Conflicto G7-OTAN: EE.UU. versus China Se Agudiza

Estados Unidos y Aliados Rumbo a Chocar con China-Rusia. Los Soldados y Obreros Debemos Prepararnos para la Revolución Comunista

Las cumbres del G7, la OTAN y la Unión Europea-EE.UU., que concluyeron del 13 al 15 de junio, agudizaron la rivalidad entre los imperialistas estadounidenses, chinos y rusos por la dominación mundial.

Esta rivalidad es el aspecto principal de la principal contradicción en el mundo actual. Directa o indirectamente, impacta todo lo que afecta nuestras vidas. Está conduciendo el mundo hacia una profundizante crisis económica, fascismo y guerra mundial.

El Materialismo Dialéctico es la filosofía comunista del cambio. Nos enseña que el capitalismo (como todo lo que existe) es una contradicción dialéctica. Es dos campos, los obreros y capitalistas, unidos, pero en lucha entre sí. Los capitalistas luchan por seguir oprimiendo y explotándonos. La lucha nuestra es para acabar con esta explotación. Tenemos que hacer esta la lucha la principal contradicción del mundo, agudizándola a favor de la clase obrera.

El Partido Comunista Obrero Internacional aspira a liderar esto organizándose para crecer masivamente a nivel internacional. Y movilizar a millones de obreros, soldados y jóvenes en una revolución armada por el comunismo. Solo esto puede detener los planes patronales de la Tercera Guerra Mundial.

Las Contradicciones el Campo Patronal Son Insolubles.

A instancias del presidente estadounidense Biden, estas cumbres adoptaron una postura dura contra China y Rusia.

Sin embargo, estaban divididos en cuanto a endosar una nueva Guerra Fría con China y Rusia. Los capitalistas europeos tienen intereses divergentes con los patrones estadounidenses y también entre ellos mismos.

Europa necesita el comercio y las inversiones de China. China es el principal socio comercial de la UE y Rusia monopoliza el mercado europeo en cuanto a suministros energéticos.

Los capitalistas europeos se dan cuenta de que el viento sopla del este. El mundo en desarrollo tiene casi dos tercios de la economía mundial en comparación con un tercio de Occidente. Hace cincuenta años, era exactamente lo opuesto.

Sin embargo, endosaron la iniciativa estadounidense “Build Back Better World” (B3W, Construir Otra vez un Mundo Mejor). Este proyecto de infraestructura global está diseñado para competir con la Iniciativa de la Franja y la Ruta de Seda de China (BRI). BRI es el proyecto de infraestructura masiva de puertos, carreteras y trenes para unir Asia con Europa y África.

Los capitalistas pueden unirse temporalmente, pero sus intereses divergentes los lleva al conflicto. Aunque unidos en la explotación de los trabajadores, se pelean por el botín de esta explotación. Si no participamos en una guerra revolucionaria contra ellos, son libres de hacerse la guerra

El Imperialismo de EE.UU. No Puede Detener el Ascenso de China

Justamente al anunciar el proyecto B3W, los socios de EE. UU., Australia, Japón y Europa se reunían en París para reactivar y expandir Blue Dot Network (BDN, Red Azul de Puntos). Este proyecto de infraestructura también apunta a descarrilar el BRI de China.

Biden dijo que las necesidades infraestructurales del “mundo subdesarrollado” superan 40 billones de dólares. Es posible que ambos proyectos nunca se materialicen porque dependen de inversores privados que pueden decidir no realizar grandes inversiones en países empobrecidos. Mientras tanto, China ha invertido más de $4 billones en BRI.

Contradicciones Entre los Gobernantes de EE.UU. y Sus Aliados

La semana pasada, el Senado de EE.UU. aprobó un proyecto de ley bipartidista que proporciona 250 mil millones de dólares durante cinco años para la investigación y desarrollo tecnológico para competir con China.

“Declaramos nuestra intención de ganar este siglo y los que le siguen también”, exclamó un senador republicano que copatrocinó este proyecto de ley. Él está delirando.

Los imperialistas chinos están invirtiendo $560 mil millones al año en la investigación y desarrollo tecnológico.

Otros gobernantes estadounidenses no se hacen ilusiones. Su objetivo es poner a la OTAN de su lado en una guerra contra China y Rusia.

A instancias de EE.UU. la OTAN por primera vez se refirió oficialmente al ascenso de China como un desafío “sistémico”. La OTAN todavía pone a Rusia en su punto de mira como su principal enemigo.

En la OTAN, como en el G7, no todos los miembros apoyan la postura de EE.UU. contra China o Rusia. Sin embargo, estos desarrollos están acercando más a Rusia y China.

Contradicciones Entre Obreros: Sus Resoluciones Conducen a Mayor Unidad para el Comunismo

El campo de la clase obrera es también una contradicción dialéctica de unidad y lucha. Los trabajadores en todas partes tienen los mismos intereses materiales: destruir el capitalismo y construir una sociedad comunista que satisfaga nuestras necesidades. Es decir, construir colectividad y derrotar al individualismo.

Nuestras diferencias son principalmente ideológicas: las ideas comunistas contra todas las ideologías venenosas que las sociedades de clases desarrollaron para mantenernos divididos y explotados.

Los comunistas somos parte de la clase obrera. No queremos ser explotadores ni amasar riquezas. Nuestra meta es destruir el dinero, abolir el sistema salarial y librar toda nuestra clase del racismo, el sexismo, la xenofobia y todas las ideologías y prácticas anti obreras.

Nuestra meta es un mundo sin clases, sin fronteras ni naciones. Donde producimos y compartimos todo colectivamente según las necesidades, tratándonos con respeto, dignidad y amor.

Eso requerirá una revolución comunista para la cual los soldados y marineros son indispensables. Los imperialistas están planeando su guerra y nosotros debemos planear la nuestra. Debemos organizar colectivos militares del Partido para garantizar el trabajo comunista en las fuerzas armadas patronales desde India hasta Sudáfrica, México y Estados Unidos. ¡Osemos luchar! ¡Osemos ganar un mundo comunista!

Primera página de esta edición

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