Desde EE. UU. a Perú: Los Obreros Necesitamos la Revolución Comunista, No Cambio de Régimen

Trump Enjuiciado, El Mundo en Guerra aquí ♦ Centinela Resuelto: Plan de EE. UU. para el Fascismo y la Guerra aquí ♦

Lima, Perú, 2020 – Mineros en huelga

Trump Enjuiciado, El Mundo en Guerra: Nosotros, la Clase Obrera, Necesitamos la Solidaridad Comunista

11 de junio-Planes de guerra. Eso es lo que el expresidente estadounidense Trump escondió en cajas en su bañera. Eso es lo que mostró a sus compinches. Por eso se enfrenta a cargos criminales por violar la Ley de Espionaje.

Porque el sistema de ganancias de EE. UU. (capitalismo) está perdiendo en su competencia global con China y otras potencias (también capitalistas). La guerra -si pueden ganar una- es la única esperanza de los especuladores estadounidenses. Los documentos militares y diplomáticos secretos que Trump se llevó podrían dificultarles ganar esa guerra.

Trump No es el Primer Líder Mundial Arrastrado a los Tribunales.

El israelí Netanyahu está siendo juzgado por fraude, soborno y abuso de confianza. La respuesta de su partido: intentar imponer el control político sobre los tribunales. Las protestas callejeras masivas continúan desde hace meses.

El expresidente francés Sarkozy está apelando su condena a un año de cárcel por corrupción y tráfico de influencias. Los sudafricanos Zuma y Ramaphosa esperan juicio por cargos similares.

El ex primer ministro malasio Najib Razak está en la cárcel por corrupción. En Perú, todos los presidentes menos uno que ocupó el cargo entre 1985 y 2018 han sido arrestados o acusados.

Trump también es descaradamente corrupto. Pero ninguno de los otros casos implicaba planes de guerra de alto secreto.

Trump y la Clase Capitalista Estadounidense

En el sistema de ganancias, No hay mucha diferencia entre “corrupción” y como “normalmente funciona el capitalismo”. Los individuos ricos, las grandes corporaciones y los bancos todos “velan primeramente por sus propios intereses “. Compiten para maximizar las ganancias.

Pero juntos, estos explotadores forman una clase capitalista. Sus gobiernos aseguran su capacidad de explotar a las masas. Democráticos o no, gobiernan sobre las masas para beneficiarse a sí mismos. La ley está en nuestra contra, no en contra de Trump.

Los gobiernos nacionales también luchan por su clase capitalista contra las naciones rivales. Los más fuertes utilizan sus gobiernos para dominar a las masas en otros lugares. Luchan entre sí por eso. Esto se llama “imperialismo”. Significa guerras constantes, incluso mundiales.

El imperialismo estadounidense vivió con la corrupción de Trump. Pero robar planes de guerra secretos y enseñarlos por ahí… no. Los medios liberales lo llaman “traición a la nación”. En realidad, es traición a su clase capitalista.

Trump, cuando presidente, adulaba a Putin de Rusia. Esto mientras el imperialismo de EE. UU. se preparaba para enfrentar al imperialismo ruso en Europa del Este.

Ahora, EE. UU. y sus aliados de la OTAN están intensificando su apoyo a la contraofensiva de Ucrania contra Rusia. ¿Cómo podría haber utilizado Trump los planes secretos de guerra robados? ¿Venderlos? ¿Dárselos a Putin?

La guerra en Ucrania debilitó a Rusia incluso antes de la contraofensiva. Los adversarios de Putin se están organizando, apoyados por Estados Unidos y sus aliados. La reelección de Trump pondría en peligro toda la posición de EE. UU. en Europa.

Trump no ha sido enjuiciado para “salvar la democracia y el Estado de Derecho”, como dicen los liberales. Fue para preparar al imperialismo estadounidense para más y mayores guerras.

El Mundo está Cambiando más Rápidamente de lo que Pensamos.

Pueda que vivas en Ucrania, Etiopía, Yemen, Myanmar u otro lugar que ya esté en guerra. O te enfrentes a escasez de combustible o cereales o a recortes (despidos) debido a las guerras. Cada guerra local es parte de una guerra mundial mucho más grande que probablemente cambiará todas nuestras vidas.

A veces las elecciones nacionales no son más que “concursos de belleza”, incluso cuando se ponen feas. Pero a veces reflejan divisiones más profundas entre los gobernantes capitalistas. Eso podría significar decidir con quién aliarse, y cómo, en el conflicto cada vez más agudo entre Estados Unidos y China/Rusia.

No siempre está claro cuales luchas políticas son así. ¿La división entre los tories británicos? ¿Israel, que -junto con Arabia Saudí- se está inclinando desde Estados Unidos hacia China? ¿La India, con el ataque de Modi a Rahul Gandhi?

Lo que está claro es que no podemos apoyar a ninguna nación o facción capitalista. Nosotros también formamos una clase: la clase obrera internacional. Todos aquellos cuyo hogar depende de un sueldo para sobrevivir. Todos los que sobreviven sin él. Todos nosotros, vivamos donde vivamos.

La clase capitalista intenta imponernos su mentalidad de perro come perro. Ellos pueden sobrevivir y prosperar así, pero nosotros no. Necesitamos lo contrario: Solidaridad obrera comunista.

Un Partido Comunista Obrero Internacional más grande y fuerte y una revolución armada derrotarán al capitalismo y construirán el mundo comunista que necesitamos, sin dinero ni fronteras.

Las guerras crecientes crean más oportunidades. Los capitalistas obligan a la juventud obrera a ingresar a sus ejércitos para pelear en estas guerras. Debemos organizarlos para que usen sus armas y habilidades para liberar a nuestra clase.

Los capitalistas tienen sus planes de guerra, y nosotros tenemos los nuestros. Los nuestros no son secretos. Hazlos tus planes también.

Operación “Centinela Resuelto”: Respuesta de EE. UU. a la Creciente Influencia China y Rusia en América Latina.

23 de junio- El Comando Sur de Estados Unidos está llevando a cabo, desde 1º de junio al 29 de agosto, la operación “Centinela Resuelto 2023” en Perú. En él participan tropas de EE. UU., Perú, Gran Bretaña y otros seis países latinoamericanos.

Dos ejercicios de “asistencia humanitaria”, entre EE. UU. y América Latina, se han convertido en solo uno: entrenamiento de combate letal y control fascista de multitudes.

El imperialismo de EE. UU. necesita ambos. Uno, para militarmente alinear a los gobernantes latinos detrás de ellos para pelear contra el eje China-Rusia-Irán.

El otro, para intentar ahogar en sangre las rebeliones de los trabajadores latinoamericanos contra los niveles de vida cada vez más bajos que imponen la crisis y las guerras capitalistas.

A su vez, muestra la tendencia del capitalismo global: Hacia la Tercera Guerra Mundial y fascismo a nivel mundial. La rivalidad interimperialista, EE. UU. versus China-Rusia, acelera este proceso.

 El ex jefe del Comando Sur, Craig Faller, uno de los planificadores de este ejercicio, afirmó que “no se han tomado suficientes medidas para confrontar la amenaza que representan China y Rusia en la región”. Y concluyó: “Debemos invertir más en lo militar y la seguridad”.

Este ejercicio también respalda abiertamente a la presidenta fascista de Perú, Dina Boluarte. Fue nombrada presidenta después de que los militares peruanos destituyeran y encarcelaran al expresidente Pedro Castillo en un golpe de Estado, patrocinado por Estados Unidos, el pasado diciembre.

Es la respuesta de los gobernantes estadounidenses a la “ola izquierdista” que ha barrido América Latina desde 2018. En México, Argentina, Perú, Honduras, Chile, Colombia y Brasil se eligieron politiqueros ” izquierdistas” (léase antiestadounidenses).

Estos politiqueros representan a sectores de los gobernantes regionales que buscan aliarse con China y Rusia. Quieren una mayor tajada de las ganancias extraídas de la explotación de sus masas trabajadoras. Quieren mejores precios para sus recursos naturales, financiación para puertos, transporte masivo, minería y fábricas.

Ahora los gobiernos de los siete países más poblados de América Latina y sus seis mayores economías se han acercado más a los principales rivales de los gobernantes estadounidenses.
Los patrones estadounidenses no aceptan esto pasivamente. Derrocar a Castillo fue sólo el principio. Están empeñados en organizar un movimiento fascista en todo el continente para restablecer su control político.

Como era de esperar, el ejercicio se está llevando a cabo principalmente en el sur de Perú, centro de las mayores y más combativas protestas contra el gobierno de Boluarte.

Cientos de protestas masivas sacudieron Perú desde el derrocamiento de Castillo hasta mediados de marzo. Los manifestantes han bloqueado las principales carreteras, paralizando la mayor parte del país.

Boluarte desplegó a miles de policías y sacó al ejército a las calles. Han matado a más de setenta manifestantes. Han golpeado, encarcelado, torturado y “desaparecido” a miles de personas.

Aun así, las masas se preparan para otra “Toma de Lima” el 19 de julio. Boluarte está preparando 8,000 policías para aplastarlas. El “entrenamiento de control de masas” de Resolute Sentinel consiste en preparar a la policía y al ejército con las armas más letales y las tácticas fascistas desarrolladas por los gobernantes estadounidenses para aplastar las rebeliones de la clase obrera.

Las masas peruanas luchan heroicamente contra la superexplotación de los capitalistas nacionales y los imperialistas. El salario mínimo es de 11,75 dólares por día. La edad de jubilación es de 75 años, ¡pero la esperanza de vida es de sólo 72 años!

Las demandas de las masas incluyen la liberación de Castillo de la cárcel, la dimisión de Boluarte, nuevas elecciones y la redacción de una nueva constitución.

Estas demandas no representan en ninguna manera los intereses de la clase obrera. Sólo cambiarán la cara y el color de la piel del explotador. No harán nada para acabar con la esclavitud asalariada capitalista ni con el racismo y el sexismo que esta necesita para mantenernos divididos y esclavizados.

Las potencias imperialistas como China y Rusia, que luchan por acabar con el control mundial del imperialismo estadounidense, no tienen nuestros intereses en mente. Quieren ser ellos los que exploten nuestra fuerza de trabajo, extraigan los recursos naturales del mundo lo más barato posible y nos esclavicen en sus fábricas y minas.

Sólo luchando por el comunismo podremos acabar con la explotación, la pobreza, el ultraje y los asesinatos que no imponen los capitalistas e imperialistas.

En un mundo comunista sin capitalistas, dinero ni esclavitud asalariada, no habrá guerras fratricidas, fronteras ni naciones que defender. Produciremos y distribuiremos colectivamente todo según las necesidades de todos. Acabaremos por fin con el racismo, el sexismo y otras divisiones creadas por las sociedades de clases.

Los patrones sólo pueden ofrecernos miseria, fascismo y guerra. Nosotros podemos y debemos organizar el PCOI en un partido de masas que dirija un Ejército Rojo de millones de personas para derrocar el capitalismo y construir el comunismo en todo el mundo. Únete a nosotros!

Los Ángeles (EEUU), 21 de junio—Miles de miembros del Gremio de Escritores de América Oeste (Writers’ Guild of America, West) marcharon en el día 50 de su huelga contra los grandes estudios cinematográficos.

Primera página de esta edición

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