India y El Salvador: Obreros Comunistas de la Confección Luchan Contra La Esclavitud Asalariada

Las contradicciones del Capitalismo Atacan a Los Trabajadores de Gaza a Bengaluru aquí ♦ Los Obrerxs de Las Maquilas Lucha Por Un Mundo Comunista aquí ♦


Las contradicciones del Capitalismo Atacan a Los Trabajadores de Gaza a Bengaluru – “Profunda Oportunidad de Derrocar La Esclavitud Asalariada” Con La Revolución Comunista

BENGALURU (India), 25 de febrero— “Cada vez que produzco más camisas, veo menos trabajadores”, dijo Anoli en nuestra reunión del PCOI. “El propietario tiene como objetivo aumentar la producción en un 20%. ¿Cómo es posible aumentar la producción con menos trabajadores? Debemos dedicar más horas y trabajar con el nuevo sistema computarizado que nos obliga a completar nuestras tareas a una velocidad vertiginosa”.

Anoli lee Bandera Roja y lo distribuye entre sus compañeros de trabajo y vecinos. Están furiosos porque es tan difícil mantenerse al día con el costo de vida. Muchos quieren una solución a esta pobreza extrema. Al leer Bandera Roja, ven que los trabajadores de todo el mundo se enfrentan a condiciones similares.

“Así es como el capitalismo ataca constantemente a los trabajadores”, respondió rápidamente Mani. Se unió al PCOI hace dos años. “Producimos más y trabajamos duro, pero nuestros salarios bajan”. Los capitalistas compiten contra otros capitalistas por más producción a precios más baratos. En esta competencia feroz, los propietarios utilizan el sexismo extremo, el abuso sexual y la violencia para que no nos quejemos, por lo que aceptamos salarios más bajos y largas horas en la línea de producción.

“Los propietarios capitalistas también reemplazan a los trabajadores con herramientas eficientes”, continuó Mani. “En mi unidad, una máquina de corte automático crea seiscientas camisas listas para coser cada 10 minutos. Esto solía ser un proceso manual realizado por un diseñador de telas, un cortador y un separador. Ahora la computadora hace todo con cada diseño y cada grosor de tela”.

“Hacemos el trabajo más exigente y tedioso y ni siquiera tenemos tiempo para ir al baño”. Muchas jóvenes tienen infecciones renales, ya que trabajan largas horas sin descanso y sus dedos están demasiado entumecidos para levantar un vaso de agua. Se convierten en una extensión de la máquina.

“Pero vemos una gran oportunidad de derrocar este sistema de esclavitud asalariada si entendemos la contradicción”, concluyó Mani.

“La codicia de los propietarios capitalistas por obtener ganancias socava el propio sistema capitalista”, explicó la camarada Malika. “Crea un ejército de desempleados. Sustituye a los trabajadores por máquinas. Pero sólo los trabajadores producen riqueza para los capitalistas. Por lo tanto, menos trabajadores significa que las ganancias disminuyen. Esta es una verdad objetiva.

Los capitalistas tratan de superar esta contradicción comprando a su competencia. En Bengaluru, solo dieciséis fábricas de prendas de vestir producen el 80% de la producción. Hace apenas cinco años, había más de quinientas. Estas fábricas gigantes compiten con las de Bangladesh, Sri Lanka, El Salvador, Vietnam, Europa del Este y China”.

Los Trabajadores de La Confección Preguntan: ¿Cómo se Relaciona Nuestra Lucha con La Lucha en Gaza?

Algunos amigos vinieron a esta reunión colectiva por primera vez. Hablan de la furiosa guerra genocida contra Gaza en acción. Están extremadamente perturbados por los informes de atrocidades. Nos preguntaron cómo podíamos ayudar a lxs compañerxs en Gaza y cómo nuestra lucha se relaciona con la de ellos.

Bengaluru es el hogar de millones de trabajadores de la confección y otros trabajadores industriales. También es el hogar de algunos multimillonarios que se benefician de la industria de TI. Uno de ellos, Murthy, es dueño de la empresa Infosys, que tiene una alianza estratégica con la maquinaria de guerra israelí. Dijo: “Los jóvenes indios deberían trabajar al menos 70 horas a la semana si el país quiere competir con las economías emergentes”. Su hija está casada con el primer ministro británico.

Otro multimillonario, Adani, es dueño del puerto de Haifa en Israel. Sus empresas producen drones, municiones y, en colaboración con la mayor empresa de defensa israelí, Elbit, aviónica avanzada.

Las Contradicciones de Los Capitalistas los Impulsan a Intensificar El Fascismo.

“Empezamos a ver la conexión entre los fascistas Modi y Netanyahu”, dijo Fátima asistiendo por primera vez. “En Bengaluru, el partido gobernante fascista y sexista BJP es asesino. Amenazan a los trabajadores de la confección y especialmente a una organización sin fines de lucro que trabaja principalmente con trabajadoras embarazadas”.

“Los trabajadores de Gaza y Bengaluru tienen más en común”, concluyó el trabajador. “La carta de Gaza es muy poderosa cuando termina diciendo que el comunismo es el futuro”.

Sathya dijo: “El desempleo masivo obliga a los trabajadores a buscar trabajo en áreas muy peligrosas en todo el mundo. El mes pasado, muchos trabajadores desempleados hacían cola para trabajar en Israel porque el norte de la India tiene millones de desempleados. Toman rutas muy peligrosas para encontrar trabajo en Oriente Medio. Ahora van a El Salvador y Ecuador, esperando conseguir un trabajo en los EE. UU.”

“Este encuentro me da una fuerza enorme”, concluyó Anoli. “Me anima a construir nuestro Partido, nuestro PCOI. Llegué sintiéndome un poco deprimida por tantas cosas terribles que suceden a nuestro alrededor y en el mundo. Pero reuniones como esta son muy poderosas porque tenemos que eliminar este sistema salarial.

“Necesitamos a las masas con nosotros. Solo nosotros podemos hacerlo. Pondrán todo tipo de obstáculos para impedir que nos organicemos para el comunismo. Pero esos obstáculos crearán las condiciones para que las masas entiendan que solo el comunismo es el futuro”, finalizó, en medio de un gran aplauso.

“Las Elecciones Solo Cambian a Nuestros Verdugos”
Los Obrerxs de Las Maquilas Lucha Por Un Mundo Comunista

EL SALVADOR, 1 de marzo. —“Tuve que renunciar a mi trabajo en la fábrica para buscar uno en el que pudiera mejorar mi salario”, dijo un obrero organizado en el Partido Comunista Obrero Internacional. “Lo que ganaba ya no era suficiente para los gastos del hogar, aunque ahora signifique estar fuera de casa durante varios días y no ver a mi familia”.

“Me molesta escuchar a compañeros de la fábrica decir que están contentos con los resultados de las elecciones en El Salvador. ¡Como si esto nos ayudara a los trabajadores con nuestra difícil vida bajo este sistema patronal!”, dijo un líder obrero del PCOI.

“Nosotros, Los trabajadores organizados en el Partido”, continuó, “debemos luchar todos los días para conquistar un mundo donde las condiciones de explotación que vivimos, que se producen solo para generar ganancias para los patrones, se transformen en comunismo, el sistema de la clase obrera. En el comunismo, lo que producimos será para ayudar a nuestras vidas. Distribuiremos a cada uno de acuerdo a su necesidad y trabajaremos de acuerdo a nuestro compromiso y capacidad”.

El gobierno de El Salvador lleva a cabo luchas electorales todo el tiempo. Recientemente pasaron las elecciones para presidente y diputados. Ahora nos acercamos a las elecciones para alcaldes y diputados al Parlamento Centroamericano. Solo el 52% de los potenciales votantes participó en las elecciones presidenciales, donde suele votar el mayor número.

¿Cambia algo para la clase trabajadora cuando votas por un candidato? No. La vida de los trabajadores sigue sumergida en la explotación. Votar solo cambia a los verdugos que se dedicarán a reprimir a la clase obrera.

Un amigo del Partido que nos ayuda con Bandera Roja dijo: “En cinco años, de cien promesas, el gobierno solo ha cumplido una. No quiero saber nada de los políticos electorales”. El gobierno ha militarizado las calles e impuesto el régimen de excepción para reprimir cualquier intento de denunciar esta situación. La propaganda gubernamental hace creer a muchos que este país vive en el “primer mundo”.

El fascismo se acrecienta con las medidas de estos gobiernos capitalistas. Se presentan leyes para “detener la delincuencia” y “generar seguridad”. En realidad, tienen el objetivo final de, en un momento dado, reprimir las ideas comunistas que proclaman que toda la clase obrera debe tener un mundo con alimentación, vivienda y educación adecuadas.

En una reunión con algunos jóvenes dirigentes del PCOI en las maquilas, los compañeros discutieron la realidad de que los costos de los once productos de la “canasta básica” han aumentado en más de un 27%. El salario mínimo de un trabajador es de 10 dólares al día, y tiene que gastarlo diariamente en comida.

La Asamblea Legislativa aprobó 130 millones de dólares para las elecciones de 2024. Ese dinero podría haberse utilizado para suministrar medicamentos a hospitales que los necesitan mucho, o para reconstruir muchas escuelas que están en malas condiciones.

Sin embargo, quienes buscan los votos que les permitan seguir viviendo a costa de las masas hacen promesas, si es que las hacen, que nunca cumplirán.

Las elecciones no resuelven nada. La clase obrera debe organizarse en el Partido Comunista Internacional de los Trabajadores y luchar por el sistema comunista.

Solo el comunismo resolverá esta situación precaria que enfrentan los trabajadores. Frente al creciente fascismo, los trabajadores organizados en el PCOI, mujeres y hombres, luchan por conquistar un mundo nuevo que satisfaga las necesidades de todas las masas.

Lee Nuestro Manifiesto:

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Primera página de esta edición

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