Para Acabar con el Racismo, la Xenofobia y el Sexismo
DELHI (India), 2 de enero: “¡Las mujeres de Jamiya están liderando la lucha!” (¡Jamiya ki landkiao ne rasta dikhaya hai!) Así lo proclamaron miles de mujeres que enfrentaban gases lacrimógenos y cañones de agua hace dos años, después de que decenas de musulmanes fueran masacrados aquí por la policía fascista. Una imagen icónica de cuatro mujeres protegiendo a un camarada caído mostró que las mujeres pueden defender sin miedo a los hermanos y hermanas de la clase trabajadora.
Yo estaba entre los estudiantes de Jamiya que participaron en estas manifestaciones. Hoy he decidido emprender la lucha para defender a la clase obrera y unirme al PCOI para la revolución comunista.
Tengo 22 años, soy de una familia musulmana muy pobre. Hemos vivido con miedo durante siete años desde que el partido BJP llegó al poder. Sus partidarios fascistas venían en grandes números a nuestra zona totalmente musulmana. Llegaron con palos, varillas de metal y bombas de gasolina rudimentarias, siempre seguidos por la policía que los protegía.
Hace dos años, la policía y sus amigos fascistas llegaron en formaciones militares muy grandes. No se podía ver a una sola persona en nuestro vecindario densamente poblado. La policía comenzó a romper puertas, ventanas y tiendas. La gente gritaba y lloraba mientras los líderes del fascista BJP le decían a la policía dónde disparar y quemar casas. No sabemos cuántas personas murieron, pero muchas fueron llevadas a los hospitales con heridas de bala y quemaduras.
La policía repitió estas tácticas cuando atacaron la Universidad Jamiya Milia, predominantemente musulmana. Los estudiantes en la biblioteca, los comedores y los dormitorios fueron sacados a rastras y golpeados salvajemente.
Yo estaba entre los miles de mujeres de Jamiya que respondieron espontáneamente a estos ataques policiales. Para muchos de nosotros, esta era nuestra primera manifestación política. Cambió mi vida para siempre. Me dije a mí misma que quiero acabar con este racismo, xenofobia, sexismo.
Nadie durmió esa noche. La gente se hacía las mismas preguntas: ¿Cómo se defiende uno de la policía, del comunalismo? Alguien pasó un volante que decía, “Revolución comunista AHORA” y explicó que solamente un cambio total de sistema funcionaria.
Seguí pensando en esto todo el tiempo. ¿Qué tiene que ver el comunismo con lo que está pasando? Mi inglés no es muy bueno, pero puedo leerlo. El folleto tenía un enlace al PCOI. Encontré muchos artículos sobre las luchas de los trabajadores. Había artículos sobre los miembros del PCOI en Delhi, pero Delhi es muy grande y no pude encontrarlos. Sin embargo, lo que leí aumentó mi curiosidad. Seguí leyendo Bandera Roja.
Las cosas estaban cambiando muy rápidamente a mi alrededor. Inspiradas por las mujeres de Jamiya, miles de mujeres de la clase obrera de todas las religiones realizaron una manifestación indefinida en la autopista contra las leyes racistas y xenófobas. Cuando la pandemia terminó con estas manifestaciones, vimos a millones de personas hambrientas y sin hogar tratando desesperadamente de regresar a sus aldeas. Leí en Bandera Roja que algunos camaradas del PCOI participaron en la distribución de alimentos. Explicaron cómo la pandemia ataca a la clase obrera y que necesitamos una sociedad sin dinero.
Este fue un gran punto de viraje en mi camino hacia el comunismo. Vi a millones de personas – que habían estado cocinando, limpiando, construyendo caminos, limpiando calles – arrojadas como basura porque no tenían dinero. Esta es la gente que hace todo. Tanta gente murió porque no tenía dinero. Estaba convencida de que una sociedad sin dinero lo solucionaría todo. No sabía cómo hacerlo, pero me convertí en comunista en mi mente.
Conforme leía Bandera Roja, cada artículo me inspiraba. Finalmente leí (en hindi) la una página “Movilizar a las Masas para el Comunismo (MMC)”. Esto abrió mi visión al panfleto de MMC y “La Lucha Comunista Contra el Sexismo” (ambos en inglés). Ambos documentos tuvieron un gran impacto en mí. Los discutí con algunos amigos.
Mientras discutíamos el folleto sobre el sexismo, leímos sobre el horrible asesinato de una joven en Hathras. Nuestros camaradas en Bangalore respondieron pidiendo a todos que se unieran a la lucha por el comunismo. Esto consolidó aún más mi compromiso con el comunismo. Hathras es muy peligroso para las mujeres dalit. Cuando la joven fue violada y asesinada, fue una joven periodista que fue a Hathras a las 2 am para reportarlo al mundo.
Me di cuenta de que no solo necesitamos una revolución comunista, sino que ahora necesitamos mujeres que tomen el liderazgo. Mi viaje hacia el comunismo se hizo realidad cuando conocí a camaradas del PCOI en Delhi hace unos meses.
Nuestra lucha por el comunismo solo se intensificará. Me comprometo firmemente a escribir en el futuro sobre cómo estamos reclutando más miembros. ¡Deseando a todos nuestros compañeros de todo el mundo un nuevo año lleno de lucha por el comunismo!
Los Comunistas Luchan Contra El Sexismo aquí