SEATTLE (EE. UU.), 14 de mayo— “¿Periódico comunista? Dame uno. Aquí hay una donación”. Cientos de personas nos dijeron esto mientras distribuíamos Bandera Roja en una manifestación de miles de personas por el derecho al aborto.
La Corte Suprema de los Estados Unidos amenaza con revocar su decisión en 1973 del caso Roe versus Wade que declaró el derecho constitucional de una mujer a terminar su embarazo. Manifestaciones y marchas en todo Estados Unidos están protestando este cambio.
Los camaradas del PCOI en Seattle y Los Ángeles asistieron con Bandera Roja y nuestro folleto “La Lucha Comunista Contra el Sexismo”. Muchos manifestantes dieron la bienvenida a nuestro mensaje de que solo la revolución comunista puede acabar con la misoginia (odio a las mujeres) capitalista, así como con el racismo, la xenofobia y todo lo que el capitalismo usa para dividir a los trabajadores.
El capitalismo pone la responsabilidad de la crianza de los hijos en las mujeres individuales y sus familias inmediatas. Las personas embarazadas en todo el mundo se enfrentan a decisiones difíciles. Quienes no tienen acceso a los recursos para criar a sus hijos, o a métodos anticonceptivos asequibles y seguros y al aborto legal, a menudo solo tienen la alternativa desesperada de un aborto ilegal e inseguro. El ataque al aborto es un ataque a la salud de las mujeres de procedencia obrera y otras mujeres pobres en todo el mundo.
Pero en una sociedad comunista, la economía no tendrá ningún papel en la decisión de abortar. Debido a que no habrá dinero, nadie tendrá que preocuparse por el costo de criar a un niño. Compartiremos colectivamente la responsabilidad de alimentar, vestir, educar y amar a nuestros hijos. Todos tendrán acceso a la mejor atención médica, incluida la salud reproductiva.
El mayor error que cometieron los compañeros de Seattle en el mitin fue no hacer ningún contacto, a pesar de que distribuimos cientos de Bandera Roja y casi 100 folletos. Habíamos subestimado tanto el tamaño como el entusiasmo de la multitud. Nos tomó demasiado tiempo concentrarnos en nuestra tarea principal como organizadores comunistas: conocer gente, intercambiar información y, por lo tanto, crear una oportunidad para conocerlos, luchar con ellos y convencerlos de ingresar al PCOI.
Al principio, tratamos de distribuir Bandera Roja hablando solo del análisis comunista del sexismo en la edición que estábamos distribuyendo. Pero muchos manifestantes no querían limitarse a eso. Estaban muy abiertos a discutir las muchas formas en que el capitalismo oprime a toda la clase trabajadora. Y lo más importante, cómo el comunismo puede acabar con estos horrores. Dieron la bienvenida a nuestro internacionalismo comunista.
Dos mujeres jóvenes levantaron el puño para que les tomaran una foto para Bandera Roja. Les complació recibir un periódico comunista y leer sobre lo que el Partido estaba haciendo en todo el mundo. Luego posaron para otra foto con el panfleto contra el sexismo.
“No sabía que esto estaba pasando en El Salvador”, dijeron muchos sobre el artículo de primera plana. Allí querían leer sobre la lucha comunista contra el fascismo. Un amigo dijo: “Veo que el Partido Republicano está ansioso por copiar las leyes de El Salvador sobre el envío de mujeres a prisión por abortos espontáneos”.
Algunos jóvenes estaban allí con padres o abuelos que contaban historias sobre luchas en torno al derecho al aborto y otros temas de sexismo en las décadas de 1960 y 1970. Una mujer dijo que su abuela le habló sobre las marchas con los comunistas en la ciudad de Nueva York cuando era joven. Otra dijo que con mucho gusto aceptaría el periódico, ya que los suegros de su hijo pensaban de todos modos que ella era comunista.
Discutimos cómo ningún “derecho” está nunca a salvo bajo el capitalismo. Cualquier cosa que beneficie a los patrones capitalista está a la orden del día. Muchos temen que el matrimonio homosexual será el siguiente.
Lecciones: Tener suficiente literatura todos. Abordar a todo mundo – las personas a las que has estereotipado pueden sorprenderte. Pídele información de contacto a cualquier persona amistosa. Si no quieren intercambiar su información, al menos dales la nuestra.
El capitalismo está en serios problemas. Es nuestra responsabilidad aprovechar esto en cada oportunidad. La ira de la gente que nos rodea, dondequiera que estemos, puede convertirse en internacionalismo comunista y en la lucha por hacer una revolución.
Debemos difundir nuestro mensaje a través de Bandera Roja y hacer que nuestro objetivo sea obtener información de contacto y darle seguimiento rápidamente. La gente tiene hambre de nuestro mensaje.