30 de diciembre – Cien mil enfermerxs, miembrxs del sindicato de enfermería más grande del Reino Unido, están en huelga intermitente en Inglaterra, Gales, Escocia e Irlanda del Norte. Esta huelga contra el Servicio Nacional de Salud (SNS) es la más grande en los 106 años de historia del sindicato.
Para atender a los pacientes, estos trabajadores se ven obligados a no tomar descansos y trabajar horas extras gratuitamente. Muchos tienen que cambiar sus vacaciones anuales por dinero para llegar a fin de mes. Algunos incluso duermen en sus automóviles, incapaces de pagar el combustible de ida y vuelta al trabajo.
Una veterana enfermera de 15 años declaró: “Lo que nos queda es un grupo de trabajadores que llevan toda la carga de mantener seguros a los pacientes, mientras que el gobierno se lava las manos de cualquier responsabilidad o rendición de cuentas por las condiciones del servicio dentro del cual trabajan”.
Las enfermeras, junto con los conductores de ambulancias, los trabajadores ferroviarios y los carteros, forman parte de la mayor serie de acciones laborales en el Reino Unido en más de una década.
Apoyamos a los trabajadores que luchan contra las terribles condiciones laborales, los bajos salarios y otros aspectos horribles de la esclavitud asalariada. Pero una huelga por mejores condiciones bajo el capitalismo nunca puede obtener un cambio real. Muchos huelguistas llegarán a ver que un sistema que prospera solo cuando obtiene ganancias de nuestra esclavitud asalariada nunca puede satisfacer nuestras necesidades. Necesitamos el comunismo.
El SNS, como cualquier empleador capitalista, no funciona en interés de la clase obrera. Las condiciones de trabajo de los empleados dejan claro que incluso un sistema de salud “gratuito” debe responder al final de cuentas del capitalismo: el dinero. La investigación médica, el acceso a medicamentos y alimentos saludables, agua limpia y vivienda decente, y sobre todo nuestro trabajo asalariado, todos sirven a las ganancias de los capitalistas.
Los líderes sindicales mienten diciendo que podemos ganar bajo el capitalismo. No desafían las relaciones capitalistas de producción que están en el centro de todos los problemas de salud pública. Sólo el comunismo puede proporcionar lo que los humanos necesitan. Solo el comunismo puede destruir el racismo y el sexismo que hacen que la atención médica bajo el capitalismo sea tan mortal, especialmente para las mujeres y las personas de color.
Una trabajadora estadounidense de la salud, al enterarse de las huelgas, dijo: “La atención médica siempre estará limitada bajo el capitalismo. ¡Los hospitales son administrados por administradores de negocios y al fin de cuentas lo que cuentan son las ganancias!”
Con el comunismo, compartiremos la responsabilidad de cuidarnos mutuamente, así como las recompensas emocionales, mentales y físicas de una clase obrera unida. Este compartir tanto de las responsabilidades como las recompensas eliminará gran parte del estrés que produce muchas enfermedades.
También seremos más saludables porque tendremos acceso a aire y agua limpios, vivienda segura y alimentos no contaminados. Trabajaremos para entender la atención médica de una perspectiva completamente nueva: una que enfatice la salud de todos los miembros de nuestra familia de clase obrera. Mantenernos saludables será la meta.
Los Comunistas Chinos Comenzaron a Mostrar lo Que Es Posible
Fuera con Todas las Plagas (Away with All Pests) por el cirujano inglés Dr. Joshua Horn, describe su tiempo trabajando en hospitales chinos de 1954-69. Es revelador, dando una ventana para ver lo que es posible cuando la atención médica se centra en el bienestar de nuestra clase, en lugar de hacer dinero.
Horn discute las luchas para eliminar la jerarquía médica. Todos, desde médicos hasta enfermeras y conserjes, participaron en discutir y proveerle atención medica al paciente.
Después de la revolución china, un millón de trabajadores rurales fueron entrenados como “médicos descalzos”. Su educación incluyó medio año de trabajo en el aula. Luego trabajaron en los campos junto a sus compañeros de trabajo, llevando su conocimiento directamente a las masas.
Pero el Partido Comunista Chino nunca fue más allá del socialismo, conservando los mercados y la esclavitud asalariada. Con una visión comunista real y el conocimiento y el trabajo de nuestro Partido de masas, podremos responder rápidamente a la atención médica y otras necesidades de nuestra clase. Esto podría incluir la capacitación rápida y eficiente del personal médico cuando hay una crisis, como la pandemia actual. Las masas de trabajadores decidirían qué se necesita, cuándo y cómo.
Si los lectores tienen ideas de cómo podría ser la atención médica en el comunismo, compártanlas en una carta o un artículo para Bandera Roja. Comenzamos ahora a imaginar y planificar un mundo comunista.
Instamos a los huelguistas del Reino Unido a ver que lo mejor que pueden esperar no son las migajas que podrían arrebatarle a los capitalistas. ¡Los invitamos a unirse al PCOI para luchar por un mundo sin patrones, dinero y fines lucrativos! Tenemos un mundo saludable y comunista que ganar.
Primera página de esta edición
