Guerras Imperialistas Expansivas Hacen la Revolución Comunista Necesaria y Posible

La Revolución Comunista Pondrá Fin a los Baños de Sangre Imperialistas

17 de abril— La guerra en Siria se intensifica. El imperialismo estadounidense intensificó sus bombardeos contra las fuerzas iraníes allí. Las fuerzas iraníes y sirias respondieron bombardeando bases estadounidenses, matando a un contratista estadounidense e hiriendo soldados. Su objetivo es obligar a los EE.UU. a retirarse.

En Sudán, las fuerzas respaldadas por Occidente están luchando contra el gobernante respaldado por Rusia. Los buques de guerra rusos atracan regularmente allí y Rusia planea construir una base naval.

Vivimos en tiempos peligrosos. El capitalismo está en una severa crisis mundial. Los capitalistas-imperialistas se mueven rápidamente hacia la guerra mundial para defender su ganancias e imperios.

Los trabajadores rusos, ucranianos y sirios pagan con sus vidas combatiendo. Los trabajadores en África y en otros lugares pagan con sus vidas padeciendo hambre. Otros pagan por las armas de los gobernantes mediante los altos precios del petróleo, la inflación, recortes, desempleo masivo y pobreza aplastante. Los gobernantes fascistas tratan de ahogar en sangre nuestras crecientes rebeliones contra sus feroces ataques.

Nuestra clase ha demostrado unidad, determinación y heroísmo en rebeliones masivas contra estos ataques: Francia, Ecuador, China, India, Sri Lanka, Sudáfrica y más. Esto muestra nuestro potencial y oportunidad revolucionarios.

En este período, la revolución comunista es necesaria y posible, si ganamos a estas masas para que luchen por el comunismo. Eso requiere un Partido Comunista Obrero Internacional masivo en todo el mundo. Los crecientes colectivos del PCOI en India, El Salvador y Sudáfrica muestran el camino a seguir.

A medida que la crisis se intensifique, millones más se rebelarán. Millones más serán reclutados para luchar por los imperialistas. Esta es la oportunidad de convertir la crisis y la guerra de los imperialistas en una revolución para el comunismo.

La competencia del capitalismo por máximas ganancias hace que las guerras imperialistas sean inevitables. Las marchas o las coaliciones por la paz, por grandes que sean, no pueden detener la guerra. Solo la revolución comunista terminará con la competencia mortal del capitalismo y sus guerras por ganancias. Sólo un mundo comunista puede traernos la paz.

Partiendo de las áreas liberadas, juntos construiremos una sociedad basada en relaciones comunistas de cooperación y colectividad. Compartiremos todos los recursos para satisfacer las necesidades de todos los trabajadores. A medida que se extienda la revolución, construiremos un mundo comunista sin fronteras, naciones, esclavitud asalariada ni dinero. Sin racismo, sexismo, ni xenofobia.

No hay buenos imperialistas

Dos bloques imperialistas compiten por la dominación mundial: Estados Unidos y sus aliados occidentales frente a China-Rusia-Irán, que han profundizado más su unión en medio de la crisis.

Muchos de los que odian justificadamente al imperialismo estadounidense/occidental piensan que Rusia y China son mejores. Pero ellos también son capitalistas-imperialistas. Todos los capitalistas e imperialistas son enemigos mortales de los trabajadores. Ninguno es “menos malo”. Todos buscan ganancias a costa de nuestras vidas proletarias. Nuestra tarea es enterrarlos a todos.

El Cambiante Orden Mundial Imperialista Aumenta los Peligros y las Oportunidades

Los imperialistas estadounidenses esperaban debilitar el bloque de sus rivales desmantelando Rusia. Empujaron a la OTAN a las puertas de Rusia. Los imperialistas rusos invadieron Ucrania para detener el avance de la OTAN y restaurar el antiguo imperio de Rusia.

Las drásticas sanciones económicas occidentales no lograron aislar a Rusia – ni política, ni económicamente. En cambio, han aislado y debilitado a EE.UU. El petrodólar, piedra angular de la dominación económica mundial de EEUU desde 1973, está bajo ataque.

La influencia rusa ha crecido dramáticamente en África y la región estratégica del Golfo Pérsico. Por ejemplo, muchos gobernantes allí, incluidos los saudíes, se están alineando con Assad en Siria, apoyado por Rusia.

Los Emiratos Árabes Unidos vendieron recientemente gas propiedad de Totalfina de Francia a China en yuanes, los primeros energéticos del Golfo Pérsico vendidos otra moneda que el dólar. Esto, mientras el presidente francés Macron visitaba al presidente Xi en Beijing.

Esto se expandirá a medida que aumente la influencia china en Arabia Saudita. Los saudíes ya venden la mayor parte de su petróleo a China. Por esto, Xi pudo convencer a Arabia Saudita que terminará su disputa con Irán.

Mientras tanto, Arabia Saudita solicitó ser miembro de la Organización de Cooperación de Shanghái, encabezada por China y Rusia. Es la organización política, económica y de defensa regional más grande del mundo. Cuando el petróleo saudí se venda en yuanes chinos, marcará el final de la era del petrodólar.

Imperialismo Estadounidense: Su Único Recurso es la Guerra

El aislamiento de los gobernantes estadounidenses hace que el mundo sea más peligroso. La guerra se convierte en su única opción para defender su imperio y el dominio del dólar. Del mismo modo, solo mediante la guerra pueden los imperialistas chinos y rusos quitarle el trono a EEUU.

El director de Inteligencia Nacional de EEUU. informó en marzo que EE. UU. se enfrenta a “unos pocos años críticos” para tomar medidas decisivas para contener a China.

China planea abiertamente apoderarse de Taiwán. Biden dice que Estados Unidos irá a la guerra para impedirlo. Xi repitió recientemente su llamado al ejército chino a “prepararse para el combate activo”. China acaba de aprobar una ley para reclutar veteranos y estudiantes en el ejército.

Todos los imperialistas están dispuestos a asesinar a millones para sus ganancias en una Tercera Guerra Mundial. Solo la revolución comunista, no elecciones ni reformas, puede acabar esto.

Debemos difundir Bandera Roja y construir colectivos del PCOI en todo el mundo. Es especialmente crucial mandar a la juventud comunista a las fábricas y ejércitos para ganar a obreros industriales y soldados para que abracen y luchen por el comunismo.

Los soldados se han rebelado y amotinado antes, desde los cipayos indios hasta las tropas de EEUU en Vietnam. Durante la primera guerra mundial, los soldados y marineros rusos se unieron a los obreros por la revolución. Pero construyeron el socialismo, no el comunismo, y la Rusia imperialista surgió de nuevo.

Esta vez podemos y debemos luchar directamente por el comunismo para acabar definitivamente con la esclavitud asalariada, el dinero y los mercados. Construyamos relaciones comunistas en todo el mundo, ¡tenemos un mundo comunista que ganar!

 


Los marineros Bolcheviques lideraron un motín en el Acorazado Potemkin durante la Revolución de 1905 contra el zar

Petrodólares: Claves para el Imperio Estadounidense

Al final de la Segunda Guerra Mundial, todas las economías imperialistas (excepto EE.UU.) estaban destruidas. Los productos estadounidenses inundaron los mercados de todo el mundo, capturando más de la mitad de la cuota del mercado mundial.

Estados Unidos había planeado un nuevo sistema financiero global antes de la guerra, pero sus aliados no estuvieron de acuerdo. En 1946, solo después de que EEUU lanzara dos bombas atómicas sobre Japón, estos se alinearon. Con el acuerdo de Bretton Woods, los imperialistas estadounidenses impusieron el dólar como principal moneda del mundo a la debilitada Inglaterra y otras potencias imperialistas occidentales. El dólar, vinculado al patrón oro, reinaba supremo.

En 1973, después de gastar enormes sumas de dinero en la guerra de Vietnam, EEUU no tenía suficientes reservas de oro para respaldar al dólar.

Pero los imperialistas estadounidenses controlaban el petróleo más valioso y abundante del mundo, en Arabia Saudita. En 1973 convencieron a los saudíes a vender petróleo solo en dólares a cambio de garantías de seguridad. Otros países productores de petróleo siguieron su ejemplo. Esto marcó el nacimiento del petrodólar.

Esto les dio a los imperialistas estadounidenses una gran ventaja. Podían comprar bienes y atraer inversiones de todo el mundo y simplemente imprimir dólares a cambio. Otros capitalistas se vieron obligados a invertir en la economía estadounidense y a comprar dólares para comprar petróleo. Los capitalistas productores de petróleo se vieron obligados a invertir sus excedentes de dólares en la economía estadounidense, comprando armas, otros bienes y la deuda estadounidense.

Esta ventaja ahora se está evaporando.

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