No Hay Imperialistas “Menos Malos”: Alianzas Comerciales Cambiantes Desembocan en Guerra Mundial

Alianzas Cambiantes Imperialistas Motivan a Camaradas y Amigos a Organizar para el Comunismo aquí ♦ BRICS, G20 Alianzas Cambiantes aquí ♦ El Peligro de Aliarse con Imperialistas “Menos Malos”, Unanosmos para el Comunismo aquí ♦

Las Alianzas Cambiantes Imperialistas Motivan a Camaradas y Amigos a Organizar para el Comunismo

SEATTLE (EE. UU.), 10 de septiembre—“Desde la Cumbre de los BRICS y los manifestantes anti-APEC, es lo más notable que ha ocurrido”, informó D, un camarada del este de EE. UU.

Estaba sorprendido de que varios de sus amigos comprendieran rápidamente la importancia, a escala mundial, del ascenso de los BRICS en contraste con el declive del G7 liderado por EE. UU.

Estos amigos son trabajadores, estudiantes, profesores de formación profesional y adjuntos universitarios de Nueva York y Maryland (EE. UU.), Ecuador, Brasil y China. Se esfuerzan por comprender cómo afectarán estos cambios sísmicos a sus entornos laborales. Están pensando más seriamente en la necesidad de luchar por el comunismo.

J de Portland (EE. UU.) se mostró entusiasmado por el trabajo comunista realizado en los foros, mítines y manifestaciones contra la APEC. Dijo que ver al Partido poner en práctica la lucha comunista era una de las actividades más inspiradoras que había presenciado últimamente.

Pero no tuvo tan buena respuesta de su grupo de activistas antirracistas en las escuelas de Oregón como la tuvo el camarada D. No había entendido la importancia de los conflictos de los bloques comerciales lo suficientemente bien como para explicárselo a sus amigos.

J está ahora dispuesto a luchar más fuertemente por el comunismo. El colectivo elaboró un plan para distribuir panfletos del PCOI sobre la migración, como hicimos durante las actividades anti-APEC. Su grupo de activistas antirracistas relaciona la xenofobia con el racismo. J. pensó que abriría la puerta a la estrategia para la revolución comunista internacional.

El plan de J. muestra confianza en las masas obreras. Su convicción de que las masas lucharán por algo más que sus necesidades económicas inmediatas inspiró a otros camaradas. La revolución comunista internacional descansa sobre esta base.

Viejos Amigos Aprenden Cosas Nuevas

Los camaradas de Seattle han establecido recientemente contactos con docenas de personas interesadas en nuestra estrategia comunista. Nos hemos puesto en contacto con algunos de ellos y los vamos a invitar a una próxima barbacoa.

Eso no significa que podamos descuidar a nuestros amigos de siempre. Movilizar a esos amigos íntimos personales y políticos es crucial para dar seguimiento a estos contactos.

M, activista desde hace mucho tiempo, ha ayudado al partido durante más de un año a pesar de algunas diferencias ideológicas. Tras la ampliación de los BRICS, pasó algún tiempo hablando con un camarada sobre nuestro lema durante las actividades de la APEC. El PCOI incluyó los bloques comerciales liderados por China cuando dijimos: “Abolir todos los cárteles comerciales con la revolución comunista”. China también es una potencia imperialista.

“Estoy contigo en eso”, aceptó M por primera vez. La expansión de los BRICS le impactó.

M estuvo de acuerdo en que los organizadores de la coalición anti-APEC, a quienes conoce desde hace tiempo, se equivocaron al culpar sólo al imperialismo estadounidense. Está interesado en lo que piensan los camaradas del PCOI en Sudáfrica sobre los BRICS. Cambios ideológicos como estos, impulsados por la práctica comunista, validan la persistente lucha comunista.

Planeamos mostrar la nueva lista de contactos a M. y pedirle que nos ayude a visitarlos para exponer nuestros argumentos a favor del comunismo. Pedimos a M. que siga invitando a sus conocidos a nuestras reuniones y actos sociales.

“En política, cuando el agua empieza a hervir es una tontería apagar el fuego”, escribió D. Ahora es el momento de redoblar nuestros esfuerzos para reunir a nuestros amigos de siempre y a los camaradas que regresan. Ellos ayudarán a calentar la lucha para una base movilizada para hacer crecer el Partido y construir la revolución comunista.

BRICS, G20 Cambiantes Alianzas

SEATTLE (EE. UU.), 13 de septiembre—Las guerras de los bloques comerciales crecen como la mala hierba en un jardín descuidado. Cada mes hay una nueva reunión de una coalición comercial. Entre conferencia y conferencia, Estados Unidos o China inventan nuevas alianzas político-económicas. Cada bloque promueve la explotación de la clase obrera mundial y los preparativos para la guerra.

Tras las manifestaciones de julio en Seattle contra el bloque comercial APEC, la alianza BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica) añadió seis nuevas naciones: Argentina, Egipto, Etiopía, Irán, Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos. Bajo su paraguas se concentra el 47% de la población mundial y el 37% del producto interno bruto mundial.

La mayor parte de las reservas energéticas y otros recursos nacionales claves pertenecen a este bloque. Las cifras no mienten: BRICS supera al G7 liderado por Estados Unidos en casi todas las categorías que cuentan. No es de extrañar que incluso los antiguos aliados de EE. UU. acudan en masa a Pekín en busca de acuerdos comerciales.

Los imperialistas estadounidenses intentaron tomar represalias en la cumbre del G20 de septiembre, pero se quedaron cortos. No se acordó nada sustancial. EE. UU. esperaba conseguir una condena del papel de Rusia en la guerra de Ucrania. La declaración final fue aún más inservible que la redactada en la última reunión de Bali.

Estados Unidos está cada vez más aislado. Los lideres de los Estados chino y ruso ni siquiera se molestaron en asistir al G20. Se están preparando para el foro “La Franja y la Ruta” de octubre. Más de 150 países y más de 30 organizaciones internacionales han firmado documentos de cooperación. Más de 90 países han confirmado su asistencia.

“Cuando empecé a participar en el trabajo político antiimperialista, Estados Unidos era la potencia dominante”, dijo un camarada de Portland. “Eso ya no es cierto. China y sus aliados tienen ahora el sartén por el mango”.

El ascenso de China y el declive de EE. UU. reflejan un desarrollo desigual entre los imperialistas que compiten entre sí. Cada imperialista sigue luchando por su supremacía, convirtiendo los bloques comerciales en plataformas para reclutar aliados de guerra.

Algunos autodenominados antiimperialistas insisten en que EE. UU. es el agresor y China sólo se defiende.

Nuestro camarada de Portland pensaba que esa valoración era especialmente peligrosa. Fomenta el nacionalismo y el racismo, sacrificando las vidas de millones de trabajadores en nombre de uno u otro imperialista.

“La política comunista puede evitar que esto ocurra, llevando la lucha comunista a los capitalistas, sea cual sea el país que representen”, añadió un camarada de la Costa Este.

El Peligro de Aliarse con Imperialistas “Menos Malos”

Construyamos la Unidad Internacional de la Clase Obrera para el Comunismo

Una creciente ola fascista envolvió al mundo en la década de 1930. Las potencias imperialistas occidentales estaban armando a Hitler para que marchara hacia el Este y destruyera la Unión Soviética.

Los lideres soviéticos pensaron que solos no podían hacerle frente a la Alemania nazi. En 1934, lograron que la III Internacional Comunista adoptara la línea del Frente Unido contra el Fascismo (FFA). Ésta instaba a los comunistas a aliarse con los imperialistas “antifascistas” contra el imperialismo alemán y sus aliados.

Firmando de un pacto de no agresión con Hitler en 1939 no les dio mucho tiempo a los soviéticos. Pero asestó un duro golpe a la resistencia antifascista en la Europa ocupada.

Alemania invadió Rusia en 1941. Ese año, EE. UU., el Reino Unido y la URSS formalizaron la alianza que Stalin había buscado antes. Los lideres soviéticos esperaban recibir una gran ayuda de esta alianza. Eso no pasó.

Fue la dedicación de las masas rusas y de los combatientes de la resistencia en toda Europa lo que derrotó a Hitler. Veintiocho millones de rusos y cientos de miles de combatientes de la resistencia dirigidos por comunistas murieron para derrotar al fascismo en Europa y las Filipinas.

El Ejército Rojo derrotó al ejército nazi en Stalingrado en 1943. Marcharon triunfantes hacia Berlín, liberando Europa del Este. Berlín cayó en manos de los soviéticos en 1944. Sólo entonces, para impedir que los soviéticos se tomaran toda Europa, EE. UU. e Inglaterra abrieron el segundo frente en Europa.

En 1945, sabiendo que Japón estaba dispuesto a rendirse, EE. UU. bombardeó Hiroshima y Nagasaki para amenazar a la Unión Soviética. Fue el pistoletazo de salida de la Guerra Fría.

Esto muestra la bancarrota de un frente unido con imperialistas “menos malos” quienes rápidamente se convirtieron en el “mal mayor”. Nuestro enemigo es todo el sistema imperialista capitalista.

No podemos unirnos con ningún explotador capitalista-imperialista, ni con sus agentes socialfascistas en los movimientos de masas.

La Política del “Frente Unido” Es Peligrosa Hoy en Dia

El fascismo y la guerra están envolviendo de nuevo al mundo. Muchos apoyan ahora a los imperialistas rusos y chinos como alternativas “menos malas” (o incluso buenas) al imperialismo de EE. UU./OTAN. Eso incluye a líderes reformistas como los sudafricanos Ramaphosa y Malema.

Por ejemplo, los imperialistas rusos luchan por controlar los recursos y la plusvalía creada por los obreros en África. En Níger, explotan el justificado odio de las masas al imperialismo francés para conseguir apoyo para el imperialismo ruso. Los verdaderos intereses de las masas residen en luchar por el poder obrero comunista y la producir para satisfacer las necesidades humanas, y no en cambiar amos imperialistas.

La contradicción principal que impulsa los acontecimientos en Níger es la contradicción entre el imperialismo francés (aliado de EE. UU.) y el imperialismo ruso (aliado de China). La contradicción fundamental es la lucha de las masas contra todos los capitalistas e imperialistas que se benefician de nuestra explotación.

Construyamos Un PCOI Masivo

Las masas sólo derrotarán al fascismo mediante la revolución comunista.

La principal contradicción, impulsora de los acontecimientos en todas partes, es la existente entre el debilitado imperialismo estadounidense y los imperialismos chino y ruso en ascenso. Ambos bandos luchan por la lealtad de los capitalistas locales y por ganarse a los obreros a luchar y morir por ellos. Cada bando compite por pagar los salarios más bajos y controlar los mercados y recursos. Está impulsando guerras desde Ucrania hasta Siria. Impulsa el crecimiento de los BRICS para desafiar al G7.

Esto hace que el mundo sea más inestable. Expone el sistema de ganancias como genocida. Está llevando a la Tercera Guerra Mundial, posiblemente nuclear. Nuestro futuro cercano está lleno de peligros – y de oportunidades: crea las condiciones para el triunfo de la revolución comunista.

Conforme crezcan el PCOI y la lucha por el comunismo, la contradicción fundamental se convertirá en la principal: obreros contra capitalistas e imperialistas. La lucha por el poder obrero comunista dirigirá los acontecimientos mundiales. La revolución comunista resolverá ambas contradicciones eliminando para siempre el capitalismo y el imperialismo.

Las masas comunistas construirán un mundo basado en la colectividad para satisfacer nuestras necesidades.

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