Derrotemos el “Divide y Vencerás” del Capitalismo aquí ♦ Por un Mundo Comunista Sin Fronteras aquí ♦
La Historia Muestra que Podemos Derrotar el “Divide y Vencerás” del Capitalismo
Unámonos Para Luchar por un Mundo Comunista
En julio de 1967, en el apogeo de la guerra de Vietnam, tres mil trabajadores blancos y negros que construían barcos de la Armada en el astillero Península Shipyard en Newport News, Virginia (EE. UU.), iniciaron una huelga rebelde. Desafiaron una orden judicial, lucharon contra rompehuelgas y volcaron un coche patrulla. Junto con sus familias, saquearon los chupasangres casas de empeños que rodeaban el astillero.
Los obreros negros que habían sido excluidos de la atención médica estatal y de la educación universitaria se unieron a los obreros blancos. Estos obreros habían crecido en el sur Jim-Crow: Leyes racistas que los obligaba a asistir a escuelas segregadas, viajar en autobuses segregados y beber de fuentes de agua segregadas. Esta huelga rompió las barreras que los separaban. Los obreros de la antigua capital de la confederación de esclavistas ahora se unieron para luchar como una sola clase obrera.
Su conciencia de clase militante se basó en la oposición masiva a la guerra de Estados Unidos contra Vietnam, el movimiento de derechos civiles y en las rebeliones urbanas de los años cincuenta y sesenta. Es uno de muchos capítulos de este tipo en la historia de la aguda lucha de clases multirracial en Estados Unidos.
Trabajadores Contratados en las Colonias Norteamericanas de Inglaterra
La mayoría de los primeros colonos ingleses eran pobres. Masas de personas se habían visto obligadas a abandonar sus tierras por el auge de la agricultura capitalista y se habían quedado sin hogar en las ciudades. Los gobernantes ingleses estaban preocupados por lo que llamaban la “carga de los pobres” y el “desorden rufián”. Ahorcaron a los ladrones y condenaron a los mendigos al “transporte” a las colonias. Cientos de miles de agricultores sin tierra se vendieron por contrato (esclavitud de duración limitada) para tener la oportunidad de sobrevivir en la tierra que Inglaterra estaba robando a los pueblos indígenas.
Los colonos ricos obtuvieron títulos de tierra por traer personas a las que obligaron a trabajar para ellos durante (normalmente) siete años. Los trabajadores que sobrevivieron recibieron un arma y algunos suministros. Se les dijo que se trasladaran al oeste y probaran suerte robando tierras de cultivo a la población nativa.
El reclutar colonos entre los pobres rebeldes de Inglaterra para utilizarlos como mano de obra barata y tropas de choque en el genocidio de los nativos americanos. Ésta fue la estrategia de los gobernantes ingleses. Creó marcadas divisiones entre los terratenientes ricos y los pobres sin tierra en las colonias. Enfrentó a los colonos pobres con los pueblos indígenas. Se convenció a los agricultores pobres para que lucharan contra los nativos, en lugar de contra sus señores coloniales.
Los africanos que fueron traídos en cadenas a Virginia en el siglo XVII a menudo trabajaban codo con codo con trabajadores contratados ingleses. Se amaron, huyeron y se rebelaron juntos. Pero los gobernantes crearon mentiras, costumbres y leyes racistas para separarnos. Pronto hicieron de la esclavitud una cuestión de ascendencia africana.
Este es el nacimiento del capitalismo. Marx lo llama “acumulación primitiva”. Podríamos llamarlo “capital inicial”. Los grandes terratenientes expulsaron a los agricultores de sus tierras para que pudieran criar ovejas. La masa de la población se convirtió en los “trabajadores pobres libres”. Los africanos fueron esclavizados. Los nativos americanos fueron sometidos a genocidio. Como lo describió Marx, el capital llega al mundo “choreando de sangre y suciedad de cabeza a pies, por todos los poros”.
Este Sistema Racista es El Capitalismo. La Solución es El Comunismo
Debemos llamar al capitalismo por su verdadero nombre. Esto deja claro que los explotadores capitalistas nos atacan a todos. A algunos de nosotros nos ataca con más fuerza que a otros y de diferentes maneras. Continuarán haciéndolo hasta que finalmente acabemos con el capitalismo con la revolución comunista.
Algunos le llaman a esto “colonialismo de colonos”. No estamos de acuerdo. Ese término nos impide comprender esa realidad básica. Considera a los ingleses pobres, que huyen de la prisión y el hambre, como los principales agentes de opresión de la población indígena. Los verdaderos culpables fueron sus gobernantes, quienes establecieron las colonias y los obligaron a migrar para su propia supervivencia.
Los agricultores blancos pobres fueron aplastados por la necesidad de trabajar más barato que los esclavos. La mayoría estaban desnutridas y apenas sobrevivían. El lenguaje del “colonialismo de colonos” los agrupa con esclavizadores ricos que se enriquecieron con el trabajo tanto de africanos esclavizados como de blancos pobres.
Hablar de “colonialismo de colonos” oculta la verdadera historia de solidaridad multirracial/multiétnica y lucha de clases. Esta historia –incluida la huelga de Newport News– apunta a la posibilidad de una revolución comunista de una clase obrera unida. Los trabajadores y marineros blancos y negros encabezaron protestas en la América colonial contra la Ley del Timbre en la década de 1760.
Trabajadores portuarios blancos y negros, ciudadanos e inmigrantes, cerraron los puertos de Nueva Orleans en 1892 y de Filadelfia en 1913. Durante la Gran Depresión de la década de 1930, los veteranos, los arrendatarios y aparceros, las amas de casa y los trabajadores desempleados, los trabajadores del acero y del automóvil de todo el mundo Las “razas/etnias” lucharon lado a lado en lucha tras lucha en todo Estados Unidos.
Somos una clase trabajadora. Los gobernantes han trabajado durante siglos para dividirnos. El comunismo eliminará la base material del racismo y todas las demás ideologías y prácticas divisivas poniendo fin al sistema salarial. La lucha contra el racismo y el nacionalismo y por el comunismo es una sola lucha. ¡Unidos venceremos!
Lean Nuestro Folleto: Para Acabar con el Racismo Movilicemos a las Masas para el Comunismo Aquí
Por un Mundo Comunista sin Fronteras
MÉXICO, 2 de enero— Los seres humanos siempre hemos migrado. Sin embargo, la migración ha aumentado bajo el capitalismo. Hoy, los gobiernos quieren una migración “ordenada y regulada”, basada en sus necesidades de producción capitalista.
Ante un enorme flujo de migrantes hacia el norte a través de México, los funcionarios del gabinete estadounidense Blinken y Mayorkas y la asesora Sherwood-Randall se reunieron con el gobierno mexicano del presidente López Obrador (AMLO). Acordaron normas para intentar contener la ola. Las autoridades mexicanas están transportando a miles de personas a centros de procesamiento para solicitar permisos de viaje.
Los funcionarios mexicanos utilizaron excavadoras el 28 de diciembre para despejar un campamento de tiendas de campaña para migrantes en Matamoros, México, cerca de la frontera con Estados Unidos en Brownsville, Texas, después de que Obrador aceptara hacer más para frenar la inmigración a Estados Unidos.
Los patrones ven miles de brazos fuertes para sus fábricas. Los comunistas vemos a miles de personas con el potencial de construir un nuevo mundo comunista sin fronteras ni explotación.
Más de la mitad de los trabajadores de todos los países trabajan para los capitalistas bajo contratos “informales”. Es decir, como si no fuéramos sus empleados. Sin embargo, al vender los productos que fabricamos, sólo nos esclavizan.
Millones de nosotros estamos sometidos a condiciones de trabajo extenuantes y a violencia. Ésta es una de las razones para escapar mediante la migración: buscar mejores condiciones de vida, el “sueño americano”. Muchos miles de familias se ven directamente afectadas por la migración.
Con una sociedad comunista no habrá necesidad de salir de nuestros hogares porque todos tendremos lo que necesitamos.
En las ciudades fronterizas, los inmigrantes están hacinados y los servicios son insuficientes. Necesitamos apoyar a los inmigrantes y luchar contra la xenofobia. Los inmigrantes no son el problema. El problema es el capitalismo. Incluso si un millón de migrantes permaneciera en México, la población aumentaría menos del 1%.
Los gobiernos dicen que no hay suficiente dinero para apoyar ni a los inmigrantes ni a los locales. Pero los funcionarios y los capitalistas que representan se llenan los bolsillos con dinero que roban a los trabajadores.
La mayoría de nosotros en el mundo somos inmigrantes. La mitad de la población de América Latina vive en ciudades (en México, el 79% desde 2020). Fueron expulsados de los pueblos y zonas rurales por las condiciones creadas por el capitalismo.
No cambia mucho si se trata de migración interna o externa. El ser humano busca “mejores condiciones” de vida, en otros países o en las metrópolis.
El desarrollo tecnológico que el capital revoluciona constantemente crea, sobre todo, las condiciones culturales de convivencia, las convicciones morales que hacen posible una humanidad superior.
Esto no sólo crea las condiciones materiales para una sociedad superior. Pero lo más importante es la urgente necesidad de un partido comunista de masas que organice una sociedad sin dinero (aboliendo las relaciones comerciales), sin fronteras, sin racismo ni prejuicios de género.
Una nueva sociedad comunista donde cada uno aporte según su capacidad y compromiso con los demás y reciba según sus necesidades.
Los reformistas (posibilistas) creen que nosotros, los esclavos asalariados, tenemos que esperar a que se desarrollen más las fuerzas productivas. Sin embargo, los trabajadores sólo necesitan querer, como dijo Engels. La riqueza que hemos producido como clase es suficiente para proporcionar la vida humana superior antes mencionada y básicamente para asegurar el futuro.
En todo México y en todo el mundo, los trabajadores necesitan tomar conciencia de clase y construir el PCOI masivo para poner fin a la esclavitud asalariada y las fronteras.
Lean Nuestro Folleto: “Luchemos por el Dia en Que Ningún Trabajador Sea Llamado Extranjero” Aquí