Seattle (EE.UU.) Educadores Muy Abiertos al Comunismo

Docentes en Seattle aquí ♦ Educación Comunista para una Sociedad Sin Clases aquí ♦ Carta de un Profesor Camarada en Los Angeles aquí ♦

Los Docentes Huelguistas en Seattle Dieron Respuesta Positiva Sin Precedentes al Comunismo

Expandamos los Colectivos del PCOI para Organizar la Revolución Comunista

SEATTLE (EEUU), 13 de septiembre- Seis mil docentes de las escuelas públicas de Seattle se fueron a la huelga el 7 de septiembre. Exigen principalmente la contratación de más paraprofesionales, auxiliares y enfermeras multilingües y terapeutas de salud mental. Ahora votarán por un contrato tentativo.

Los camaradas hablaron de las ideas comunistas en los piquetes, con huelguistas bailando en una intersección importante, en la calle donde el tráfico lo permitía y en sus coches cuando los transportaban a los mítines.

¿Qué es para ti el comunismo?”, le preguntó un profesor a un miembro del PCOI durante un breve trayecto a un mitin.

Discutieron el lema comunista: de cada uno según su compromiso y capacidad, a cada uno según su necesidad. El camarada explicó cómo la producción colectiva, base del comunismo, sustituirá a la esclavitud asalariada, base material del capitalismo. Discutieron cómo la producción colectiva nos permitirá construir exitosas campañas masivas para acabar con los horrores del capitalismo, particularmente el racismo, el sexismo y la xenofobia.

El camarada le preguntó al profesor si esto tenía algún sentido para él. “Sí, está bien”, respondió, tomando un ejemplar del folleto “Educación Comunista” del PCOI. Lo más importante es que esta discusión continuará.

Muchos huelguistas (paraprofesionales, enfermeras, auxiliares multilingües, maestros) tomaron con entusiasmo Bandera Roja, panfletos y volantes sobre la huelga escolar de Los Ángeles de 2019. Algunos eran recién contratados; otros llevaban muchos años trabajando en el distrito. Algunos tienen relaciones de larga duración con camaradas que trabajan o trabajaron para el distrito escolar.

Bailando en las Aceras

El viernes, educadores de todas las escuelas primarias y secundarias del área South End marcharon a la Escuela Secundaria Franklin, donde los camaradas distribuyen entre 70 y 90 ejemplares de edición cada número y donde una camarada es voluntaria.

El capitán del piquete nos preguntó qué hacíamos. “Vinimos a hablar con los huelguistas sobre cómo podría ser la educación en el comunismo y a distribuir nuestra literatura comunista”, dijo un camarada.

“Me parece bien”, respondió el capitán. “La gente está haciendo una pausa para comer, así que vete a distribuir tu periódico comunista y a hablar de comunismo. Yo mismo soy un rojo de hueso colorado”.

Después de la comida, una camarada jubilada de la escuela llegó con sus amigos de una escuela primaria cercana. Llevaba nuestro popular cartel del PCOI (ver foto). Pronto una huelguista pidió entusiasmada que le tomaran una foto. “Este es el mejor cartel de aquí. Mi hijo es comunista”, proclamó con orgullo.

La manifestación de Franklin, una de las más grandes del distrito, demostró que hay más jóvenes BIPOC trabajando en las escuelas. Distribuimos toda la literatura que teníamos a cientos de huelguistas que bailaban en la acera al ritmo de un DJ.

Un trabajador de Eritrea dijo que no necesitamos a los demócratas ni a los republicanos, sino un partido de trabajadores. En una prolongada discusión, un camarada explicó más sobre el PCOI. “Los comunistas fueron terribles en mi país”, dijo el trabajador, refiriéndose al Derg, apoyado por los soviéticos, que estuvo en el poder de 1974 a 1991. Luego hablaron del comunismo real, sin dinero ni esclavitud asalariada, y accedió a leer Bandera Roja.

Respuesta Sin Precedentes

Los huelguistas reaccionaron a las ideas comunistas de forma muy diferente a la huelga de 2015. Incluso antes de la pandemia, la administración del distrito escolar había estado falto de personal en las escuelas. Pero todas las escuelas, no importa cuán bien dotadas de personal y cuán bien compensados estén los educadores, siguen siendo instituciones capitalistas, que replican el racismo, el sexismo y toda la sociedad de clases. Nuestra tarea es explicar por qué sólo la educación comunista puede beneficiar a nuestra clase, y cómo sería.

Mientras tanto, la clase dominante y los socialistas impulsan la política sindical como la respuesta. Las grandes bases no han rechazado todo el reformismo, pero muchos estaban interesados en discutir el comunismo y tomar nuestra literatura.

Otra diferencia fue la angustia y la rabia entre las bases por el racismo. Los millones de personas que salieron a la calle en el verano de 2020 para protestar contra el racismo y los asesinatos policiales tuvieron profundos efectos en los trabajadores escolares.

Vimos a muchos amigos de mucho tiempo, que no parecían estar avanzando políticamente, dar un paso adelante. Nuestra camarada escolar jubilada había mantenido conexiones – con otros que ahora son huelguistas – en fiestas de cumpleaños, clases de ejercicio y más. Estos amigos ayudaron al Partido a avanzar la lucha por el comunismo entre otros huelguistas, presentando a sus amigos a los camaradas, tratándonos como familia, y a veces recomendando nuestra literatura a otros.

Luchando Por Mayores Colectivos del PCOI

Los debates en los piquetes fueron gratificantes. Pero debido a las limitaciones de tiempo y logísticas, muchas preguntas quedaron sin respuesta sobre cómo funciona el comunismo y si un número suficiente de personas lo apoyará para hacer posible la revolución comunista.

Planeamos responder a estas preguntas y reclutar más miembros al PCOI ampliando nuestras reuniones colectivas del Partido invitando a huelguistas y otros activistas a ellas. Allí podemos profundizar en cómo es la educación comunista y avanzar en nuestra línea. Podemos seguir discutiendo qué es la solidaridad comunista y cómo los comunistas rechazan el reformismo sindical.

Recientemente, un nuevo amigo nos dio la razón sobre el reformismo sindical. Dijo que las negociaciones sindicales sólo preguntan a los trabajadores “cuál de sus dedos están dispuestos a cortar”. Sus dudas sobre el comunismo incluyen cómo podemos contrarrestar las historias de terror anticomunistas de la clase dominante. Mencionó la amenaza de la hambruna después de la revolución. Se llevó un ejemplar del folleto de educación comunista para dárselo a su mujer, que es profesora.

Tenemos previsto seguir distribuyendo Bandera Roja y volantes sobre la educación comunista en los tres institutos del South End y en varias escuelas primarias y secundarias. Estas conversaciones continuas pueden aprovechar la respuesta de los huelguistas a nuestro comunismo, ampliar los colectivos del Partido y afinar nuestra línea.

Educación Comunista para una Sociedad sin Clases

Este es el artículo principal de nuestro folleto «Educación Comunista Para una Sociedad sin Clases». El folleto está disponible en nuestro sitio web: Aquí

Lo que aprendemos y como lo aprendemos está estrechamente relacionado en como la sociedad organiza la producción. Esto fue cierto en las sociedades precapitalistas y en la sociedad capitalista. Será también cierto en la sociedad comunista.

La educación es más que escolaridad. Incluye todas las formas de cómo somos socializados. Todas las instituciones sociales: la familia, la ejecución del poder, la cultura popular, y otras más—ayudan a conformar a los niños y jóvenes.

Las escuelas capitalistas son instituciones de la dictadura clasista. Estas sirven los intereses de la clase dominante, igual que la policía y las cortes. Las escuelas capitalistas preparan a los hijos de los ricos para ser patrones y a la mayoría de los hijos de los obreros para ser obreros o soldados. Enseñan la ideología, el comportamiento social, y las habilidades necesarias para desempeñar esos papeles y para hacer aceptables la explotación y las guerras imperialistas.

Algunos dicen que las escuelas públicas son “nuestras escuelas”, las cuales los trabajadores ganaron luchando, y que son nuestra esperanza de un mundo mejor. Esto es un engaño, es lo mismo que creer que el gobierno es imparcial y la justicia es ciega. El gobierno es un instrumento del dominio de clases.  En la sociedad capitalista, todas las escuelas sirven los intereses de la clase capitalista.

El comunismo acabará con el dinero, las clases y la propiedad privada de los medios de producción. Todos contribuiremos como mejor podamos, y las necesidades de todos serán satisfechas de tal manera que nadie viva mejor o peor que nadie. El comportamiento individualista y competitivo que promueve la educación capitalista será reemplazado por el comportamiento colectivo y cooperativo necesario para construir una sociedad comunista.

El comunismo es la única respuesta a los horrores que el capitalismo impone a las masas obreras y al planeta, sobre todo ahora que la crisis económica mundial lleva rápidamente a una creciente destrucción del medio ambiente y hacia la guerra mundial. El movimiento internacional de la “reforma educativa” es parte de este desarrollo.

Tan pronto como la clase obrera tome el poder en cualquier lugar, tenemos que movilizar a las masas para construir el comunismo. Inmediatamente aboliremos el dinero, la producción de mercancías (producción para la venta) y el sistema salarial (que obliga a los trabajadores a vender su fuerza de trabajo o morirse de hambre).

Los trabajadores serán motivados no por la perspectiva de lucro individual, sino por la posibilidad de vivir en una sociedad comunista, en la cual las relaciones sociales de cooperación, colectivismo, y de compartir serán primarias. Estas relaciones proporcionarán la experiencia material que puede servir de ejemplo en cómo tomar todas las demás decisiones.

La educación comunista es lo contrario de la escolaridad capitalista, no es una versión “nueva y mejorada” de ella.

El capitalismo dice creer en el pensamiento crítico y el aprendizaje de por vida. Pero en realidad, las escuelas capitalistas desaniman activamente cualquier cosa que vaya más allá de lo que se requiere de grupos particulares de esclavos asalariados o gerentes.

En contraste, movilizar a las masas para el comunismo exige que todo mundo posible, no solamente un grupito, debe aprender a analizar, criticar, y ayudar a decidir todo. El propósito de la educación comunista es la creación de comunistas y relaciones sociales comunistas.

“No creeríamos en la enseñanza, el entrenamiento, y la educación si estas estuvieran limitadas a la escuela y divorciadas de la tormenta de la vida”, escribió Lenin. “[La educación] debe entrenar [a la juventud] para que sean participantes en la lucha por emanciparnos de los explotadores”.

Hoy, bajo el capitalismo, la educación comunista nos prepara para luchar por el poder comunista obrero y una sociedad sin clases. Para lograr el poder comunista, millones de obreros tiene que estar dedicados a esa meta y armados con el entendimiento de la economía política, la filosofía del materialismo dialéctico y mucho más.

Nuestro Partido educa por medio de Bandera Roja, círculos de estudio-acción, conferencias, proyectos de verano, y a través de nuestra práctica. Todo nuestro trabajo – organizando manifestaciones o carnes asadas, produciendo y distribuyendo nuestra literatura, planteando ideas comunistas en cualquier lugar donde nos encontremos – nos entrena para ponerle fin a la distinción entre el trabajo mental y manual, para luchar agudamente y trabajar colectivamente.

Después que nuestra clase conquiste el poder político, la educación comunista ampliará enormemente su alcance. Significará cosas diferentes en tiempos diferentes, dependiendo de las necesidades particulares de la clase obrera internacional. Sin embargo, los principios básicos son claros:

La educación comunista debe anteponer la creación de las relaciones sociales comunistas a la adquisición de conocimientos técnicos o pericia intelectual. Nos debe preparar para luchar por, y construir, una sociedad sin clases, sin dinero, racismo, sexismo, fronteras, o explotación.

La educación comunista no replicará la desigualdad, explotación, racismo, competencia, o privilegios. En vez de estos, expandirá las relaciones de respeto y cooperación, creando más y mejores comunistas.

La educación comunista debe ayudar a fusionar el trabajo “mental” y “manual”. El agrónomo y el campesino, el ingeniero y el obrero de construcción, el biólogo molecular y la enfermera serán la misma persona. Eso requiere que todos, no solo un grupito, tengamos un profundo conocimiento de las ciencias.

Derribando la división entre trabajo manual y mental, y entre los “expertos” y las masas, ayudará a eliminar la base material de la idea capitalista de que algunas personas son más importantes que otras y merecen tener más poder de decisión o una vida más fácil.

La educación comunista significa combinar de por vida el trabajo y el estudio, la teoría y la práctica. La movilización masiva para la producción comunista requiere derribar la barrera entre la educación y el trabajo. El comunismo acabará con la marginalización de los niños, jóvenes, y los ancianos. Todos aprenderemos y trabajaremos toda la vida.

En vez de depender en profesores expertos de tiempo complete, todo el mundo compartirá su experiencia y conocimientos. La división entre el profesor/experto y el estudiante/aprendiz será eliminada. Los estudiantes aprenderán en los lugares donde la gente trabaja, no en aulas aisladas.

Hemos tomado solo los primeros pasos en aprender/enseñar acerca de cómo será la educación y el trabajo en la sociedad comunista. Nuevas ideas surgirán al poner en la práctica nuestra línea de MOVILIZAR A LAS MASAS PARA EL COMUNISMO. Les invitamos – les urgimos – a unírsenos en esta tarea histórica.

Un Profesor Escribe:  El Núcleo de Nuestras Dificultades Es el Capitalismo

Como profesor y padre de dos hijos en edad escolar en Los Ángeles (EE.UU.) brindo mi apoyo a todos los docentes de Seattle que están actualmente en huelga. No me sorprende que haya tanta agitación entre los profesores de todo EE.UU. porque los profesores, al igual que millones de trabajadores de todo el mundo, están atravesando un momento importante de la historia.

Estamos saliendo de una pandemia devastadora, experimentando una gran escasez de profesores e intentando sobrevivir a un aumento en el costo de la vida en grandes ciudades como Seattle y Los Ángeles. En Los Ángeles, en medio de una disputa salarial, el Sindicato Profesores Unidos (UTLA, por sus siglas sen ingles) está convocando a los profesores a un boicot para el 19 de octubre de 2022. Ese es el primero de los cuatro días opcionales que el Distrito Escolar Unificado de Los Ángeles añadió al calendario sin ninguna aportación de padres o docentes, según UTLA.

Esta es, y siempre ha sido, la naturaleza del capitalismo. Cuando las cosas se ponen feas, salimos a la calle para hacer oír nuestra voz mientras los sindicatos intentan ponerse de acuerdo con nuestros patrones y sentarse en la misma mesa mediante la negociación colectiva. Sin embargo, creo que debemos ir más allá de pedir un asiento junto a nuestros patrones. Debemos organizarnos para la revolución comunista porque debemos darnos cuenta de que mientras exista el capitalismo, también existirán conflictos laborales de todo tipo.

La verdad es que bajo el capitalismo siempre confrontaremos a los patrones para que nos compensen justamente por nuestro trabajo y respeten nuestros puestos. Podemos pedir mejores salarios ahora, pero el valor de nuestro trabajo nunca será igualado. El hecho de que tengamos que luchar, y de que siempre hayamos tenido que luchar, por mejores condiciones de vida, es un testimonio de la causa del problema: el capitalismo.

Así que es hora de llegar al núcleo de nuestras dificultades. Ya sea el racismo sistémico, la injusta brutalidad policial, los salarios injustos o la guerra imperialista, el capitalismo es la causa de todos estos problemas. Por lo tanto, es el capitalismo el que debemos destruir y sustituir con el comunismo.

Los patrones nunca nos darán simplemente el poder. Nunca nos tratarán como sus iguales en una mesa de negociación. Siempre nos faltarán al respeto. Así que ¡basta ya de patronos! ¡Basta de exigir reformas que sólo perpetúan su sistema capitalista!

–Profesor Rojo

Primera página de esta edición