«Todos los Niños Importan»
Protestas Masivas Contra el Genocidio de Pueblos Indígenas. Luchemos por un Futuro Comunista Donde Todos los Niños Importan
1º de julio: Diez mil personas marcharon en Montreal, Canadá, en solidaridad con los pueblos Primeras Naciones, Métis e Inuit. Esto después del trágico descubrimiento de más de 1,505 cuerpos de niños indígenas de los 150,000 desaparecidos en internados genocidas entre 1870 y 1997. Decenas de miles más se manifestaron en otras ciudades canadienses.
Cuando los europeos invadieron América del Norte por primera vez a principios del siglo XVII, los pueblos indígenas vivían en sociedades basadas en el intercambio, la cooperación y la colectividad. Se trataba de comunidades asentadas con agricultura y caza. Eran igualitarios sin propiedad privada. Se respetaba a las mujeres y se criaba a los niños colectivamente. Se compartía la abundancia y nadie pasaba hambre. El colaborador de Marx, Frederick Engels, aprendió sobre el comunismo estudiando tales sociedades que precedieron a las sociedades clasistas. Los comunistas de hoy tenemos que aprender de ellas para que ayuden a alumbra nuestro camino hacia el comunismo científico.
Educación para el Genocidio Capitalista
El descubrimiento de cientos de tumbas sin nombres de niños en escuelas residenciales ilumina el papel de la escolarización en el genocidio imperialista de los pueblos indígenas.
Los primeros 250 años de la conquista inglesa, canadiense y estadounidense de los pueblos indígenas fueron una serie de guerras genocidas y tratados rotos. Para la década de 1870, la “política india” en ambos países se inclinaba hacia la asimilación. Las clases dominantes de Estados Unidos y Canadá separaron a la mayoría de los niños indígenas de sus familias y los mantuvieron cautivos en “escuelas residenciales”.
Estas escuelas, a menudo dirigidas por iglesias, fueron parte de una política más amplia de destruir la forma de vida colectiva de los nativos americanos/ los pueblos de las Primeras Naciones durante el crecimiento del capitalismo norteamericano.
El Ejército de los Estados Unidos y la Real Policía Montada de Canadá acorralaban a los niños y los enviaban a estas escuelas. Una vez allí, se les cortaba el pelo y se les quitaba su ropa tradicional. Fueron castigados por hablar su lengua materna y por ayudarse unos a otros. El plan de estudios estaba centrado en capacitarlos para ser obreros y sirvientes domésticos.
La “autosuficiencia”, en vez del colectivismo, era parte del plan de estudios. Los formuladores de estas políticas hablaron abiertamente acerca de adaptarlos a la civilización blanca, romper sus relaciones tribales, destruir el “socialismo” y enseñarles el egoísmo como el valor esencial de la “civilización”.
El trato de los niños y jóvenes de las Primeras Naciones / Nativos Americanos que estos asesinatos expusieron difícilmente podría llamarse educación. Nosotros lo llamamos escolarización capitalista.
La educación capitalista siempre existe para moldear a los niños y jóvenes en lo que los capitalistas necesitan que sean.
Estos internados tenían varios propósitos relacionados:
* Robar la tierra de los indígenas para la agricultura capitalista, asentamientos y ferrocarriles.
* Destruir las relaciones sociales colectivas y cooperativas de los nativos americanos / pueblos de las Primeras Naciones.
* Para inculcarle ideas racistas a los niños indígenas para que ellos se sientan y vean a sus familias inferiores a sus patrones blancos. Para que aceptaran la superexplotación racista como jornaleros agrícolas y sirvientes domésticos.
Más de cien mil niños murieron en estas escuelas. Los médicos canadienses estimaron que una cuarta parte de los escolares morían de tuberculosis. Estaban tan desnutridos que se convirtieron en sujetos de “experimentos científicos” para ver que con qué poca comida podían sobrevivir. Fueron objeto de abuso sexual, castigo corporal y el abuso psicológico de estar separados de sus familias y comunidades.
Siempre hubo resistencia. Los niños arriesgaban ser castigados por buscar consuelo entre sí y demostrar solidaridad. Miles de ellos huyeron de estas escuelas. Algunos murieron por exposición y desventuras en el camino. Otros pudieron encontrar el camino a casa.
La solución no es el nombramiento de mujeres indígenas para Gobernadora General en Canadá y Secretaria del Interior en los Estados Unidos mientras el capitalismo continúa su explotación genocida en estos países y en el extranjero.
Tampoco lo es transformar las restantes escuelas de las Primeras Naciones / Nativos Americanos en centros de nacionalismo étnico para mantener a los estudiantes enfocados en su cultura en lugar en vez de unirse con los trabajadores explotados de todas las “razas” y etnias.
Trabajadores indígenas y no indígenas, estudiantes y otros marcharon juntos en Montreal y en todo Canadá este verano. Trabajadores de todas las “razas” marcharon juntos alrededor del mundo el verano pasado a raíz del asesinato de George Floyd. Marcharon para exigir un nuevo futuro, uno donde Las Vidas Negras Importan y donde Chaque Enfant Compte (Cada Niño Importa).
Ese nuevo futuro requiere que aprendamos de las tradiciones colectivas de nuestros antepasados en todos los continentes. Esto nos ayudará a construir el mundo comunista que todos necesitamos, donde cada niño estará seguro y será valorado por toda la comunidad. Para lograrlo, tendremos que derrocar a nuestros opresores capitalistas con una revolución armada.
Para eso luchamos en el PCOI. Únete a nosotros.