Destruyamos las Mentiras Liberales Anticomunistas: La Crisis de la Vivienda Muestra la Urgencia de la Revolución Comunista
LOS ÁNGELES (EE. UU.), 12 de agosto—Personas sin hogar y otros activistas interrumpieron las reuniones del Concejo Municipal de Los Ángeles para protestar contra leyes cada vez más represivas contra las personas sin hogar. Cuando un miembro del consejo intentó encabezar el juramento patriótico de lealtad, los miembros de la audiencia lo abuchearon.
La presidenta del consejo, Nury Martínez, comparó indignadamente a los manifestantes con los fascistas que invadieron el Capitolio de EE. UU. en Washington, DC el 6 de enero de 2021.
“Como si ‘hacer desaparecer’ a los más pobres fuera la solución”, declaró un camarada. “Compararlos con esa privilegiada chusma ARMADA es ridículo. ¡Es un intento descarado de demonizar a la población más perjudicada!”
A nivel mundial, unos 150 millones de los miembros de nuestra familia clase obrera no tienen hogar. Como 1,600 millones carecen de vivienda adecuada.
Esta crisis es 100% fabricada por la búsqueda incesante del capitalismo de máximas ganancias, sin importar el costo para las masas. El comunismo lo resolverá.
El capitalismo reduce los salarios y aumenta los costos de la vivienda, lo que obliga a más y más trabajadores – ¡muchos con empleo! – a vivir en las calles, desde Egipto hasta Honduras y más allá.
Las guerras por terceros de los capitalistas-imperialistas, desde Siria hasta Somalia y la República Centroafricana, desplazan de sus hogares a un número creciente de personas.
Ningún trabajador en ningún lugar está a salvo.
Millones en Los Ángeles, si dejan de recibir un cheque de paga, se quedan sin vivienda. Más de cincuenta mil niños y jóvenes del condado de Los Ángeles no tienen un hogar estable. La respuesta del Ayuntamiento de Los Ángeles a esta crisis masiva de vivienda es prohibir los campamentos para personas sin hogar cerca de escuelas y guarderías.
Ya es ilegal estar desamparado cerca de bibliotecas, debajo de los puentes de las autopistas elevadas y otros lugares. Los Ángeles, dirigido por los demócratas, se está aproximando a la infame “guerra contra la vagancia” del expresidente filipino fascista Duterte.
Esta crisis de la vivienda es un ataque racista contra toda la clase obrera.
Los negros son el 8% de la población de Los Ángeles y el 34% de las personas sin hogar. Pero el 25% de todas las personas sin hogar son trabajadores y jóvenes blancos.
La causa obvia del rápido aumento de la falta de vivienda es un déficit estimado de medio millón de viviendas para gente de bajos recursos en el condado de Los Ángeles. Menos obvio es que los inversionistas mantienen a propósito decenas de miles de casas fuera del mercado, más que suficientes para albergar a todos los sin hogares.
Los capitalistas financieros poseen dos tercios de todas las unidades residenciales de Los Ángeles. “Miles de unidades de lujo están vacías, como segundas residencias o puras inversiones. … Más de 22 millas cuadradas de lotes baldíos son propiedad de entidades corporativas que los mantienen vacantes”. (El Reporte sobre Vacantes)
Esto ilustra la ley del capitalismo que Marx describió por la cual la creciente concentración de la riqueza en unas pocas manos desvía la producción de las necesidades obreras hacia mercancías de lujo. Los capitalistas como los que están detrás del Concejo Municipal de Los Ángeles aprueban leyes que protegen la riqueza que han robado del trabajo de sus esclavos asalariados: nosotros.
Los grupos que produjeron El Reporte Sobre Vacantes solo ofrecen reformas (como un impuesto a las vacantes). Lo que necesitan los trabajadores es la revolución comunista.
El intento de golpe fascista del 6 de enero ha dado mala fama a la insurrección.
“¡Imperio de la ley! ¡Proceso electoral! ¡Protesta pacífica! ¡Protejamos la Democracia!” Así gritan los medios de comunicación liberales e incluso algunos que se autodenominan izquierdistas.
Es la vieja mentira que vincula falsamente al comunismo y al fascismo, aunque, históricamente, los comunistas han sido los más feroces luchadores antifascistas. Es una mentira que trata de ocultar la lucha de clases del mundo real (trabajadores contra capitalistas) detrás de una oposición abstracta y mecánica de “extremismo” y “moderación”.
¿De qué lado de la lucha de clases estás? Los insurrectos del 6 de enero invadieron el Capitolio en apoyo de la facción capitalista de Trump. En contraste, aquellos que interrumpieron la reunión del Concejo Municipal de Los Ángeles luchan del lado de la clase obrera. Pero sin una perspectiva y organización comunistas, no pueden ganar.
La revolución comunista destruirá todos los registros de “dueños” de propiedad y el poder estatal capitalista que los impone.
Los trabajadores con casas podrán quedarse en ellas sin pagar un centavo más a los propietarios o bancos.
Los antiguos propietarios de pequeñas propiedades no sufrirán la pérdida de ingresos de sus alquileres porque nadie necesitará dinero para nada. Produciremos y distribuiremos todo en base a la necesidad, no del intercambio.
Los comités vecinales organizados por el Partido harán un inventario de las viviendas no utilizadas o subutilizadas y las asignarán en base a donde haya necesidad. Organizaremos masas para proporcionar la mano de obra para reparar y construir viviendas. Diseñaremos nuevas viviendas para fomentar la comunidad en lugar del individualismo.
Nada de esto puede suceder de manera pacífica o legal bajo el estado de derecho (de propiedad) del capitalismo. Pero las revoluciones pasadas dirigidas por comunistas, a pesar de sus trágicos errores, muestran cómo podemos hacerlo.
No pidamos a los 1,600 millones de miembros de nuestra familia internacional de la clase trabajadora que tienen una vivienda inadecuada que esperen a que el capitalismo satisfaga sus necesidades más básicas. No lo hará.
Pidámosles a ellos, y a todos nuestros amigos, compañeros de trabajo, vecinos y familiares, que se unan al PCOI en movilizar a las masas para el comunismo.
Lee nuestro Panfleto:
Movilizar A Las Masas Para El Comunismo aquí