Cartas: Acabemos con el Racismo y el Dinero del Capitalismo-Imperialismo

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Haití: Huelga General Muestra la Necesidad de Movilizar a las Masas para el Comunismo

17 de febrero: una huelga general ha cerrado Haití durante dos semanas. Los trabajadores piden la dimisión del presidente Jovenal Moise, cuyo mandato expiró el 7 de febrero. El recién elegido presidente de EE.UU., Biden, ha apoyado la intención de Moise de gobernar un año más. Las tropas estadounidenses ocupan Haití, como lo han hecho de vez en cuando durante más de un siglo. Los trabajadores haitianos tienen una larga historia de lucha combativa contra el imperialismo. La elección o renuncia de un presidente no liberará a las masas haitianas de los horrores del capitalismo; solo la revolución comunista puede hacer eso.

¿Por Qué Necesitamos Abolir el Dinero?

El dinero es la raíz de la contradicción de clases. La clase capitalista (la burguesía) es la beneficiaria de la fuerza laboral de la clase obrera. Los burgueses explotan a los obreros para crear riqueza para ellos. A cambio, la clase obrera recibe la ilusión de “dinero” o “salario”, esclavitud asalariada.

Los bancos te prestan dinero que pagas con intereses. El dinero es una ilusión llamada moneda, dinero fiduciario o “cuasi dinero”. Es básicamente un recibo de pagaré. Esto significa que el dinero no te pertenece. Pertenece al banco y lo pagas con intereses todos los días, mediante alzas en los precios e impuestos. La inflación simplemente significa que estás pagando los intereses. De hecho, te estás empobreciendo más por cierto porcentaje cada año si recibes un aumento salarial sujeto a la tasa de inflación. El PCOI identifica las formas perversas de la burguesía.

El PCOI acabará con esta ideología burguesa que apoya los intereses del capitalismo, aboliendo las fronteras y el dinero. Esto es muy importante para nuestra sociedad sin clases. No olvidemos que se necesitarían 165 dólares hoy para comprar lo que compraron tus 100 dólares hace diez años. Es doloroso saber y comprender que la clase trabajadora de Marikana murió por esta ilusión: dinero.

El platino y el oro, por otro lado, no pierden valor. No sucumben a la inflación. Los patrones toman nuestro oro a la fuerza, obligando a la clase obrera a excavarlo para ellos, como un buey arando un campo de cultivo que nunca llegará a saborear. Y luego te dan un certificado de comercio en forma de “salario”. De esa manera, te prestan 5000 Rand al mes, pero cobrará ese dinero pagando una tarifa de transacción antes de recibirlo. Así es como funcionan el Banco Mundial y el FMI.

Todo es un círculo vicioso para garantizar que los principales capitalistas se enriquezcan sin medida.

¿Cuántos kilogramos de oro produce un minero mensualmente? Un kilo de oro hoy se vende al por menor a no menos de R846,491 (US $ 58,658). El minero de oro promedio obtiene papel que representa menos del 2% de eso. Lo mismo ocurre con los trabajadores de las minas de platino y diamantes. Lo que prestan a los mineros estos oligarcas criminales no es suficiente para alimentarlos. Entonces, se ven obligados a regresar al día siguiente y seguir vendiendo su fuerza de trabajo a este capitalista a cambio de un salario. Es esclavitud asalariada.

El intercambio es capitalismo puro, pero con el PCOI no tendremos tal cosa. En la sociedad comunista compartimos. Por eso también tenemos que acabar con las fronteras para que ningún país sea más rico o más pobre que otros. Movilizar a los mineros es lo primero en la lista de nuestra lucha.

No ganaremos si no destruimos todas las formas de capitalismo. El comunismo es la única forma de vida pura para todos.

Únete a nuestro colectivo para destruir esta ilusión y las fronteras.

Camarada en Sudáfrica

Reseña de la película “American Skin” (Piel Americana): La Revolución Comunista Multirracial Acabará con el Asesinato Policial Racista

“¡No era mi intención matar a tu hijo!” gritó el policía blanco que miró por el cañón del arma del padre cuyo hijo había matado. La película American Skin de Nate Parker ha recibido mucha atención de los medios de comunicación capitalista y de las masas. Un hombre negro y su hijo son detenidos por la policía y el hijo es asesinado a tiros por el oficial mientras grababa todo con su teléfono en la mano. La policía no es acusada de su asesinato y, un año después, la historia da un giro.

La audiencia de esta película son trabajadores y jóvenes negros que han marchado en las calles contra el asesinato policial racista. El mensaje es: no puedes ganar. Los trabajadores negros toman las armas, pero es una misión suicida desde el principio.

El personaje de Nate Parker, Lincoln (Linc) Jefferson, un año después del asesinato de su hijo Kijani, observa cómo dejan en libertar a su asesino (como en la vida real). La protesta estalla fuera de la estación de policía, pero solo participan trabajadores negros (no como en la vida real).

Linc, un veterano y un grupo completamente negro de sus ex-compañeros militares asaltan la estación de policía y toman a los policías como rehenes. Vuelven a juzgar el caso y juzgan al asesino de Kijani. Los “jurados” son un grupo multirracial de empleados civiles, prisioneros y transeúntes.

Los miembros del jurado se enfrentan a la policía en algunos de los diálogos más interesantes de la película. Un prisionero musulmán explica la mercantilización de la cultura negra y cómo eso no protege la vida de los negros. Un arrogante policía latino tiene un acalorado intercambio con un preso que lo llama traidor. Una policía latina habla sobre el sexismo que ella y otras mujeres policías enfrentan en el trabajo todos los días.

Todos estos diálogos son acalorados, pero nunca hay un análisis de clase del capitalismo y cómo este crea el sexismo, el racismo y la mercantilización.

El policía que mató al hijo de Linc admite su culpabilidad, justificándose diciendo que el perfil racial es el precio que se paga para mantener seguros los vecindarios ricos.

Hacia donde apunta la película desde allí es tan inevitable como reaccionario.

Es una película profundamente derrotista. Linc y sus camaradas se tomaron la estación de policía creyendo que podrían obtener, del sistema capitalista que lo asesinó, justicia para Kijani. Lejos de ser revolucionario, el mensaje de esta película es que los hombres negros que se levantan contra el sistema, incluso si creen en su “justicia”, serán exterminados.

Los trabajadores no pueden obtener una verdadera justicia asaltando una estación de policía o incluso si un grupo racial o étnico toma las armas contra el capitalismo.

La ejecución gravada de George Floyd el año pasado encendió las llamas de rebelión entre las masas trabajadoras de todas las “razas” del mundo. Debemos seguir trabajando para movilizar a las masas por la justicia que necesitamos: la Revolución Comunista.

Primera página de esta edición

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