Crítica Importante de la Última Edición aquí ♦ Ponerle Fin a las Guerras Imperialistas con la Revolución Comunista aquí ♦ Alto al Genocidio en Gaza aquí ♦ Huracán Otis- Un Desastre Capitalista aquí ♦ Carta Sobre Barbie aquí ♦
Crítica Importante a la Última Edición
Nuestro colectivo en Delhi, India, discutió los artículos del vol. 14 #14. En India imprimimos una versión más corta de Bandera Roja, que suele contener las tres primeras páginas. Pensamos que la carta de la página tres, escrita por un maestro de Los Ángeles, necesitaba un comentario editorial.
El autor de la carta tuvo la oportunidad de explicar la propaganda de la clase dominante de que “ambas partes tienen la culpa” y que “Israel sólo estaba respondiendo”. El autor nunca dijo que lo que sucedía en Gaza era un genocidio.
Sólo puedes explicar el genocidio si entiendes la historia. El escritor podría haber explicado el surgimiento histórico del colonialismo, el sionismo y el ultrarracismo en la clase dominante israelí. Esto ha resultado en expulsiones masivas, guerras brutales después de guerras de dominación. Ataques deliberados contra las poblaciones civiles en Gaza y Cisjordania, que han estado ocurriendo durante mucho tiempo.
En cambio, la afirmación del autor de construir la unidad entre los trabajadores israelíes y palestinos no va a convencer a mucha gente. Es mecánico, ahistórico. En la India, el fascista BJP nos bombardea con propaganda de odio antimusulmán y antidalit. Logramos un gran avance en el reclutamiento luchando ideológicamente con las masas porque miramos más profundamente en la historia colonial que creó la clase social hindú y musulmana.
—El colectivo de Delhi en la lucha
Bandera Roja responde: Gracias. Estamos de acuerdo en que la carta fue mecánica y ahistórica. No debería haber estado en la página tres y deberíamos haberla comentado críticamente.
Ponerle Fin a las Guerras Imperialistas, Luchar por Una Revolución Comunista.
“Me siento completamente frustrado e impotente ante los ataques indiscriminados contra la humanidad, la toma de rehenes, los desplazamientos forzados, los bombardeos y un genocidio total. ¿Vale la pena esta guerra?” comentó J.
“Un Estado artificial fundado por imperialistas británicos con la excusa del sionismo de principios del siglo XX, para defender los intereses imperialistas británicos y estadounidenses en Oriente Medio, está provocando el genocidio más sangriento del siglo XXI”, concluyó J.
“No, nada tiene que ver el pueblo judío, nada tiene que ver el fiel musulmán. Son simplemente personas despojadas de su dignidad, de sus vidas, para que unos pocos políticos puedan mantener el poder por un tiempo más”. Dijo R.
El problema es el sionismo, que es una ideología ultranacionalista racista que defiende la superioridad de los judíos sobre los árabes. El Ministro de Defensa de Israel lo demostró cuando hablo de los palestinos como si fueran animales. Está es la política promovida por el gobierno fascista de Netanyahu. De hecho, ¡Este ultraderechista incluso culpó de genocidio nazi no a Hitler, sino a los árabes!
Es momento crucial para luchar y movilizar las masas por un sistema comunista, para revertir el genocidio en Gaza.
¿Qué diferencia en esta guerra si hiciéramos una revolución comunista? -Preguntó J.
La diferencia es grande. Esa es una guerra imperialista. Nuestra lucha es por la libertad, por materializar nuestros ideales de un bien común. Vivir colectivamente sin esclavitud asalariada, sin explotación, sexismo o racismo una vida sin fronteras para derrotar y acabar el capitalismo.
Necesitamos un ejército rojo para movilizar a las masas donde los jóvenes soldados comunistas y la clase trabajadora den liderazgo para una sociedad comunista.
Debemos difundir las ideas del comunismo real entre nuestros hermanos y hermanas de la clase trabajadora en todo el mundo para detener los planes de los patrones imperialistas.
Únete y se parte de nuestro partido. Es urgente construir un PCOI masivo. Ayúdanos a fortalecer el movimiento revolucionario que necesitamos, lee y distribuye Bandera Roja.
—Camarada en El Salvador
¡Alto al genocidio en Gaza!
PASADENA (EE.UU.), 13 de noviembre— “¡Alto al genocidio en Gaza! ¡Alto el fuego ahora! Cientos de adultos y niños se reúnen semanalmente frente a la oficina de la representante Judy Chu. Al cruzar una calle muy transitada, interrumpen el tráfico. Sus cánticos llenan el aire.
Esta acción de base está creciendo rápidamente. Y la lucha política se agudiza. “Judy Chu, no puedes esconderte, deja de apoyar el genocidio”, coreaban los jóvenes. Un líder de Voz Judía por la Paz se apresuró a callarlos: “No pueden decir eso, la alejarán”. ¡Típico de cómo los liberales intentan enjaular las protestas dentro de la política capitalista! Otro manifestante, un organizador sindical, intervino: “¡No se les puede decir a los jóvenes qué decir!”.
Mientras tanto, una amiga musulmana le dijo a un camarada: “No me gusta ‘desde el río hasta el mar, Palestina será libre'”. Ella considera que un Estado palestino controlado por Hamás probablemente se parecería al Irán de hoy… y expulsaría al pueblo judío.
Los camaradas y lectores de Bandera Roja están planteando ideas comunistas en estas protestas, reconectándose con viejos amigos y haciendo otros nuevos. Nuestro colectivo partidario se fortalecerá.
Huracanes: No son Desastres Naturales, si no Desastres Capitalistas
Guerrero, México—La mortandad y precariedad que dejó el fenómeno meteorológicos Otis en Acapulco, Coyuca de Benítez y toda la costa grande de Guerrero son causados por la miseria derivada del sistema capitalista.
El gobierno no tomó medidas para prevenir la afectación a las personas y sus bienes. Se ha dicho que hizo caso omiso de las advertencias de que la tormenta tropical se convertiría en huracán con alto grado de peligrosidad.
Por otro lado, la pobreza y las habitaciones rudimentarias o improvisadas hicieron que el fenómeno afectara más a la clase trabajadora
La riqueza que la actividad turística provee queda en manos de los capitalistas, pocos trabajadores tienen ingresos suficientes para comprar o construir casas resistentes.
Los “desastres naturales” les caen “como anillo al dedo” a los gobernantes. La población no los culpa por el fenómeno de la naturaleza ni les cargan la responsabilidad de la reconstrucción, así que cualquier ayuda la dan por buena y los politiqueros ven reforzada su influencia.
Adicionalmente tienen la oportunidad de enriquecerse con el manejo de las provisiones sea desviando directamente el presupuesto oficial o a través de arreglos con los proveedores.
El presidente López Obrador informó que este miércoles, previo a su viaje a San Francisco, California para participar en el Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC), se reunió con los obispos de México para coordinar la ayuda.
La corporación Cemex, de la familia Zambrano, que tiene una planta productora de cemento también en Israel, contribuyendo a la construcción de los muros que separan a Gaza y Cisjordania de Israel, ha anunciado que “su sindicato obrero” llevará una caravana de camiones con materiales para la reconstrucción, “parte del esfuerzo interinstitucional, en conjunto con la iniciativa privada y otras organizaciones sociales.
La clase obrera, como siempre, fue la primera en responder a la ayuda de los necesitados. Llevándoles comida, medicina y ayudando a buscar heridos bajo los escombros. Solo la clase obrera salva a la clase obrera.
El capitalismo es el problema, la solución es acabar con él, aboliendo toda compraventa. En primer lugar, la de la fuerza de trabajo. Con ello no necesitaríamos el dinero. La producción sería para satisfacer las necesidades humanas presentes y futuras. Para lograr eso necesitamos movilizar a las masas para el comunismo.
—Camarada en México
Donde “Barbie” Se Equivoca: Cuidado Infantil, Consumismo e Imagen Corporal
Me gustó que la reseña de la película Barbie nos invitara a conversar sobre los roles de género capitalistas y las alternativas comunistas.
La reseña describe cómo una muñeca Barbie gigante interrumpe el juego de lunas niñas con muñecas y tareas domésticas imaginarias. El punto de la película era que “Barbie marcó el comienzo de un nuevo mundo de posibilidades para las mujeres más allá de los límites de la maternidad y la domesticidad”.
Creo que deberíamos ser mucho más críticos al respecto.
Para empezar, más de un tercio de las mujeres estadounidenses ya trabajaban fuera del hogar en 1959, cuando debutó Barbie. El cincuenta por ciento de las mujeres negras lo hacía.
El juego de los niños (en muchas sociedades) los prepara para el trabajo de adultos. Cuidar a los bebés es un trabajo importante y útil. También lo son las tareas del hogar. El problema no es que el juego de las niñas las prepare para esto. Es que el juego de los niños no lo hace.
Los muñecos diseñados para niños (“figuras de acción”) los preparan para pelear sin preguntarse por qué. En el peor de los casos, “vaqueros e indios” los invitan a recrear el genocidio.
Es un problema si las niñas sólo reciben muñecas y utensilios de cocina para jugar. Necesitan juguetes de construcción, materiales de arte, equipos deportivos y mucho más. Pero ¿qué “nuevas posibilidades” representaba Barbie? Principalmente consumismo, como señala la reseña, especialmente en lo que respecta a la ropa. “Vamos de compras”, dijo Barbie Parlante. Ir de compras se convirtió en el nuevo “trabajo de mujeres”.
Barbie abrumó a las niñas con una imagen distorsionada de una mujer adulta. Si Barbie fuera una mujer real, mediría 5’9” de altura y un busto de tamaño ingenioso, 18” de cintura, 33” de cadera y talla 3 de zapatos. Una mujer real de esa altura probablemente usaría al menos un zapato talla 9.
Los pies de Barbie están deformados para usar tacones altos permanentemente. Sus manos son pequeñas. ¿Cómo podría hacer un trabajo real? Todas las Barbies “profesionales” y “atletas” son la misma extraña modelo adolescente vestida con disfraces de Halloween.
Barbie supuestamente pesa 110 libras. Una mujer sana de esa altura pesaría al menos 145 libras. ¿Es una coincidencia que la anorexia aumentara en los años 60 a medida que se disparaba la popularidad de Barbie? Fue entonces cuando las imágenes del cuerpo femenino “ideal” cambiaron de figura completa (como Marilyn Monroe) a esquelética (como Twiggy).
Los estudios de las sociedades de cazadores-recolectores muestran que los niños fabrican muñecos y aprenden, a través del juego, a criar a los niños más pequeños. También fabrican y utilizan otros objetos en juego y para realizar tareas reales. La mayoría son versiones de tamaño completo o en miniatura de herramientas para adultos. Están aprendiendo habilidades útiles para roles adultos. En el juego, también aprenden la cultura de sus pares.
Los niños de la sociedad comunista probablemente jugarán más como niños cazadores-recolectores que como niños en la última etapa del capitalismo. El trabajo volverá a ser el centro de la cultura. Los niños, como todos los demás, harán cualquier trabajo útil que puedan. El “trabajo infantil” será valorado, no explotado. Y sí, eso a menudo incluirá tanto a niños como a niñas ayudando con los niños más pequeños.
—Camarada en Los Ángeles (EE. UU.)