Huelga de Boeing: Construyendo Unidad Comunista Entre Trabajadores Escolares, Estudiantes, Obreros Subcontratistas

Construyendo Unidad Comunista Entre Trabajadores y Estudiantes aquí ♦ Lxs Obrerxs Industriales Son Importantes aquí ♦


TORRANCE (EE. UU.), 27 de septiembre— Los obreros de Lisi, una fábrica subcontratista de Boeing, se detuvieron para recibir ejemplares de Bandera Roja y un volante comunista sobre la huelga de Boeing. “Les deseo lo mejor”, dijo uno.

Construyendo Unidad Comunista entre Trabajadores y Estudiantes

El colectivo de Seattle distribuye Bandera Roja regularmente en la planta Boeing de Renton y en tres escuelas secundarias de Seattle. Cientos de trabajadores y estudiantes reciben cada edición. La huelga de Boeing nos ha dado la oportunidad de dejar en claro la conexión entre el trabajo escolar y el trabajo industrial de Boeing. Escribimos un volante, que estamos distribuyendo en las escuelas secundarias junto con el periódico. Habla de la fuerte conexión entre los empleados y estudiantes escolares y los obreros de Boeing.

Los trabajadores de la educación capacitan a una nueva generación de trabajadores que ingresarán al ejército y trabajarán en las fábricas. A los trabajadores de la educación se les dificulta el tener demasiados estudiantes en sus clases. La escasez de personal significa que algunos estudiantes no reciben la ayuda que necesitan. Cuando los estudiantes no pueden cumplir con los objetivos, se les culpa a los maestros.

Los obreros de Boeing producen aviones para que los patrones los vendan y obtengan ganancias. Los trabajadores también fabrican armas que son usadas en las guerras patronales, como en Gaza y Ucrania. Los obreros se ven forzados a acelerar la producción y trabajar en condiciones inseguras. Cuando los aviones fallan, se les culpa a los trabajadores.

El volante explicó que el capitalismo crea estas condiciones. Y que la única manera de acabar con esto es mediante una revolución por un mundo comunista, sin dinero, patrones, esclavos asalariados, fronteras, racismo y sexismo.

Incluimos una parte del poema de Langston Hughes “Buenos días, revolución” e invitamos a los estudiantes y educadores a participar con nosotros en las líneas de piquetes.

El volante ha sido muy bien recibido. Esperamos convertir los contactos que estamos haciendo con los trabajadores escolares y los estudiantes en relaciones comunistas para construir el PCOI y avanzar la lucha por un mundo comunista. Algunos trabajadores escolares ya han ido a las líneas de piquetes y están organizando a otros para que se unan a ellos.

Nuestro objetivo principal no es “ganar” una huelga, sino ganar a trabajadores a unirse al PCOI y luchar por el comunismo. Todos tienen algo que aportar a la lucha. Cuando nos integramos más a ellos, podemos políticamente luchar juntos y entre nosotros. Esto significa un compromiso esencial y de largo plazo, que incluye altibajos. ¡Es la única manera como la clase trabajadora puede triunfar!

—Camaradas de Seattle

De «Buenos Días, Revolución» de Langston Hughes

Oye, Revolución,

somos socios, ¿comprendes? —

Podemos apoderarnos de todo:

Fábricas, arsenales, casas, barcos,

ferrocarriles, bosques, campos, líneas

de ómnibus, telégrafos, radios

(¡Dios! ¡Que revienten de música los radios!)

Siderúrgicas, minas de carbón,

pozos de petróleo, gasolina,

todos los medios de producción

(¡Gran día que amanece!)

Todo—

y devolverlo a quienes lo trabajan.

Gobernarlo nosotros, los que trabajamos.

Lxs Obrerxs Industriales Son Importantes

Cinco o seis jóvenes obreros de Boeing salían del local del sindicato IAM en Seattle después de votar para autorizar la huelga. Una camarada se acercó a ellos con nuestro volante del PCOI y Bandera Roja. Todos se alegraron de recibir ambos.

Dijeron que definitivamente estaban listos para irse en huelga contra Boeing. La camarada dijo: “Apuesto a que están cansados de que los culpen por los fracasos de Boeing en producir aviones seguros”. Todos respondieron “¡Sí!” y agregaron, “¡No nos pagan lo suficiente! ¡No contratan suficiente gente y luego nos culpan!”.

La camarada dijo que, también, algunas personas que están furiosas por el genocidio en Gaza culpan a los obreros de Boeing porque el gobierno de EE. UU. y Boeing envían aviones de guerra y bombas a Israel para masacrar trabajadores palestinos. Ella les dijo: “Ustedes no son el problema. Ustedes son la solución”.

“Somos importantes”, dijo un joven obrero.

La camarada les habló de los obreros de Putilov en Rusia que, en 1917, fabricaron tanques y armas y los llevaron directamente al frente revolucionario. “Obreros como ustedes son claves para la revolución comunista que necesitamos para terminar con la explotación y el genocidio. Los trabajadores Podemos dirigir el mundo”.

“Me gusta la forma en que piensas”, dijo otro joven obrero.

Esperamos verlos en las líneas de piquetes.

—Una camarada

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