como producir y repartir colectivamente. Cada uno de acuerdo con su empeño y a cada uno de acuerdo con su necesidad.
Al inicio de la guerra civil había áreas liberadas, zonas controladas por la guerrilla del FMLN. Ahí había colectivos de producción, en estos se producían maíz, frijoles, dulce de panela, ropa, calzado y municiones y cuidado de salud. No había dinero como intercambio en esta producción. También existía un equipo encargado de hacer el trabajo ideológico.
Durante las mañanas, invitaban a grupos de mujeres y hombres campesinos para que se sumaran a la producción. Ellos trabajaban en los sembradíos de la milpa, por la tarde se hacia la reunión de balance y se daba un reporte de cómo les había sido el trabajo. Todos aportaban y decían si todo había estado bien o si había críticas o autocríticas.
Los colectivos que producían el maíz empezaban a trabajarlo, lo limpiaban, lo cultivaban y cuando sacaban la cosecha lo guardaban entre la población. Lo repartían y cuando había necesidad lo iban a traer y ese maíz estaba asegurado. Porque muchas veces cuando dejaban escondido el maíz, lo encontraba el ejército gubernamental lo botaban o quemaban. Era mejor dejarlo con las personas en sus casas, entonces este colectivo se aseguraba de garantizar esa alimentación.
Había un colectivo que producía dulce de panela, era con el fin de tener una reserva de dulce. Cuando había un combate o para la salida de algunos compañeros, les daban dulce de panela, ese era el alimento básico.
Estaba otro colectivo de salud que se encargaba de la medicina y cuidar a los heridos. Ellos ya tenían con quien se conectaban para proveerse de la medicina de las ciudades o de otros países.
Había otro colectivo que era el de las misiones, que se encargaba de que los compañeros que iban al combate tuvieran todo lo que necesitaban, como zapatos, ropa, gorra, calcetines.
Todo esto fue al inicio de la guerra, todo era con la ilusión de un cambio de sistema, pero cuando la guerra se puso más fuerte del 1983 en adelante, estos colectivos fueron cambiando de estrategia la logística y salud, todos esos se encargaban de reclutar a las masas.
La colectivización de la agricultura: 1983 y Después
De 1983 en adelante, la guerra ya fue más aguda militarmente. Algunos colectivos de señores y señoras de la tercera edad, que nos ayudaban en la producción se fueron a los refugios en Honduras, Nicaragua.
Muchachas y muchachos que estaban a tiempo completo en los campamentos en el área de producción agrícola, se movilizaron a prepararse militarmente.
Para la logística de la alimentación, se formó un colectivo que se encargaba de resolver todo eso junto con la población de otros pueblos. En algunas partes les daban abonos (fertilizantes) para que sembrara el frijol y el maíz, la guerrilla ya era más numerosa. Llegaban de otros lugares se concentraban en un lugar y se debía tener de todo, entonces se le compraba o compartía con la población civil de la zona.
Ya en esta época se formó un colectivo de preparación de armamento, se encargaban de conseguir los materiales, se buscaban carpinteros que nos pudieran hacer el material que se necesitaba para hacer las granadas.
Todos estos al final del día hacían un balance para comentar los problemas que se había tenido y discutirlos para que estos no siguieran y si alguien tenía un problema se le hacia la crítica, pero constructiva, no destructiva.
Cuando ya nos desmovilizaron en 1992, quisimos seguir bajo esos colectivos y se hacían hortalizas para los Acuerdos de Paz, y cuando se cosechaba, se repartía entre todos. Siempre se trabajaba y se repartía en colectivo. Se enviaban a la bodega y había alguien encargado de despacharlo.
Después esa ideología de solidaridad comunista se fue dejando de lado por la dirigencia del FMLN, priorizando las elecciones y no la formación política. Al ver esto muchos combatientes nos decepcionamos y dejamos de creer en el proyecto de elecciones del FMLN. En la actualidad muchos somos parte del Partido Comunista Obrero Internacional, porque aquí hemos encontrado las raíces comunistas de nuestra formación inicial.
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