PCOI Alza Bandera Roja en la Lucha Masiva contra el Cierre Racista de Escuelas
Oakland, California, es una de las principales ciudades del Área de la Bahía de San Francisco. El Área de la Bahía alberga la tercera mayor concentración de multimillonarios del mundo. Oakland es el hogar de una población de tiendas de campaña en explosión y un distrito escolar que aparentemente siempre está en bancarrota o cerca de la bancarrota.
Riqueza enorme versus bancarrota crónica; cuanto mayor es la brecha entre ricos y pobres, mayor es el desprecio que los multimillonarios tienen por nosotros. Y, a cambio, mayor es la furia que albergamos hacia ellos. Así es como se desarrollan las luchas de clases.
Es esta dinámica la que se ha desarrollado en Oakland, desde los primeros días de febrero. Fue entonces cuando la Junta Escolar de Oakland anunció planes para cerrar (lo que significa “contratar” o vender a promotores inmobiliarios) once escuelas más. Eran escuelas en áreas de clase trabajadora con estudiantes predominantemente negros.
Planeaban cerrarlas en mayo, tan pronto como terminara el año escolar. Sin debate, sin aportes de los padres, maestros o la comunidad. Simplemente las cerrarían. Fue una muestra de desprecio racista. Las cerrarían porque, en el argumento final, eso era lo “fiscalmente responsable” por hacer.
“¡Fiscalmente responsable!” Esa es una frase que se supone que debe silenciar el debate. Desafortunadamente, no es solo una frase. Tiene fuerzas sociales reales organizadas detrás de ella. En el caso de la educación, esa organización es “FCMAT” (pronunciado Fic-mat). Es una junta, designada por el estado, que dictamina si un distrito educativo está en bancarrota o está solvente.
Este FCMAT designado tiene el poder porque controla el presupuesto. FCMAT es la cara educativa de lo que Karl Marx llamó “la dictadura del Capital”. La Junta Escolar elegida democráticamente es solo para taparle el ojo al macho.
¡Lucha obrera contra la dictadura del Capital! Esa es la mejor manera de resumir este poderoso movimiento masivo de maestros, comunidad de padres (y ahora trabajadores portuarios del sindicato ILWU) que desatado por la Junta Escolar de Oakland cuando, en febrero, anunció su prisa por cerrar las escuelas.
Reuniones abarrotadas de la junta escolar que se extienden hasta las primeras horas de la madrugada, huelgas de hambre, piquetes, barbacoas de padres y maestros para recaudar fondos, clases, marchas, mítines, comités de divulgación, colectivos para hacer carteles, críticas de libros de texto… si FCMAT es la cara del Capital, entonces este movimiento es el puño en alto de la lucha obrera.
El PCOI ha estado en esta lucha dentro de las escuelas, en las reuniones y en las calles, con Bandera Roja y nuestra visión de un futuro comunista (no socialista) de compartir igualitariamente. Como las masas están aprendiendo hoy de la lucha, imaginamos una educación en el futuro que no servirá a los intereses del Capital sino que surgirá de las necesidades y la práctica de las masas.
La imaginación es vital, no construimos nada sin primero imaginarlo, pero la mayoría de las personas en el movimiento aún no están allí. Todavía no hay muchas personas luchando contra el poder estatal capitalista y por el poder de los trabajadores. A pesar de toda su energía positiva, sigue siendo reactivo y defensivo. Todavía sólo lucha por restablecer la escolarización Pública (Estatal, presupuestada por FCMAT).
La alianza de maestros con trabajadores portuarios (ILWU) se limita a tratar de detener la construcción de un estadio de béisbol en una zona portuaria que eliminaría los empleos portuarios. No está llamando por un mundo que albergaría a los desamparados que habitan las ciudades de tiendas de campaña. El movimiento ha avanzado mucho desde febrero, pero aún le queda más por recorrer.
Las luchas sostenidas multirraciales contra el capital, como esta, pueden fortalecer nuestra confianza en las capacidades de la clase obrera de hoy. Bandera Roja y nuestro folleto de Educación Comunista han sido bien recibidos en todas las manifestaciones a las que hemos asistido. Las ideas revolucionarias plantadas hoy madurarán en las luchas futuras.
Lee nuestro folleto: «Educación Comunista para una sociedad sin clases» Aquí