Rebeliones Juveniles Sacudiendo Bangladesh y Kenia Necesitan Una Perspectiva Comunista

Rebelión Estudiantil en Bangladesh Inspira a Obrerxs de la Confección en India aquí ♦ La Juventud Keniana en Rebelión aquí ♦


Dhaka, Bangladesh, 18 de julio de 2024

Rebelión Estudiantil en Bangladesh Inspira a Obrerxs de la Confección en India

BENGALURU (India), 30 de julio— “Mi abuelo se unió a los Mukti Bahini (luchadores por la libertad) en 1970 en Pakistán Oriental. El ejército paquistaní estaba masacrando pueblos y ciudades. No tenía otra opción: o se unía a los Mukti Bahini o lo mataban”. Un compañero en Bangladesh contó esta historia mientras todo el país estaba envuelto en manifestaciones estudiantiles. El gobierno cerró el Internet, llamó al ejército, mató a miles de personas y arrestó a muchas decenas de miles.

Un grupo de estudiantes en Dhaka comenzó la protesta a principios de junio. Bangladesh experimenta un desempleo juvenil del 40%. La inflación galopante y la falta de empleos han afectado a muchos estudiantes cuyos padres apoyaron su educación universitaria. Muchos de esos padres son trabajadores textiles, la mayoría de ellos mujeres solteras. Estaban al frente de una protesta masiva que, en una semana, se convirtió en una insurrección nacional contra el gobierno. La causa fundamental de la insurrección se remonta a la guerra civil de 1970 en Pakistán Oriental. El actual gobierno de Bangladesh quiere dar a los descendientes de Mukti Bahini un trato preferencial (cuota) en el empleo.

Pakistán Oriental (población de unos 60 millones) era visto como una fuerza de ocupación. Estaba controlado económicamente por el ejército paquistaní, principalmente de Pakistán Occidental. Pakistán Oriental fue separado de la India durante una sangrienta división religiosa impuesta por los imperialistas en 1947.

El imperialismo británico gobernaba la provincia de Bengala. Convirtió a Bengala Oriental en Pakistán Oriental porque la mayoría de la población era musulmana. Bengala Occidental, predominantemente hindú, permaneció con la India.

Mil quinientas millas separaban a Pakistán Occidental de Pakistán Oriental. Pakistán Occidental siguió dominando la economía de Pakistán Oriental.

La exitosa revolución en China (1949) inspiró a los trabajadores de Pakistán Oriental y Bengala Occidental a organizar partidos comunistas maoístas. De 1972 a 1975, los comunistas de Bengala lideraron una insurrección violenta masiva. Se previó la propagación de la Gran Revolución Cultural Proletaria desde China a la India y Pakistán Oriental.

Sin embargo, los líderes comunistas chinos se estaban convirtiendo en capitalistas. Un poderoso movimiento comunista en la India los amenazaría. Por lo tanto, los gobernantes chinos apoyaron a los EE. UU. en armar al ejército de Pakistán Occidental para reprimir a las masas en Pakistán Oriental. Mataron a más de tres millones de personas.

Eso alienó completamente a las masas. La población de Bengala Oriental, con la ayuda de la India y la Unión Soviética, formó la fuerza de liberación Mukti Bahini, expulsó a las fuerzas paquistaníes y creó Bangladesh.

En la década de 1970, Mukti Bahini era un ejército guerrillero. A veces luchaba contra tanques suministrados por los EE. UU. solo con palos y piedras. Las masas tenían grandes esperanzas de que cambiaría el sistema capitalista. Pero una vez en el poder, se convirtió en un ejército capitalista jerárquico de una nueva clase capitalista.

Obrerxs de la Confección Organizan Hoy para el Comunismo Verdadero

Los nuevos capitalistas de Bangladesh vieron la necesidad de un desarrollo industrial a gran escala. Como la producción de prendas de vestir en los EE. UU. y Europa se estaba volviendo cara, se embarcaron en la construcción de la industria de la confección. Esta creció rápidamente. Ahora es la segunda más grande del mundo. El porcentaje de mujeres trabajadoras aumentó del 26% en 1970 a ser casi todas las trabajadoras en la actualidad. Producen el 80% de las divisas de Bangladesh.

Las condiciones de las trabajadoras de la confección son espantosas. Abuso sexual, trabajo infantil, falta de pensiones, largas horas en fábricas abarrotadas a 40 °C (104 °F), edificios inseguros: todo esto está haciendo que más mujeres vean la necesidad de cambiar el sistema de esclavitud salarial.

Nuestro Partido, el PCOI ha podido contactar a algunos trabajadores que recibieron Bandera Roja. Un trabajador que conocemos desde hace muchos años está tomando más interés durante esta rebelión. Es un organizador sindical de masas. Aunque se ha afiliado a otro partido, simpatiza con nosotros. Nos ha puesto en contacto con otros trabajadores de la confección.

Los camaradas de Bengaluru están entusiasmados con este desarrollo. El colectivo de la confección escribió un volante llamando a convertir la rebelión masiva en Bangladesh en una revolución comunista. Dice en parte:

“Sus consignas desafiantes nos llegan a miles de millas de distancia. Tienen una historia de 500 años de lucha. Desde los ocupantes británicos hasta los capitalistas actuales, apunta a una única solución. Necesitamos destruir el capitalismo y su esclavitud asalariada.

“Podemos construir una nueva sociedad en la que decidiremos nuestro destino sin capitalistas codiciosos. Construiremos casas, ropa y alimentos que necesitamos. Esto no solo es posible, sino que es la única solución.

“Para lograrlo, debes unirte a nuestro Partido. Cuando las obreras se unen al PCOI, pueden dar liderazgo a la lucha contra el capitalismo. Las obreras y obreros serán más entusiastas. Tenemos algunas obreras en Sri Lanka y, juntas, lucharemos y ganaremos”.


Bangladesh, desde 1971

La Juventud Keniana en Rebelión
Vientos del Cambio Sacuden el Castillo de Naipes del Capitalismo

SUDÁFRICA, 24 de julio— Las protestas masivas lideradas por jóvenes en Kenia comenzaron como un movimiento de activismo digital, con jóvenes airados por un proyecto de ley de impuestos del gobierno. Desde entonces, se ha convertido en una protesta generalizada sin líderes en todo Kenia. Exige la renuncia del presidente, William Riuto, y reformas gubernamentales para eliminar la corrupción.

Desde el principio, el PCOI predijo que esta protesta tenía el potencial de extenderse a otros lugares de África y más allá. Mientras escribimos, los gobiernos de Uganda y Nigeria han arrestado a miles de jóvenes mientras intentan reprimir protestas similares.

Esto demuestra que el podrido sistema capitalista es como un castillo de naipes: cuando soplan los vientos del cambio, se tambalea. Sin embargo, lo que falta en estas protestas es una perspectiva y un liderazgo comunista. ¡Con ese liderazgo, los vientos alcanzarían la fuerza de un huracán! Sin él, las protestas solo pueden conducir a ganancias temporales. Esas ganancias se revertirían con el tiempo. Ahora, mientras hablamos, hay un gran éxodo de jóvenes del continente africano. Millones de ellos se han ido en busca de mejores oportunidades en América, Europa y Oriente Medio. Debido al racismo, la xenofobia y la pobreza impuesta por el capitalismo, a la mayoría se les niegan los medios legales para viajar. Como resultado, el mar Mediterráneo se ha convertido en un cementerio para miles de nuestros hermanos de clase.

Es por eso por lo que, como el PCOI, luchamos por una sociedad comunista en todo el mundo. Con el comunismo, no habrá fronteras que cruzar. La gente se moverá libremente. Es más, eliminaremos la base material del racismo, la xenofobia y la pobreza. Eliminaremos el capitalismo.

Ahora más que nunca necesitamos fortalecer el trabajo del Partido mediante la construcción de más colectivos. Los jóvenes de todo el mundo están siendo excluidos por el sistema de los patrones. Algunos han recurrido al alcohol y las drogas por desesperanza. Es por eso que necesitamos un Partido fuerte para superar estos desafíos.

Por último, necesitamos utilizar las redes sociales para llegar, no solo a estos jóvenes trabajadores en Kenia, Uganda y Nigeria, sino también aquí en Sudáfrica. Cualquier cosa que no sea una revolución comunista nos llevará de nuevo a la miseria en la que nos encontramos hoy.

“Como comentario personal, o debería decir como crítica personal”, dijo un joven dirigente, “tengo que mostrar más confianza en nuestra línea política hablando más de ella con mis amigos, colegas y vecinos. Honestamente, tenemos una línea superior”.

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