Tormenta de Fuego en Los Ángeles aquí ♦ Presos en Primera Línea aquí ♦ Encarcelamiento Masivo Racista aquí ♦
La alcaldesa y el ayuntamiento de LA (Los Ángeles) recortaron el presupuesto de los Bomberos de LA en $23 millones para darle un aumento de $138 millones a la policía de LA – ¡ESTO ES GUERRA DE CLASES!
Tormenta de Fuego en Los Ángeles: Sólo los Trabajadores Pueden Salvar a los Trabajadores
CONDADO DE LOS ÁNGELES (EE. UU.), 9 de enero— “La gente se acercaba al Centro de Empleo de Pasadena y decía: ‘Esta es una donación personal, sólo quería ayudar’”, informó una voluntaria.
“Vi cómo la gente está dispuesta a donar su tiempo y energía para ayudar a personas que ni siquiera conocen”, observó.
Tres grandes incendios y una serie de incendios más pequeños han obligado a más de 100,000 personas a abandonar sus hogares en los últimos dos días. Las llamas han destruido miles de estructuras. Los grandes incendios están 0% contenidos.
Los grupos de “ayuda mutua” izquierdistas entraron en acción rápidamente. Tan pronto como las autoridades anunciaron las ubicaciones de los centros de evacuación, los voluntarios comenzaron a aparecer con suministros. Se dividieron en equipos para organizar la distribución. Pero cuando llegó la Cruz Roja, expulsó a los voluntarios que no se habían registrado en su sitio web.
¡La clase dominante está aterrorizada de la idea de que las masas nos organicemos! “Si diera mi opinión sobre la Cruz Roja, sería muy larga”, escribió un amigo.
El Capitalismo Es Un Desastre Antinatural
Este no es un “desastre natural”, sino un desastre capitalista. El afán capitalista de maximizar las ganancias utilizando combustibles fósiles creó la actual crisis climática.
Enero solía ser el pico de la temporada de lluvias, pero Los Ángeles ha recibido solo 0.16 pulgadas de lluvia en los últimos ocho meses. La lluvia del invierno pasado produjo una vegetación exuberante que se secó en el caluroso verano y ahora alimenta los incendios.
Los vientos secos “Santa Ana” que bajan del alto desierto solían soplar a más de 64 km/h. Ahora son huracanados, con ráfagas de más de 112 km/h. y hasta 214 km/h. bajando por los cañones.
¿Y qué hacen los polítiqueros capitalistas? El alcalde y el ayuntamiento de Los Ángeles recortaron el presupuesto de extinción de incendios en 23 millones de dólares el año pasado. ¡Dieron a la policía 126 millones de dólares adicionales para aumentos salariales! Ahora no hay suficientes bomberos ni equipo ni agua.
El gobierno federal está ofreciendo ayuda de FEMA. Hemos visto con el huracán Katrina y otros desastres cómo gran parte de ese dinero es desviado en lugar de ayudar a los trabajadores más necesitados. Y ese dinero no es nada comparado con los miles de millones de dólares que los gobernantes estadounidenses gastan para ayudar a los gobernantes fascistas de Israel y Ucrania a bombardear e incendiar en aras de obtener superganancias.
El gobernador llamó a la Guardia Nacional de California, pero ¿para qué? “Para detener a los saqueadores”. Lo mismo que la policía. ¿Por qué meses antes no llamaron a la Guardia Nacional para limpiar la maleza peligrosa?
Porque, como alguien publicó en un chat de las redes sociales de Ayuda Mutua, “su papel siempre ha sido servir y proteger la propiedad y a los ricos”.
Así que fueron los trabajadores inmigrantes del Centro de Empleo de Pasadena quienes hoy organizaron y capacitaron a más de cincuenta voluntarios para cortar y limpiar ramas y árboles caídos. Otros adultos y sus hijos organizaron una avalancha de donaciones de alimentos, agua y ropa.
Los Comunistas del PCOI en la Lucha
Algunos camaradas del Partido Comunista Obrero Internacional visitaron un centro de evacuación en un barrio obrero para distribuir literatura, hacer donaciones y hablar con la gente. Otros están participando con amigos en trabajos de socorro de base y compartiendo Bandera Roja con ellos. Algunos han ofrecido sus casas a los evacuados o a los que se quedaron sin hogar. Otros produjeron un volante comunista sobre los incendios y lo distribuyeron a los trabajadores del transporte público (MTA) junto con Bandera Roja. Algunos de nosotros conocemos a muchas personas que perdieron sus hogares.
El lema “sólo el pueblo puede salvar al pueblo” es cada vez más popular desde Quito hasta Los Ángeles. Pero ¿quiénes son “el pueblo”? Debemos tener claro que se trata de una lucha de clases. La clase trabajadora debe liderar a las masas para salvarnos del desastroso dominio de la clase capitalista.
Por supuesto que necesitamos la “ayuda mutua” para salvarnos los unos a los otros de lo peor que el capitalismo nos arroja. Al mismo tiempo, necesitamos salvarnos del capitalismo mismo. Para organizar una lucha revolucionaria por el poder. Para construir una sociedad comunista basada en la “ayuda mutua”, no en mercados. Para ganar un mundo organizado “de todos según su capacidad y compromiso, para todos según sus necesidades”.
La organización de ayuda mutua más poderosa que podemos construir es el Partido Comunista Obrero Internacional. Por favor, únetenos y aporta tus ideas, tu energía y tus habilidades.
Presos en Primera Línea Combatiendo Incendios en California
LOS ÁNGELES, 12 de enero— “Mi primo estuvo en un campamento de bomberos en 2009 cuando tenía 18 años y estaba encarcelado. ¿Crees que las masas son conscientes de que California ha estado utilizando mano de obra penitenciaria para combatir los incendios?”, preguntó un camarada a otra. Estaban distribuyendo volantes en un supermercado y hablando con los trabajadores sobre la tormenta de incendios.
“No creo que la gran mayoría de las masas estén conscientes de esta explotación”, respondió ella.
Las llamas están destruyendo el sur de California a niveles históricos. Han consumido más de doce mil estructuras y amenazado las vidas de cientos de miles de personas.
Esta tormenta de fuego ha expuesto nuestra vulnerabilidad masiva a los desastres inducidos por el clima creado por el capitalismo. También ha expuesto la explotación racista de muchos obreros combatiendo estos incendios. La mayoría de los que están en la primera línea son presos que participan en el programa de campamento de bomberos del Departamento de Correcciones. Casi mil presos están en la primera línea.
Los prisioneros que se ofrecen como voluntarios arriesgan sus vidas por salarios que van desde apenas 16 a 74 centavos de dólar la hora. Eso equivale a sólo $5.80 al día (110 rands, 499 rupias). Los presos que combaten incendios forestales tienen cuatro veces más probabilidades de sufrir lesiones que los bomberos profesionales. Sin embargo, se les trata como mano de obra barata en lugar de como individuos valiosos que merecen reconocimiento por su valentía.
Además, al cumplir sus condenas, se enfrentan a enormes obstáculos para conseguir empleo a pesar de su experiencia. Han sido entrenados por bomberos en habilidades que requieren inmenso valor, disciplina y trabajo en equipo. Pero esto rara vez se traduce en oportunidades profesionales debido a su condición de delincuentes convictos.
¡Qué hipocresía capitalista! Estados Unidos se prepara para inaugurar a un delincuente convicto como presidente de los Estados Unidos. Entonces, ¿por qué un expreso no puede ser empleado como bombero?
El Capitalismo Ha Fracasado: Necesitamos el Comunismo
Esta explotación subraya los fallos sistémicos de un Estado capitalista que valora las ganancias por encima de las personas. Deja vulnerables tanto a las comunidades como a los prisioneros para que soporten el peso de una crisis evitable.
Estos incendios podrían haberse evitado o minimizado si hace meses hubieran asignado recursos y mano de obra a la limpieza de la maleza, el mantenimiento de las líneas eléctricas y otras medidas preventivas.
Sin embargo, nuestra infraestructura capitalista prioriza las ganancias por encima de la prevención. Asegura que la fuerza laboral se despliegue de manera reactiva en lugar de proactiva. En lugar de invertir en soluciones sostenibles, nos quedamos lidiando, año tras año, con desastres evitables.
Un mundo comunista se guiará por principios de la equidad y el bienestar comunitario. La mano de obra se asignará no solo para combatir los incendios sino para prevenirlos. Aquellos que cometan actos antisociales contribuirán a la sociedad de maneras que se les enseñé habilidades útiles y fomenté la rehabilitación. En cambio, el capitalismo perpetúa ciclos de explotación.
Trabajadores en todo el mundo están despertando a la realidad de que NOSOTROS no tenemos a nadie más que nosotros. Luchemos por una sociedad que valore la vida humana y elimine el lucro, que invierta en prevención, rehabilitación y el bienestar colectivo. Podemos construir un mundo mejor, uno en el que nos cuidemos los unos a los otros y aseguremos de que nadie se quede atrás.
De las cenizas de este sistema fallido, levantémonos juntos y forjemos una sociedad comunista enraizada en lucha y solidaridad.
Encarcelamiento Masivo Racista: Una Característica del Capitalismo Estadounidense en Decadencia
En 1972, los gobernantes estadounidenses encarcelaron a menos de 300,000 personas. Ahora hay casi dos millones, poco menos del pico de 2.3 millones en 2008. Estados Unidos tiene el mayor número de presos en el mundo.
Una cuarta parte de esos prisioneros son latinos. Los prisioneros negros y blancos representan respectivamente alrededor del 30% de los prisioneros. Eso en un país donde los latinos son el 19% de la población, los negros son el 14% y los blancos son el 59%. Los nativos americanos y nativos de Alaska son encarcelados a tasas casi tan altas como los trabajadores negros.
Y solo uno de cada millón de prisioneros es rico. Las cárceles, como todo en el capitalismo, son punta de lanza para atacar a toda la clase obrera.
El brote de crecimiento comenzó en la década de 1970, con el declive a nivel mundial del poderío de EE. UU. después de su derrota en Vietnam y el embargo petrolero de la OPEP. En los años 1980 y 1990 se aceleró este proceso. Las fábricas empezaron a cerrar en todo EE. UU. El desempleo masivo devastó las comunidades obreras. La clase dominante recordó las rebeliones de obreros, soldados y marineros lideradas por obreros negros en los años 1960 y emprendió una estrategia de “martillo y piedra”.
Eso significó introducir cocaína crack en las ciudades y una “guerra contra las drogas” centrada en arrestar a sus adictos. Una vigilancia policial agresiva racista en las grandes ciudades se enfocó en los barrios pobres negros y latinos. La policía racista corrupta incriminó a jóvenes negros y latinos. Los delincuentes no violentos fueron encarcelados. Las leyes de “tres strikes” significaron sentencias de prisión más largas, proyectos masivos de construcción de prisiones y una tremenda expansión de la explotación laboral de los presos.
Solo en California se construyeron veinte nuevas prisiones, que ahora están seriamente superpobladas. En particular, cada vez más hombres y muchachos negros y latinos son atrapados por el sistema penitenciario. Una forma de salir es ingresar a un escuadrón de bomberos.