Distribución Consistente de Bandera Roja a Trabajadores del Transporte de Los Ángeles Crea Base Política para PCOI

LOS ÁNGELES (EE.UU.), 20 de enero- “Sólo quiero decirte -aunque no estoy de acuerdo con todo lo que ustedes dicen – que agradezco muchísimo que hayas estado viniendo aquí todos estos años”, dijo un chofer negro de tercera edad en la Base de Autobuses 18.

La cantidad de lectores de Bandera Roja está creciendo de nuevo vuelve a crecer, en ésta y otras Bases de Autobuses, después de que la pandemia interrumpiera temporalmente la mayoría de las distribuciones externas. En la 18, unos 40 trabajadores toman en cada edición unos 65 periódicos (incluidos los extras para amigos). Eso es aproximadamente una tercera parte de todos los que entran o salen del estacionamiento durante un periodo de dos horas.

En la Base 20, alrededor del 40% de los 60-70 choferes y mecánicos de tren toman el periódico en un periodo de 45 minutos. “Tienen seguidores fieles aquí”, comentٕó un guardia de seguridad. “Alguna gente siempre toma el periódico”.

Los camaradas han distribuido Bandera Roja en la Base 3 desde 2011 (con una pausa por pandemia). Algunos lectores habituales se han jubilado o trasladado, pero unos 40 trabajadores toman ahora unos 50 periódicos. A lo largo de los años hemos distribuido el periódico en otras nueve divisiones, algunas de las cuales han cerrado o han recortado trabajadores.

Conversaciones con Trabajadores de la Base 15

La semana pasada, tres camaradas distribuimos 84 periódicos en la Base 15. Hablamos con mecánicos, choferes y personal de servicio: mujeres y hombres, negros, latinos, asiáticos y blancos.

“Dame dos. Uno para mi compañera de trabajo. Le encanta”, dijo un chofer negro.

“Por favor, dile que se ponga en contacto con nosotros”, respondió un camarada.

“Sí, lo haré”, respondió.

Un trabajador de Europa Oriental que no había visto antes Bandera Roja dijo: “Gracias. ¡Me interesa mucho leer esto!”

“Dame uno”, dijo una joven chofer latina. “Tome uno en la otra entrada, pero necesito uno para un compañero/a de trabajo”.

Un chofer latino donó 5 dólares mientras tomaba su periódico.

“Dame cuatro. Los quiero para mis compañeros de trabajo”, dijo otro chofer.”

“Sí, tomaré uno”, dijo otro chofer latino al ofrecérsele un periódico comunista revolucionario. “Y no, no soy nuevo. Llevo ocho años aquí. Tengo tiempo viéndolos”.

“Sí, como 13 años”, respondió un camarada. “Los trabajadores de MTA nos conocen más que a su presidente sindical”.

“El sindicato no sirve para nada”, dijo el chofer. ” Están aumentando las cuotas porque quieren más dinero, a pesar de sus grandes sueldos y prebendas. Necesitamos una huelga, pero no la organizan. Los trabajadores de MTA del Condado de Orange hicieron una breve huelga y ganaron sus demandas. Nos falta liderazgo y unidad”.

“Es bueno luchar”, dijo el camarada. “Pero es mejor luchar por lo correcto. Los trabajadores de MTA han hecho huelgas antes. Saben que pueden cerrar el transporte público de Los Ángeles y hacer que los patrones pierdan más de $100 millones al día. Pero siempre les quitan lo que ganan. La inflación se come los aumentos salariales.

“Tal vez algunos estén considerando seriamente nuestra posición de que la única manera de obtener ganancias permanentes es destruir el sistema salarial con una revolución comunista”.

La Lucha Es Entre la Ideología Capitalista y la Comunista

Un chofer latino de la Base 18 tomó dos periódicos, como lleva haciéndolo varios años. Luego dijo: “La gente está insensibilizada. La gente está muy sumida en sí misma y en sus problemas o en perseguir sus sueños. No se preocupan por los demás ni por lo que ocurre en el mundo.

“Los he visto venir por años”, continuó. “La mayoría de la gente no toma el periódico. Algunos ni siquiera reconocen su presencia. No les hablan, y ni siquiera voltean a verlos”.

“Creo que hay algo de verdad en lo que dices”, respondió el camarada. “Pero no todo el mundo es así. Tenemos algunos lectores fieles como tú. Necesitamos muchos más.

“La lucha es entre ideología comunista y la capitalista”, continuó. “Colectivismo para organizar para destruir este sistema inhumano que insensibiliza a algunos trabajadores y los gana a la mentalidad capitalista de perro come perro. Depende de nosotros, incluso tú, sensibilizarlos de nuevo”.

La expresión en la cara del chofer mostraba que estaba pensándolo seriamente mientras arrancaba porque varios carros hacían cola detrás del suyo.

Combatamos la Apatía Construyendo Colectivos Comunistas

La apatía es parte importante de la ideología capitalista. La absorbemos en la música, el cine, la televisión, los medios de comunicación de masas y las redes sociales. Los patrones nos dicen: “No te fíes de los demás trabajadores”, sobre todo de los trabajadores de otro sexo, “raza” o etnia.

El PCOI escogió concentrarse en MTA en parte por la diversidad de su fuerza laboral. Entre nuestros lectores hay todo tipo de trabajadores.

Los camaradas han hecho este trabajo durante años, tanto dentro como fuera de las Bases, y los trabajadores están respondiendo. La tarea urgente ahora es consolidar esta base política emergente construyendo y ampliando colectivos comunistas.

Primera página de esta edición

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