Solo el Comunismo Puede Proveernos el Cuidado Médico que Necesitamos

Los Trabajadores de la Salud Luchan por Reformas: Luchemos por la Atención Médica Comunista

LONDRES, Reino Unido, 3 de julio— Los trabajadores de la salud salieron a las calles en el septuagésimo tercer aniversario del Servicio Nacional de Salud (SNS). Exigieron un aumento salarial del 15% para el personal del SNS, mejora en la seguridad de los pacientes y fin a la privatización de los servicios del SNS.

Hasta aquí llegan los activistas sindicales. No desafían las relaciones capitalistas de producción que siguen siendo el centro de la crisis del Covid y todos los problemas del cuidado de la salud pública. Tampoco lo hacen los pseudoizquierdistas (en realidad reformistas moderados) que gritaban consignas exigiendo que el gobierno Tory resignara.

Se requiere liderazgo político comunista, y el PCOI estuvo allí. Los pseudoizquierdistas ridiculizaron el lema de Bandera Roja “Movilizar a las Masas para el Comunismo”. Pero otros estaban ansiosos por leer Bandera Roja, incluido un estudiante belga que se dirigía a recibir una vacuna y varios otros jóvenes.

Los Patrones Crearon el Servicio Nacional de Salud Porque Temían una Revolución de la Clase Obrera

La clase trabajadora creó su propia provisión de salud “gratuita” a fines del siglo XIX y principios del XX. En Gales del Sur y en otros lugares, los trabajadores formaron “sociedades amistosas” para brindar atención médica. En Tredegar, Gales del Sur, los mineros y los obreros del acero formaron la Sociedad de Ayuda Médica de los Obreros. Con ella proporcionaban su propia atención médica gratuita donde el gobierno y las empresas mineras no lo hacían.

El Servicio Nacional de Salud fue fundado en 1948 por el Gobierno Laborista. Fue en parte un intento de asegurar que los esclavos asalariados tuvieran la salud suficiente para trabajar. también imitó algunos aspectos de estas sociedades amistosas. Los capitalistas pretendían impedir que la clase trabajadora formara sus propias organizaciones de bienestar, que por su naturaleza entrarían en conflicto con las relaciones capitalistas.

La idea de atención médica universal, gratuita en el lugar que se daba, se estaba volviendo aceptable para los miembros de la clase dominante británica. Temían la revolución, viendo la popularidad de la Unión Soviética y que muchos trabajadores que habían reclutados para la guerra ahora poseían y estaban entrenados en armas.

Las personas mayores recuerdan que cuando, durante la Segunda Guerra Mundial, Stalin o el Ejército Rojo aparecían en los noticiarios, el público del cine los aplaudía de pie. El gobierno británico incluso celebró el “Día del Ejército Rojo” durante los años de la guerra para ganarse el apoyo de las masas.

Los sectores dominantes de la clase dominante británica vieron los beneficios de tener una fuerza laboral y unas fuerzas armadas más saludables para la continuación del capitalismo. El Partido Laborista fue un buen vehículo para mantener las ilusiones de que el capitalismo podría ser beneficioso reformándolo lentamente. Pero la atención médica “gratuita” del SNS pronto comenzó a mostrar sus limitaciones.

Después de la guerra, el gobierno británico alentó a los trabajadores de los lugares que había colonizado a emigrar a Gran Bretaña para trabajar en el SNS, entre otras instituciones públicas. Muchos vinieron del Caribe, recibieron los empleos peor pagados y fueron sometidos a otras formas de discriminación racista. En enfermería, las mujeres negras fueron empujadas a la partería y otros trabajos peor pagados.

La clase dominante británica se unió a sus socios estadounidenses para atacar a Corea, mientras que el gobierno laborista inició en secreto el programa británico de armas atómicas. Esto costó cientos de millones de libras, una suma fenomenal, con el país en las garras de la austeridad de la posguerra y la escasez alimenticia. El gobierno laborista admitió que esto fue para financiar la matanza en Corea.

Como resultado, la atención médica gratuita para los ojos y los dientes fueron eliminados del SNS. Esto sigue siendo el caso hoy día.

A la clase dominante le gusta usar el SNS como símbolo de lo “británico”. Algunos reformistas siguen este nacionalismo, pidiendo salvar “nuestro SNS” de las “corporaciones extranjeras”. Uno de los carteles de la demostración decía “Fuera las manos corporativas codiciosas estadounidenses de nuestro SNS”, una respuesta nacionalista.

Pero no importa de qué país sea la corporación u organización. Todas son capitalistas basadas en el imperialismo internacional.

Mientras que los reformistas solo piden aumentar el presupuesto, el PCOI tiene una visión de una sociedad comunista basada en la propiedad común y las relaciones de cooperación sin mercancías ni trabajo asalariado.

¡En vez del “Servicio Nacional de Salud”, necesitamos la Revolución Comunista Internacional!

Solo el Comunismo Significa Buen Cuidado de Salud Para Todos

EE.UU. — Millones de personas mueren cada año de muertes evitables. No es solo la falta de acceso a la atención médica. Es porque la atención médica capitalista, como todo en el capitalismo, está construida para servir al objetivo final: las ganancias. La investigación médica, la distribución de medicamentos, nuestra comprensión de cómo funcionan nuestros cuerpos, el acceso a alimentos saludables y seguros y un refugio decente, y ciertamente nuestro trabajo asalariado, todos están para servir las ganancias de los capitalistas.

El racismo y el sexismo significan que las personas no-blancas y las mujeres sufren de manera desproporcionada los estragos de la atención médica capitalista. Eso incluye no solo acceso reducido, sino también horrores como la esterilización de mujeres indígenas, el experimento de sífilis del Servicio de Salud Pública de los EE. UU. en Tuskegee, tasas más altas de muerte de personas no-blancas debido a COVID-19, la escasez de médicos de cabecera en áreas donde más gente negra vive, etc.

Ninguna reforma al capitalismo resolverá estos problemas. Necesitamos el Comunismo.

Medicare para todos no es una solución.

La mayoría de los países tienen algún tipo de servicio nacional de salud que brinda atención médica financiada con fondos públicos con cargos mínimos para los pacientes. Medicare en EE. UU. es una forma de seguro médico nacional, pero solo para ciudadanos de 65 años o más o con discapacidades.

“Medicare para todos” se ha vuelto popular en EE.UU. Mucha gente cree que de alguna manera el capitalismo con un poco de “socialismo” puede proporcionar una atención médica decente para todos los estadounidenses. Pero esta reforma capitalista continuará con el racionamiento de la atención médica racista, sexista y anti obrera. No pondrá fin a la atención médica capitalista ni a las relaciones capitalistas de producción que ponen las ganancias por encima de la vida y el bienestar humano.

Un sector de la clase dominante de EE.UU. está presionando “Medicare para todos” porque quieren calmar las preocupaciones de las masas estadounidenses. Muchos están enojados porque los escandalosos costos de la atención médica están convirtiendo a algunas personas en multimillonarios mientras que una buena atención médica está cada vez más fuera de su alcance.

Un trabajador de la salud declaró: “¡Medicare no es gratis! El adulto mayor promedio paga $ 2000 al año excluyendo copagos y gastos no cubiertos. El gobierno siempre recomienda que las personas mayores ahorren aproximadamente $ 250,000 para gastos no cubiertos. Medicare a menudo no cubre medicamentos muy básicos, lo que hace que las personas mayores elijan entre alimentos, alquiler y medicamentos.

“Es bastante patético que esta sea su solución. Con Medicare uno está luchando contra el mismo sistema de atención médica con fines lucrativos, pero con un seguro administrado por el gobierno entrelazado con seguros privados”.

El Comunismo, No el Socialismo, Es la Solución

Algunos piensan que Medicare para todos es un paso hacia el socialismo. Creen que resolverá los problemas. Pero el socialismo mantiene los salarios y siempre llevará de nuevo al capitalismo.

Las revoluciones rusa y china produjeron avances dramáticos en la salud de las masas.

El Congreso Nacional de Salud de China en 1950 adoptó los principios políticos básicos de la política de salud china: la medicina debe servir a los obreros, campesinos y soldados. Enfatiza la prevención. Integrar la medicina tradicional china con la medicina occidental. Movilizar a las masas debe ser parte integral de la atención médica de China

Estos saltos dieron una idea de lo que pueden hacer las masas movilizadas por el comunismo. Un millón de “médicos descalzos” se formaron poco después de la revolución de 1949. Obreros de las zonas rurales de China, seleccionados por sus compañeros de trabajo, recibían seis meses de formación médica cada año. Pasaban los otros seis meses trabajando con sus cuadrillas. Luego después estaban enseñando a médicos certificados cómo tratar a obreros agrícolas, numéricamente cientos de millones.

Sin embargo, estos logros fueron limitados y luego revertidos porque estas revoluciones instituyeron el socialismo, no el comunismo. El socialismo promovió la responsabilidad colectiva, pero su base material – los salarios y la producción de mercancías – socavó la ética colectivista.

Durante la década de 1970, la principal fuente de ingresos de los médicos descalzos provenía de la economía colectiva de sus aldeas. Pero el programa se vino abajo en gran medida cuando el gobierno central proporcionó menos apoyo financiero y el sistema capitalista emergente del país comenzó a obligar a los agricultores a pagar por su atención médica.

El comunismo eliminará por completo el dinero y la explotación. Las relaciones sociales colectivas reemplazarán las relaciones del mercado. Lucharemos constantemente para acabar con el racismo y el sexismo en todos los aspectos de nuestras vidas. Podemos ganar estas luchas porque eliminaremos el sistema salarial, la base material del racismo y el sexismo.

Cuidado de la Salud en el Comunismo

Toda la ciencia, incluidas la biología y la medicina, se convertirá en propiedad de las masas, quienes las harán avanzar. Compartiremos la responsabilidad de la salud física y mental de todos:

  • En las instituciones de salud, todos ayudarán a diagnosticar, tratar enfermedades y ayudar con la limpieza. Todos aprenderán y enseñarán. El comunismo desatará el vasto potencial de la humanidad.
  • No habrá escases de trabajadores de la salud ya que muchísimas personas estarán capacitadas para prevenir, detectar y tratar enfermedades. Cada centro de producción incluirá tales gentes y el equipo necesario para hacer frente a las emergencias.
  • Las cosas importantes para una buena salud son la comida, la vivienda, el trabajo significativo y las relaciones sociales con otros; estas solo pueden garantizarse con el comunismo.

Por fin ha llegado el momento de acabar con los estragos del capitalismo. Por la salud y la vida de la clase trabajadora, necesitamos movilizar a las masas para el comunismo.

Primera página de esta edición

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